"Espa?a intenta ayudar a que otros pa¨ªses de la UE mejoren su interlocuci¨®n con Cuba"
Miguel ?ngel Moratinos acaba de salir del Palacio de la Revoluci¨®n. Ra¨²l Castro, el presidente en funciones de Cuba, lo ha recibido poco antes de concluir su visita a Cuba. En las ¨²ltimas 48 horas el ministro de Asuntos Exteriores se ha reunido con numerosos dirigentes cubanos, con los que ha acordado establecer un di¨¢logo formal sobre derechos humanos y el restablecimiento de la cooperaci¨®n. Un acercamiento pol¨ªtico que pretende convertir a Espa?a en actor e interlocutor privilegiado de cara al futuro, pero que ha sido muy criticado por la oposici¨®n.
Pregunta. ?Qu¨¦ impresi¨®n le ha causado Ra¨²l Castro?
"Creo que estamos ante una situaci¨®n nueva donde se producir¨¢n cambios. Corresponde al pueblo cubano determinar qu¨¦ cambios y cu¨¢ndo"
"Para Espa?a la relaci¨®n con Cuba es una obligaci¨®n, para otros pa¨ªses es una opci¨®n"
Respuesta. Es una personalidad pol¨ªtica cordial, muy afable, pero tambi¨¦n muy segura. Se nota que sabe ad¨®nde quiere ir, que habla cuando tiene que hablar, que entiende que cada cosa tiene su momento. Y es una persona que quiere avanzar con nosotros, con el Gobierno de Espa?a, en este marco de confianza, de di¨¢logo y de respeto mutuo. Ha sido una larga e intensa reuni¨®n, de casi dos horas, y hemos hablado de todos los problemas que nos interesan, del presente, del futuro, y he encontrado en ¨¦l una actitud de comprensi¨®n.
P. ?Han hablado de la salud de Fidel Castro?
R. Me dijo que sigue recuper¨¢ndose, poco a poco, y que est¨¢ mejor.
P. Tras sus conversaciones de estos d¨ªas, ?hacia d¨®nde cree que va Cuba? ?Sucesi¨®n? ?Transici¨®n? ?Continuidad?
R. Creo que estamos ante una situaci¨®n nueva, donde l¨®gicamente se producir¨¢n cambios. Corresponde al propio pueblo cubano determinar qu¨¦ cambios, cu¨¢ndo y con qu¨¦ ritmo realizarlos. Espa?a quiere estar ah¨ª para acompa?ar y ayudar.
P. Cuba declara que no har¨¢ ninguna concesi¨®n pol¨ªtica y que el socialismo es irrenunciable. ?Esto es compatible con sus esfuerzos de acercamiento?
R. Espa?a siempre ha defendido una interlocuci¨®n fluida con todos los pa¨ªses latinoamericanos y Cuba no puede ni debe ser una excepci¨®n. El di¨¢logo puede ser cr¨ªtico, pero eso no es incompatible con el deseo de profundizar la relaci¨®n.
P. Usted ha argumentado como uno de los motivos de su viaje la necesidad de que Espa?a incremente su interlocuci¨®n con las autoridades cubanas. ?Cree que ha conseguido algo? ?Cu¨¢l es el pr¨®ximo paso?
R. Me he entrevistado con los principales representantes del pa¨ªs. Hace muchos a?os que un ministro espa?ol no hac¨ªa eso. As¨ª que la interlocuci¨®n con las autoridades ha mejorado sustancialmente. El pr¨®ximo paso es desarrollar esos di¨¢logos de manera estable.
P. Con Felipe Gonz¨¢lez hubo intentos de acercamiento similares y fracasaron. ?Espa?a sobrevalora su papel en Cuba?
R. No es ese el caso. Espa?a y Cuba siempre han estado muy pr¨®ximas por razones culturales e hist¨®ricas. Pocos pueblos nos resultan tan cercanos como el cubano. Los Gobiernos pueden reforzar o dificultar estos lazos de proximidad. Felipe Gonz¨¢lez intent¨® estrecharlos. Los gobiernos que le siguieron los dificultaron. Ahora, el Gobierno del presidente Jos¨¦ Lu¨ªs Rodr¨ªguez Zapatero vuelve a intentar reforzar la comunicaci¨®n entre los dos pa¨ªses. Lo hacemos porque esa pol¨ªtica responde a hechos hist¨®ricos y es una pol¨ªtica que tiene futuro, aunque tambi¨¦n sabemos que encierra dificultades.
P. Usted no ha visto a la oposici¨®n y tampoco ha sido excarcelado ning¨²n preso pol¨ªtico. ?No ha hecho Espa?a m¨¢s concesiones que Cuba?
R. He venido invitado por las autoridades de Cuba y he cumplido un programa dise?ado con este fin. No me he entrevistado personalmente con la oposici¨®n, pero, por supuesto, he hablado con las autoridades de la situaci¨®n de estos sectores cr¨ªticos de la sociedad y de los presos cubanos. Por otra parte, Espa?a desarrolla una pol¨ªtica propia de relaciones con la oposici¨®n cubana, cuyas modalidades y oportunidad dependen de cada ocasi¨®n. Esa pol¨ªtica no se ha suspendido en absoluto durante mi visita y seguir¨¢ vigente.
