La complicada organizaci¨®n del bachillerato
Directores de instituto opinan sobre si es posible encajar el curso entre 1? y 2? propuesto por el Gobierno
Unas 20 asignaturas en dos a?os, con un nivel de exigencia que no tiene nada que ver con la secundaria obligatoria (ESO). As¨ª describen muchos profesores el bachillerato: un primer curso (16-17 a?os) en el que los chavales se est¨¢n adaptando y un segundo (17-18) enfocado casi exclusivamente al examen de Selectividad, la puerta de la educaci¨®n universitaria. Sea o no porque est¨¦ muy comprimido, el hecho cierto es que casi un tercio de los j¨®venes espa?oles entre 18 y 24 a?os han dejado de estudiar tras la ESO, y ¨¦ste es uno de los porcentajes m¨¢s altos de la UE.
Los que ven posible el cambio advierten que se necesitar¨¢n m¨¢s profesores y m¨¢s aulas
Distintos sectores educativos, como el sindicato Anpe, han pedido repetidamente que los dos cursos del bachillerato se conviertan en tres. La propuesta de UGT, apoyada por la Generalitat catalana, era hacer esos tres a?os, pero s¨®lo para los alumnos con m¨¢s dificultades. Y la soluci¨®n que ha propuesto finalmente el Gobierno, que ma?ana discutir¨¢ con las comunidades aut¨®nomas, es una especie de curso intermedio entre 1? y 2?. Consiste en que los alumnos de 1? que suspendan m¨¢s de dos asignaturas, que hasta ahora repet¨ªan el curso entero, y hayan aprobado m¨¢s de la mitad de las materias (cinco o seis), s¨®lo tengan que repetir las que suspendieron. Podr¨ªan, adem¨¢s, completar esa especie de curso intermedio con algunas asignaturas de segundo.
Desde algunos sectores (PP, patronal de centros privados Cece, o la asociaci¨®n de padres cat¨®licos Concapa) se ha criticado la propuesta porque consideran que rebajar¨ªa el nivel de exigencia, aunque muchos docentes creen que su efecto ser¨ªa justo el contrario. En los que s¨ª est¨¢n de acuerdo, incluso los que se muestran a favor del cambio, es que a?adir¨¢ una gran complejidad a la organizaci¨®n de una etapa ya bastante complicada por la convivencia de asignaturas comunes, de modalidad (si se elige letras, ciencias o arte) y las optativas.
"?Qu¨¦ es lo importante? ?Hacer un buen horario para los profesores o c¨®mo van a poder los alumnos organizar sus estudios?". Con esta pregunta respond¨ªa la semana pasada Jos¨¦ Antonio Mart¨ªnez, presidente de la Federaci¨®n nacional de Directores de Instituto (Fedadi) a los compa?eros que le llamaban inquietos por esta raz¨®n. Mart¨ªnez, director del instituto p¨²blico P¨ªo Baroja, de Madrid, cree que "el hecho de que sea dif¨ªcil no significa que sea imposible". Con todas la precauciones hasta que se conozcan los detalles de la propuesta, Mart¨ªnez ya considera que "los alumnos no podr¨¢n elegir a la carta" las asignaturas de 2? que estudien en ese curso intermedio, sino que se tendr¨¢n que atener a los huecos que les deje el horario. Destaca, adem¨¢s, la herramienta fundamental que necesitar¨¢ la medida: muchos m¨¢s recursos de docentes, aulas, etc¨¦tera.
El presidente de la asociaci¨®n catalana de directores Axia, Carles Mata, no est¨¢ de acuerdo: "La medida est¨¢ bien si lo que se pretende es evitar el abandono, pero tiene unos problemas organizativos imposibles de superar". Lo primero que habr¨ªa que saber, dice, es si al alumno de ese curso intermedio se le matricula con un grupo de 1? o de 2?. Si es en uno de 2?, aventura, "har¨ªan falta muchos m¨¢s profesores para hacer el seguimiento tutorial personalizado de los chavales, que tendr¨ªan que repetir las asignaturas que les quedaron por su cuenta y con esas tutor¨ªas", considera. Y si se les ubica con un grupo de 1?, "ser¨ªa imposible encajar en sus huecos libres asignaturas de segundo, tal vez coincidiera que pudiera coger una, con suerte".
