El complemento estad¨ªstico del libro debe consultarse en Internet
La base estad¨ªstica del libro no se incluye en la edici¨®n en papel. Est¨¢ colgada en la Red, en el sitio del MIT. Son 88 p¨¢ginas en pdf que despliegan las cifras sobre las que han trabajado los autores. En el libro, hay una menci¨®n al e-book como ejemplo de que el ciudadano no se apunta a una nueva tecnolog¨ªa s¨®lo porque sea nueva. Ha de darle un servicio nuevo. "En la historia de la tecnolog¨ªa s¨®lo funcionan las tecnolog¨ªas que sirven a la gente", comenta Castells.
Como ejemplo de una apropiaci¨®n imaginativa de la tecnolog¨ªa, el libro comenta el fen¨®meno de los distintos p¨¢salos que han habido, movilizaciones cuya fuente convocante es el tel¨¦fono m¨®vil. Para que el p¨¢salo sea eficaz, el mensaje ha de llegar de un amigo, de alguien de confianza. No se pueden organizar grandes movidas desde las instituciones o los partidos. La convocatoria ha de ser fraternal. "El caso Berlusconi es un ejemplo", comenta Castells. En las elecciones italianas de 2004, Berlusconi reaccion¨® con respecto a lo que le hab¨ªa sucedido a Aznar y decidi¨® tomar la iniciativa enviando 13 millones de mensajes personales a tel¨¦fonos m¨®viles. Pero provoc¨® la reacci¨®n contraria. La gente sinti¨® invadida su privacidad porque Berlusconi confundi¨® la televisi¨®n con el m¨®vil y la gente no soportaba recibir mensajes pol¨ªticos no deseados en su m¨®vil.
Castells sostiene que en este nuevo universo de la comunicaci¨®n "la pol¨ªtica nunca volver¨¢ a ser la misma". "En cuatro a?os", comenta, " han habido una veintena de movimientos aprovechando la comunicaci¨®n m¨®vil que han tenido consecuencias sustanciales como cambios de Gobierno. ?Por qu¨¦? T¨² puedes movilizar sin pasar por intermediarios, a condici¨®n de que el mensaje tenga resonancia y sea individualizado, llegue de alguien que reconoces. No necesitas el cl¨¢sico panfleto, ni pasar por la televisi¨®n o los grandes medios. T¨² lanzas el mensaje y si funciona en el contexto no hay quien lo pare o controle. Se ha perdido el control sobre las redes de difusi¨®n de las convocatorias y eso es fundamental". Castells recuerda que ahora los m¨®viles, adem¨¢s, son c¨¢maras que pueden enviar im¨¢genes por Internet, lo que aumenta su impacto. En la ¨²ltima campa?a electoral norteamericana, un candidato republicano perdi¨® su esca?o senatorial porque un internauta grab¨® un comentario racista y lo envi¨®, desde donde estaba, a Youtube. "Por la noche, todas las televisiones, porque todas las televisiones miran ahora Youtube, emit¨ªan la escena".
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