El tajo de la Luna sigue abierto

La plaza de Soledad Torres Acosta -o en su alias no oficial de plaza de la Luna-, est¨¢ a un paso de convertirse en la "puerta de la Gran V¨ªa", como pronostic¨® el alcalde de Madrid. Alberto Ruiz-Gallard¨®n anunci¨® en octubre un proyecto de reforma de este lugar, en pleno centro de Madrid. Pero, cuando las obras est¨¢n a punto de terminar -en mayo, seg¨²n una portavoz de la Concejal¨ªa de Medio Ambiente-, los vecinos est¨¢n disconformes con lo que el Consistorio dispone para la plaza.

"Nos quieren endilgar una reforma en la que no pintamos nada, como si fuera un proyecto participado", explica Jordi Gordon, de la Asociaci¨®n Vecinal Barrio de Universidad. "Y eso se derrumba cuando cada vez que queremos saber cu¨¢ntos bancos va a tener o c¨®mo se har¨¢ la zona de juegos, no nos hacen caso". Gordon agrega que participan en reuniones y hacen propuestas, sin lograr que sea un proyecto para un lugar "habitable", en vez de una explanada de cemento.

El espacio tendr¨¢ una zona di¨¢fana de 100 metros, 40 ¨¢rboles y un espacio para los ni?os

El alcalde present¨® en su d¨ªa un plan de remodelaci¨®n, dotado con cuatro millones de euros, que implicaba el cierre de la calle de Tudescos al tr¨¢fico, transformar la plaza en una gran explanada, con m¨¢s luz, el doble de ¨¢rboles, y rehabilitar las calles de Silva, Concepci¨®n Arenal y Miguel Moya. A bombo y platillo anunci¨® tambi¨¦n el acuerdo con los vecinos.

Atr¨¢s quedaban a?os de pol¨¦mica. Porque la plaza de Soledad Torres Acosta, y sus calles aleda?as, llevaban mucho tiempo convertidas en escenario de prostituci¨®n, drogas, inseguridad y, sobre todo, degradaci¨®n. Hasta que el vaso se derram¨®, lleno de agua. Justo un d¨ªa despu¨¦s de que los vecinos denunciaran en un v¨ªdeo c¨®mo la droga y las peleas constantes se hab¨ªan adue?ado del barrio, el pasado 23 de junio una mujer fue apu?alada en el centro mismo de la plaza, a media tarde y a la vista de todos.

Las promesas del Ayuntamiento para mejorar la situaci¨®n no tardaron en llegar. La polic¨ªa, municipal y nacional, comenz¨® a patrullar el lugar y eso redujo la inseguridad. Pero el espacio segu¨ªa adue?ado por la droga.

Los vecinos, respaldados por el estudio de arquitectura Ecosistema Urbano, optaron por presentar sus propuestas al Ayuntamiento. Primero reclamaron una playa, con chiringuito y todo. No fue aceptada. Despu¨¦s, cuando el Consistorio ya hab¨ªa iniciado sus obras de reforma, presentaron un proyecto con una alfombra verde de 80 cent¨ªmetros de tierra para crear un jard¨ªn de ¨¢rboles y c¨¦sped. Adem¨¢s, el dise?o incorporaba una terraza, juegos para ni?os, otra zona para gente mayor y hasta una zona wi fi para conectarse a Internet.

Tampoco col¨®. Seg¨²n el Ayuntamiento, no era "t¨¦cnicamente viable". Desde entonces, acuden peri¨®dicamente a reuniones con los t¨¦cnicos municipales y, aunque participan, sienten que eso no sirve. "El problema es que se va a acabar una plaza a toda pastilla para las elecciones", argumenta el representante vecinal, que ha convocado un encuentro vecinal para aunar posturas.

"Antes del fin de la legislatura, la plaza estar¨¢ abierta, aunque falten algunos remates", confirma una portavoz de la concejal¨ªa, que agrega que el proyecto est¨¢ consensuado con los vecinos "como la mayor¨ªa de las obras".