Un 27% del alumnado repite 1? de bachillerato, seg¨²n las estad¨ªsticas del Ministerio de Educaci¨®n. Descontados los que abandonan y los que suspenden m¨¢s de la mitad de las materias, seg¨²n los expertos, los chavales que podr¨ªan beneficiarse de la propuesta del curso mixto, con enormes diferencias entre centros, podr¨ªa estar entre el 15% y 20%.
F¨¦lix Torres es director del instituto Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez, un enorme centro madrile?o con ocho grupos de bachillerato. Considera que la idea del curso mixto es buena, tambi¨¦n para el creciente n¨²mero de j¨®venes que lo que quieren es estudiar FP de grado superior (para lo cual hace falta el t¨ªtulo de bachiller). Aunque tambi¨¦n ve grandes problemas de organizaci¨®n: "Puede haber mucha dispersi¨®n, con horas muertas, para los alumnos de ese curso intermedio". Pero cree que los que realmente lo van a tener m¨¢s dif¨ªcil son los centros peque?os, ya que los grandes, aunque con m¨¢s complejidad, tienen tambi¨¦n m¨¢s medios. Y por encima de todo, Torres se?ala la misma herramienta b¨¢sica para hacerlo posible: "M¨¢s profesorado y m¨¢s espacios".
A mano y a m¨¢quina
Cinco asignaturas comunes. M¨¢s Religi¨®n, si se elige. Y dos materias de la modalidad de bachillerato que se est¨¦ estudiando (letras, ciencias o artes), m¨¢s una optativa. Van nueve materias en 1? de bachillerato, como muestran los ejemplos del gr¨¢fico, de un centro concertado de Madrid. ?ste es el horario que tienen que encajar los institutos, pero tambi¨¦n con el de otros grupos de 1? de 2? de bachillerato y con los de los cuatro cursos de ESO. Adem¨¢s, en las comunidades con lengua cooficial, hay que sumarle esta asignatura. Y en algunos casos, los alumnos m¨¢s atrevidos le a?aden incluso un segundo idioma.
Como se puede inferir de todo esto, no es f¨¢cil confeccionar los horarios. Normalmente, los institutos ofrecen s¨®lo dos modalidades y hacen los grupos dependiendo de las materias de modalidad elegidas por el alumno. Despu¨¦s, se intenta hacer coincidir el horario de las optativas de todos los grupos (como en los del gr¨¢fico). Se mete ese c¨®ctel en el ordenador (hay distintos programas inform¨¢ticos para hacerlo) y, normalmente, se acaba retocando a mano el rompecabezas, aseguran los directores.
A todo esto habr¨ªa sumarle, con la nueva propuesta del ministerio, una asignatura obligatoria m¨¢s (Ciencias para el Mundo Contempor¨¢neo) y ese curso mixto entre 1? y 2?. ?Poner a la misma hora las asignaturas de 1? y de 2??, ?m¨¢s profesores?, ?organizar el horario por bloques?... El Gobierno a¨²n no ha explicado c¨®mo se llevar¨ªa a cabo su propuesta.
LA POSTURA DEL SECTOR
A favor de la propuesta. Los sindicatos UGT y CC OO, asociaci¨®n laica de padres Ceapa, de estudiantes Faest, de directores Fedadi
En contra. Creen que rebaja el nivel: el PP, la patronal CECE, la asociaci¨®n de padres cat¨®licos Concapa y el sindicato USO
Tres cursos para todos. Los sindicatos Anpe y CSIF y la patronal Acade piden un bachillerato en tres cursos para todos
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