El fiscal sospecha que el PP pretend¨ªa alterar o influir en el voto por correo de Melilla
La imprenta alert¨® a Lence de que los impresos hab¨ªan salido "un pel¨ªn diferentes"
El pasado 11 de abril, v¨ªspera de que la Guardia Civil irrumpiera en una imprenta de Melilla para requisar 1.000 solicitudes de voto por correo encargadas por el gerente regional del PP, Javier Lence, el impresor inform¨® al pol¨ªtico de los defectos de su material respecto del documento original (el que entrega Correos). "Es un pel¨ªn diferente, porque es nuevo, pero eso, una vez que entre en juego y lleven tiempo, ya no se nota", le tranquiliz¨®. La juez ha archivado la causa, pero el fiscal sostiene que con la maniobra de falsificaci¨®n se pod¨ªa "alterar o influenciar" el voto por correo us¨¢ndolo como "un medio m¨¢s de propaganda electoral".
El fiscal no era partidario del archivo de la causa, y pide en su escrito una serie de diligencias -que no fueron aceptadas- para investigar la falsificaci¨®n de los 1.000 impresos de solicitud de voto. El gerente del PP en Melilla siempre ha proclamado que estaba convencido de la legalidad de su conducta al solicitar dicho trabajo a la imprenta, pese a que el delegado del Gobierno le inform¨® por carta el 2 de abril de la imposibilidad de entregarle, en contra de su solicitud, 2.000 impresos de voto por correo. El Gobierno recordaba a Lence que la Ley electoral impide facilitar esos impresos a los partidos, ya que es una opci¨®n personal que debe ejercer cada votante.
Por tanto, el 2 de abril, Lence ya sab¨ªa que la ¨²nica v¨ªa legal para recabar dicho formulario pasaba por personarse individualmente en Correos cada votante. Sin embargo, a tenor de la reconstrucci¨®n cronol¨®gica del caso que hace el fiscal, el gerente del PP dio los siguientes pasos:
- El 4 de abril, Lence encarga la impresi¨®n de 1.000 ejemplares de solicitud de voto por correo a Jos¨¦ Mar¨ªa Cerezo.
- El 5 de abril, el BOE recuerda que la solicitud del voto por correo "deber¨¢ formularse personalmente".
- El 9 de abril, Lence indica a Cerezo que los impresos de solicitud de voto por correo que le est¨¢ imprimiendo tienen que ser id¨¦nticos al original. "Clavao, no pueden notar ninguna diferencia", remacha el gerente del PP. Los quiere para el d¨ªa siguiente.
-El 10 de abril, Cerezo aprovecha para asegurarse los pedidos de campa?a electoral del PP. Ofrece precios "y hacer un presupuesto de todo".
"?Se va a notar?"
El 11 de abril, Cerezo informa a Lence de que tiene acabados los impresos de solicitud de voto por correo. Pero le confiesa una pega en su material respecto del original: el color amarillo de la hoja autocopiativa es "un pel¨ªn diferente, porque es nuevo, pero eso una vez que entre en juego y lleven tiempo en juego, en cuanto lleven un mes o quince d¨ªas, ya no se nota". Lence le muestra su ¨²nico temor legal al respecto: "Vale, ?se va a notar?", pregunta. Cerezo le tranquiliza: "No creo que haya problemas por el papel porque la misma empresa [oficial] que imprime [los formularios oficiales] puede usar diez mil tipos de papel diferentes".
"?Pero se nota mucho o no", insiste Lence. "No, una vez hecho el talonario, ni de co?a". ratifica Cerezo. "De acuerdo, dame un toque cuante est¨¦n acabadas para que las recoja", concluye el gerente del PP.
-El 11 de abril, s¨®lo cinco horas antes de que la Guardia Civil irrumpa en la imprenta para requisar los 1.000 falsos impresos de solicitud de voto por correo, Lence ordena a Cerezo que le cobre el trabajo pero destruya el material. De pronto, el cargo regional del PP parece haber visto la luz sobre el ¨²nico camino legal posible: "No puedo utilizar m¨¢s que los [impresos] oficiales de ellos".
