Bush y los dem¨®cratas buscan un pacto

Mal d¨ªa escogi¨® el presidente George Bush para intentar convencer a los l¨ªderes del Congreso de que aprueben los 100.000 millones de d¨®lares (73.600 millones de euros) que ha solicitado para las guerras de Irak y Afganist¨¢n. Las noticias sobre la ¨²ltima carnicer¨ªa ocurrida en Bagdad eran un p¨¦simo argumento para probar la teor¨ªa de la Casa Blanca de que su actual estrategia en Irak est¨¢ funcionando y merece una oportunidad.

La cadena de muertos y de coches bombas ocurrida ayer tiende m¨¢s bien a dar la raz¨®n a los l¨ªderes dem¨®cratas del Congreso, que quieren acordar una fecha precisa para la retirada de las tropas antes de dar luz verde a los fondos que solicita el Pent¨¢gono. El presidente cree que el establecimiento de una fecha equivale al reconocimiento de la derrota y s¨®lo servir¨ªa para envalentonar al enemigo.

La reuni¨®n de ayer, convocada por la Casa Blanca, estaba destinada a buscar un acuerdo que evite que las tropas empiecen pronto a sufrir el desabastecimiento. Pero las posiciones de las dos partes parec¨ªan demasiado intransigentes como para albergar alg¨²n optimismo.

"El presidente tiene que cambiar el rumbo de esta guerra", dijo el jefe de la mayor¨ªa dem¨®crata en el Senado, Harry Raid, antes de entrar en la reuni¨®n, a la que acudi¨® acompa?ado de la presidenta de la C¨¢mara de Representantes, Nancy Pelosi. El presidente cree que la propuesta de los dem¨®cratas "equivale a una retirada forzosa", contest¨® la portavoz de la Casa Blanca, Dana Perino.

Ambas partes evitaron, no obstante, los gestos grandilocuentes y las palabras gruesas. Quiz¨¢ influidos por el clima de pesadumbre en el que vive la naci¨®n por los sucesos en la Universidad Tecnol¨®gica de Virginia. Pero quiz¨¢ tambi¨¦n conscientes de la grave responsabilidad que tienen en sus manos en este momento, sencillamente decidir sobre la suerte de la guerra y sus consecuencias.

Bush se sent¨® con los dem¨®cratas con palabras de bienvenida -"La gente alrededor de esta mesa tiene posiciones serias y estoy dispuesto a escucharlas", dijo- y precedido de gestos conciliadores y, al parecer, decidido a solicitar que se aprueben los fondos mientras se discute con m¨¢s calma sobre la estrategia y los plazos de la misi¨®n.

Los dem¨®cratas podr¨ªan, tal vez, aceptar una versi¨®n de la ley de financiaci¨®n con un lenguaje m¨¢s suave sobre la fecha de retirada, o que vinculase ¨¦sta a los progresos sobre el terreno, especialmente a los avances que hagan las autoridades iraqu¨ªes para asumir la plena responsabilidad sobre la seguridad.