P. ?Habr¨¢ excarcelaciones despu¨¦s de su visita?
R. No lo s¨¦, pero es mi deseo y as¨ª se lo he transmitido al Gobierno de Cuba.
P. ?No ha sacrificado Espa?a a la disidencia?
R. Espa?a siempre ha mantenido un di¨¢logo con los sectores cr¨ªticos de la sociedad cubana y lo va a seguir haciendo. Por esos canales hemos recibido apoyos a esta visita y tambi¨¦n alguna opini¨®n contraria. Seguiremos hablando y actuando.
P. Las Damas de Blanco y otros opositores no han querido acudir a la reuni¨®n con la delegaci¨®n espa?ola.
R. Nosotros estamos abiertos a hablar con todo el mundo. Los que quieran venir a hablar con nosotros son bienvenidos. Tenemos siempre las puertas abiertas. Pero si otros las cierran... Nosotros seguimos con el mismo compromiso de defender los derechos humanos, esto se mantiene inalterable.
P. ?En qu¨¦ consiste el mecanismo creado para discutir sobre asuntos de derechos humanos?
R. En un procedimiento estable para abordar de modo constructivo todo lo relacionado con los derechos humanos. Ambos Gobiernos estamos de acuerdo en que el respeto de estos derechos es una prioridad de la actual agenda internacional. Tal coincidencia se ha revelado lo suficientemente fuerte como para traducirla en un di¨¢logo institucionalizado, pese a que Cuba y Espa?a tengan legislaciones muy diferentes en esta materia y no siempre la misma opini¨®n en los foros internacionales. Precisamente por eso el acuerdo alcanzado es valioso. Hablar entre pa¨ªses es necesario cuando hay diferencias. Cuba y Espa?a tienen ahora un marco para hacerlo regularmente.
P. En medios diplom¨¢ticos se ha interpretado su visita como un gesto de respaldo al Gobierno cubano. ?Es as¨ª?
R. Mi visita ha estado dirigida a potenciar la interlocuci¨®n entre los Gobiernos de Espa?a y Cuba. Ese era el objetivo y el resultado obtenido es satisfactorio. Hemos establecido un procedimiento de consultas pol¨ªticas y de di¨¢logo sobre derechos humanos, hemos convocado una reuni¨®n para potenciar la cooperaci¨®n cultural, y tambi¨¦n hemos comprobado que en breve se puede firmar un nuevo Acuerdo de Protecci¨®n y Promoci¨®n Rec¨ªproca de Inversiones e iniciar negociaciones para la refinanciaci¨®n de la deuda. Este es el contenido concreto del viaje.
P. Han acordado renegociar la deuda. ?Se reactivar¨¢ el cr¨¦dito oficial a la exportaci¨®n? ?Se conceder¨¢n nuevas l¨ªneas de cr¨¦dito?
R. Efectivamente, el Gobierno cubano ha presentado una oferta para solucionar el problema de la deuda, que estamos dispuestos a considerar en unas conversaciones que se iniciaran en breve. Eso podr¨¢ llevar la rehabilitaci¨®n de unas l¨ªneas de cr¨¦dito oficial para operaciones comerciales y de inversi¨®n. Hay que subrayar la presencia econ¨®mica de Espa?a y el papel de los empresarios espa?oles en la magnitud de esos intercambios e inversiones.
P. ?Es compatible todo esto con una pol¨ªtica com¨²n europea?
R. En Bremen tuve la oportunidad de hablar con mis colegas europeos y encontr¨¦ verdadero inter¨¦s por este viaje. Me compromet¨ª a informarles a mi regreso. Por supuesto que todo lo que llevo dicho es compatible con una pol¨ªtica com¨²n europea. Entre los europeos no tenemos un problema de incompatibilidades respecto a Cuba; lo que tenemos son diferencias t¨¢cticas y una asimetr¨ªa de relaciones bilaterales con Cuba que responde a la historia y la cultura. Para Espa?a la relaci¨®n con Cuba es una obligaci¨®n, para algunos pa¨ªses es una opci¨®n. Hay pa¨ªses fuera de la UE que podr¨ªan tener relaciones con Cuba y no quieren hacerlo. Esa es su opci¨®n, pero no la de Espa?a. Hay otros pa¨ªses en la UE que podr¨ªan mejorar su interlocuci¨®n con Cuba y Espa?a intenta a ayudar a ello, pero no es quien decide. Tambi¨¦n hay un buen n¨²mero de pa¨ªses de la Europa comunitaria que tienen su propia aproximaci¨®n a Cuba y resulta ser perfectamente compatible con la de Espa?a. A nuestro juicio, este deber¨ªa ser el camino a seguir por la UE como tal.
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