El fiscal analiza en su escrito la importancia del voto por correo en una ciudad como Melilla, y acaba concluyendo que "la distribuci¨®n generalizada de impresos de solicitud de voto por correo puede alterarlo o influenciarlo".
Por ello, para esclarecer este posible fraude, el fiscal solicit¨® una serie de diligencias consistentes en que tanto Correos como la Delegaci¨®n del Gobierno de Melilla informaran de si el PP o sus miembros les hab¨ªan pedido recientemente la entrega de "numerosos" ejemplares de solicitud de impresos de voto por correo.
El pasado 14 de abril, el d¨ªa que estall¨® el esc¨¢ndalo en la prensa, algunos altos cargos del Gobierno de Melilla, presidido por Juan Jos¨¦ Imbroda, y decenas de militantes del PP se presentaron en las oficinas de Correos para exigir la entrega de cuatro formularios por persona. Los empleados de Correos explicaron que s¨®lo pod¨ªan dar uno por cabeza. Los militantes defendieron a voz en grito que la ley electoral, cuyos art¨ªculos subrayados enarbolaban, no marcaba tal tope. Los funcionarios no cedieron.
Posteriormente se produjo un nuevo incidente. Una se?ora acudi¨® con un impreso que una funcionaria de Correos rechaz¨® por falso. La peticionaria aleg¨® que lo hab¨ªa descargado de Internet. Se le invit¨® a recoger un impreso oficial, para lo que deb¨ªa acreditarse. Pero rehus¨® identificarse y se fue. Correos comunic¨® el incidente a la Delegaci¨®n del Gobierno. que lo remiti¨® a la Junta Electoral, y ¨¦sta lo puso en conocimiento de la justicia.
CRONOLOG?A DE UNA MANIOBRA IRREGULAR
29 de marzo: Carta de Lence al Gobierno
Cinco d¨ªas antes de que se convoquen las elecciones, el gerente del PP en Melilla, Javier Lence, escribe a la Delegaci¨®n del Gobierno pidiendo que le facilite 2.000 impresos de solicitud de voto por correo, "a fin de evitar problemas de abastecimiento en pleno periodo electoral".
2 de abril: El Gobierno deniega la petici¨®n
La Delegaci¨®n responde a Lence tambi¨¦n por carta: "Lamento manifestarle que ello no es posible por no disponer materialmente de esos impresos, de los que no se prev¨¦ entrega a las formaciones pol¨ªticas de acuerdo con lo preceptuado en el art¨ªculo 72 de la LOREG, que considera el voto por correo una opci¨®n personal¨ªsima de los titulares del sufragio activo que lo solicitan".
4 de abril: Encargo a la imprenta
La Guardia Civil, que tiene pinchado el tel¨¦fono de Jos¨¦ Mar¨ªa Cerezo, due?o de la imprenta Marfeme, intercepta una conversaci¨®n en la que Lence encarga a esa imprenta 1.000 ejemplares del impreso de solicitud para el voto por correo. "Quiero que me garantices que sale igual [que el impreso original]. Con el mismo tipo de papel y con la misma pel¨ªcula en autocopiativo", le dice el gerente del PP a Cerezo.
9 de abril: "No pueden notar diferencia"
Segunda conversaci¨®n entre Lence y Cerezo. El impresor le pregunta sobre "lo del voto": "Tiene que ser exacta, exacta, exactamente igual, ?no?". Y el gerente del PP responde: "Clavao. No pueden notar ninguna diferencia".
11 de abril: "El papel es un pel¨ªn diferente"
Cerezo llama a Lence y le dice que est¨¢ todo listo, pero que el color amarillo de la hoja autocopiativa es "un pel¨ªn diferente" porque es nuevo. "?Se va a notar?", inquiere Lence. El impresor responde: "No, eso, una vez que lleven tiempo en juego, en cuanto lleven un mes o 15 d¨ªas, ya no se nota".
12 de abril: "R¨®mpelo"
A las 11.44, el gerente del PP llama al impresor y le espeta: "Esc¨²chame, necesito que me hagas un favor. Necesito que lo rompas y lo destruyas, t¨ªo, porque no me vale. Me lo van a solucionar oficialmente, digamos. R¨®mpelo". Cinco horas despu¨¦s, la Guardia Civil entra en la imprenta y encuentra los "documentos falsificados"
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