Un debate entre molinos
Partidarios y detractores dialogan sobre la idoneidad del decreto de la energ¨ªa e¨®lica marina
Antonio Rold¨¢n, alcalde de Conil (C¨¢diz), asegura defender las energ¨ªas renovables pero no quiere que bajo esa "po¨¦tica" reclamaci¨®n se perjudiquen los intereses de su pueblo. Rafael Serrano, t¨¦cnico de la Agencia Provincial de Energ¨ªa, pertenece a la Diputaci¨®n de C¨¢diz, el organismo que m¨¢s se ha preocupado por analizar los pros y contras de la instalaci¨®n de molinos en el mar en la costa gaditana. Antonio Alarc¨®n lleva varios a?os detr¨¢s de empresas interesadas en aprovechar un recurso tan presente en estas aguas como es el viento. Los tres se sentaron en la sede de la Asociaci¨®n de la Prensa de C¨¢diz, invitados por EL PA?S, para debatir sobre estos proyectos. Un debate que se produce cuando el Ministerio de Industria est¨¢ a punto de sacar adelante el decreto que regular¨¢ la energ¨ªa e¨®lica marina en Espa?a. Varios de los principales proyectos se sit¨²an en la costa gaditana.
Rold¨¢n: "No nos fiamos de los estudios de las empresas. Queremos que los haga el Estado"
Alarc¨®n: "Aqu¨ª no tenemos petr¨®leo pero s¨ª recursos climatol¨®gicos"
Pregunta. ?Es positiva la aprobaci¨®n de este decreto?
Antonio Rold¨¢n (A. R.). Ser¨ªa precipitada porque antes de aprobar c¨®mo se debe regular o conceder zonas de reservas, se tendr¨ªa que hacer un plan marino propio de Espa?a. Es positivo que el Gobierno act¨²e, pero el paso es equivocado. No se ha dado participaci¨®n a las entidades locales ni a los pescadores.
Rafael Serrano (R. S). Es un real decreto que no tiene en cuenta las competencias municipales ni las repercusiones socioecon¨®micas que pueden traer estas instalaciones. Eso no quiere decir que no se est¨¦ a favor de la energ¨ªa e¨®lica marina. S¨ª estamos a favor, pero planificadamente, con consenso y con una regulaci¨®n menos violenta.
Antonio Alarc¨®n (A. A.). Existe un n¨²mero de empresas que apostaron por una tecnolog¨ªa y que est¨¢n haciendo fuertes inversiones, que est¨¢n reclamando una regulaci¨®n para ese sector. Si en Arabia Saud¨ª se hacen prospecciones para ver el petr¨®leo, aqu¨ª no tenemos petr¨®leo, pero s¨ª recursos climatol¨®gicos. Ese dise?o requiere un desarrollo. Va a ser muy complicado seguir con esto con todo el mundo contento.
A. R. Es un sector estrat¨¦gico y por tanto no lo pueden regular las empresas privadas sino el Estado. No todo el mundo puede estar contento pero el Estado tiene que poner las reglas de juego y no dejarse presionar por empresas que hayan hecho mucha inversi¨®n justificada en el cambio clim¨¢tico o el protocolo de Kioto.
P. Municipios como Conil, Vejer y Barbate donde se proyectan parques e¨®licos marinos, ?deben sentirse beneficiados o perjudicados por el inter¨¦s que han puesto en ellos las empresas?
A. A. Si los municipios tuvieran la informaci¨®n de la influencia que en su econom¨ªa puede suponer un desarrollo de este tipo, se podr¨ªa hacer algo correcto. En Dinamarca tuvieron sus problemas, pero quiz¨¢s tuvieran un mayor recorrido democr¨¢tico. Hablaron y ahora est¨¢n contentos con el mayor parque e¨®lico marino del mundo.
R. S. La provincia tiene un recurso que todav¨ªa no ha sido evaluado en el mar. Y las empresas han lanzado una ofensiva demasiado violenta de solicitud de ocupaci¨®n de dominio publico. No necesitamos una herramienta como ¨¦sta, lo que necesita la provincia es que todos los agentes intercambien informaci¨®n.
