Canetti destilado

Al principio se trat¨® de una v¨¢lvula de escape. Una puerta de emergencia de s¨ª mismo y de su absorbente tarea. Al final, los aforismos resultaron ser un vaso comunicante con el conjunto de su obra. Una cartograf¨ªa destilada y sincera del pensamiento de Elias Canetti (Rutschucuk, Bulgaria, 1905-Z¨²rich, 1994). Aunque, seg¨²n ¨¦l mismo explic¨®, parte del encanto resid¨ªa en su convicci¨®n de que nunca los publicar¨ªa, el mismo a?o en que empez¨® a escribir sus notas realiz¨® una primera selecci¨®n.

Corr¨ªa el a?o 1942 y el nazismo arreciaba en Europa cuando el escritor Canetti, sefard¨ª pr¨®ximo a los c¨ªrculos intelectuales de la Viena de 1900, decidi¨® escapar de su trabajo en Masa y poder, "su gran obra", con una serie de apuntes y aforismos aparentemente inconexos. Se encontraba refugiado en Inglaterra junto a su esposa Veza y a Friedl Benedikt, disc¨ªpula y amante. No fueron ellas sino una tercera mujer, la pintora Marie-Louise von Montesiczky, la destinataria de la primera colecci¨®n de notas que el escritor reuni¨®. El cuadernillo Apuntes para Marie-Louise, que el propio Canetti copi¨® para su nueva amante y protectora, permaneci¨® in¨¦dito, oculto entre los papeles de ella hasta 2005.

"Lo ¨²nico que no se venga de ¨¦l son los apuntes", escribi¨® en 1973, cuando sus notas hac¨ªa tiempo que se hab¨ªan convertido en un adictivo vicio diario que sus editores alemanes insistieron en publicar. ?l s¨®lo accedi¨® a sacar a luz el 10%. En total, ocho colecciones que se publicaron entre 1965 y 1999, que aparecen reunidos en Apuntes (1942-1993) (Galaxia Gutenberg / C¨ªrculo de Lectores), cuarto tomo de las obras completas de Elias Canetti. Junto a sus t¨ªtulos de aforismos como La provincia del hombre, 1942-1972, o El suplicio de las moscas, se presenta por primera vez en castellano el libro que dedic¨® a Marie-Louise. Adem¨¢s la nueva edici¨®n incluye los pr¨®logos que Canetti escribi¨® para la publicaci¨®n de sus apuntes y la selecci¨®n original de las primeras colecciones, sin respetar los descartes posteriores que el propio Canetti realiz¨®.

El resto del material apuntado, el 90% que escapa a las m¨¢s de 1.100 p¨¢ginas de este libro, permanece in¨¦dito en los archivos personales junto a sus diarios y gran parte de su correspondencia. Hasta 2024 no podr¨¢n ser publicados, tal y como lo dispuso el propio autor.

Entre los esquem¨¢ticos apuntes, peque?as reflexiones, afinados juegos y observaciones que anot¨® a lo largo de casi 50 a?os, fund¨® un espacio an¨¢rquico y vasto en el que residen muchas de las ideas que el escritor y pensador desarroll¨® en sus libros. Pero no s¨®lo. "Canetti escribe en sus apuntes sobre todo lo que nos concierne", explicaba ayer el director editorial del nuevo volumen Juan Jos¨¦ del Solar, "el car¨¢cter fragmentario de los apuntes es un cauce que no acaba, son textos que se cierran en lo que es escritura y se abren a la reflexi¨®n".

Antropolog¨ªa, religi¨®n, filosof¨ªa, literatura, muerte, amor, el propio arte del aforismo y la pol¨ªtica son s¨®lo algunos de los temas que el escritor toca y mezcla en sus breves notas en las que tambi¨¦n hay hueco para comentar con afilada iron¨ªa y cierto distanciamiento acontecimientos cotidianos. "G. predice el destino de los premiados: suicidio, esterilidad, desesperaci¨®n ca¨ªda. Le pregunto por el destino de los no premiados", anot¨® en 1984 Canetti, que hab¨ªa recibido el Premio Nobel de Literatura tres a?os antes. Los apuntes acabaron convirti¨¦ndose en una "forma" en s¨ª misma, tal y como explica Ignacio Echevarr¨ªa en el pr¨®logo a esta edici¨®n.

La sede de C¨ªrculo de Lectores en Madrid acoge adem¨¢s la exposici¨®n El¨ªas Canetti: Poder y supervivencia, hasta el 9 de junio. Se trata de una versi¨®n reducida de la muestra realizada en 2005 en Z¨²rich, en la que se proyectan varios v¨ªdeos en los que habla Canetti, entre otros, con Adorno.

En el desorden que aparentemente impera en los apuntes, se incorpora en el nuevo volumen un minucioso ¨ªndice tem¨¢tico en el que Jos¨¦ Manuel Prada Semper lleva m¨¢s de 20 a?os trabajando. "He intentado buscar una ruta en el oc¨¦ano. Probablemente, a Canetti no le hubiera gustado", reconoc¨ªa ayer.

Te?idas a veces de un corrosivo humor, en las entradas a este peculiar diario de breves Canetti juzga y habla con plena libertad: "Ya es dif¨ªcil soportar la propia autocomplacencia. ?Pero la ajena!". En una de ellas, el autor, cuya lengua materna fue el ladino pero que siempre escribi¨® en alem¨¢n, se define como "fiel reto?o alem¨¢n de la literatura espa?ola". En otra dispara a la prensa: " En el peri¨®dico est¨¢ todo. S¨®lo hay que leerlo con suficiente odio". Canetti no oculta su obsesi¨®n por depurar al m¨¢ximo el pensamiento y la palabra: "Encontrar frases tan simples que ya no sean las propias".