A. R. En Dinamarca se puso el primer parque e¨®lico marino en 1991 don 11 aerogeneradores y despu¨¦s se ha puesto otro con 80. En Espa?a, hubo una estrategia de empacho. En Dinamarca puede ser que tengan m¨¢s a?os de democracia y quiz¨¢s por eso el Estado regul¨® all¨ª. Adem¨¢s las condiciones de Dinamarca no tienen nada que ver con nuestras costas. Por algo ser¨¢ que los daneses vienen aqu¨ª.
A. A. Donde est¨¢ el parque es precisamente la zona mas tur¨ªstica de toda Dinamarca.
A. R. S¨ª pero los connotaciones tur¨ªsticas de Dinamarca no son sus costas. Detr¨¢s de todo esto hay poes¨ªa y dinero. Poes¨ªa en el sentido del protocolo de Kioto de que hay que cumplirlo. Y a la sombra de esa poes¨ªa algunos quieren ganar dinero. No nos vale que las empresas se dediquen a contratar cient¨ªficos o universidades para hacer estudios. No nos fiamos. Queremos que el Estado haga esos an¨¢lisis donde se garantice que la pesca se respeta... Y adem¨¢s no hay capacidad de evacuaci¨®n de la energ¨ªa.
A. A. Hay problemas de evacuaci¨®n pero se pueden resolver. Otro problema es la tecnolog¨ªa. Las subestaciones, las turbinas... Veo correcto que Espa?a desarrolle empresas de tecnolog¨ªa marina para que pueda ser m¨¢s competitiva. El dinero es miedoso y no quiere riesgos. Se dice que ha habido agresividad de las empresas pero tambi¨¦n de los sectores de la zona. Y eso ha sido malo para todas las partes.
R. S. C¨¢diz tiene potencial magn¨ªfico para una industria emergente si desarrollamos esa tecnolog¨ªa pero eso es a medio y largo plazo. Los errores que hemos cometido en la e¨®lica terrestre est¨¢n ah¨ª. Los beneficios para el territorio son casi inexistentes. El decreto deber¨ªa regular las compensaciones por las afecciones y no lo hace.
A. R. Me quedo con el compromiso del presidente Manuel Chaves cuando nos reunimos con ¨¦l en Sevilla los tres alcaldes, los patrones mayores de las cofrad¨ªas pesqueras y representantes de las almadrabas, donde se comprometi¨® a que no se instalar¨ªan los parque e¨®licos frente a la costa si no hab¨ªa consenso. Y ahora no hay consenso.
P. En la balanza de perjuicios y beneficios, ?qu¨¦ pesa m¨¢s?
A. A. Yo he estado en un equipo de estudio de impacto ambiental de una promoci¨®n y, humildemente, creo que no lo hay.
A. R. El problema es ¨¦se. Que t¨² dices, yo creo... No se trata de creer. Se trata de hacer un estudio de iniciativa p¨²blica que tenga credibilidad para todos.
R. S. Y m¨¢s a¨²n. Adem¨¢s de planificar e investigar, habr¨ªa que hacer una instalaci¨®n de tipo emp¨ªrico con uno o dos molinos y ver si afecta o no a una almadraba...
A. A. Te complemento. Lo uno al comentario de que cuando Chaves os invit¨® a todos vosotros. Estabais todos menos las empresas.
A. R. S¨ª pero antes se hab¨ªa reunido con alguna empresa que le expuso el proyecto que ten¨ªan...
A. A. Pero es a que las empresas tambi¨¦n les hace falta certificar esa tecnolog¨ªa.
P. ?Creen finalmente que se podr¨¢ desarrollar la energ¨ªa e¨®lica marina en la costa gaditana?
A. R. Nosotros vamos a intentar que no sea as¨ª. La zona prevista en los parques e¨®licos va a perjudicar a la pesca. Y decimos un no preventivo mientras no se haga una planificaci¨®n independiente.
R. S. Nuestras conclusiones siguen vigentes. Hace falta estudios independientes y no de parte. Hay que planificar e investigar.
A. A. Hasta que en la planificaci¨®n de un instituto de Formaci¨®n Profesional de Conil no exista una asignatura sobre construcci¨®n de turbinas, aqu¨ª en la zona de mayor recurso energ¨¦tico climatol¨®gico del pa¨ªs no existir¨¢ eso.
A. R. Me conformo con que los pescadores de Conil puedan trabajar mucho tiempo m¨¢s y que el caladero les d¨¦ para que trabajen ellos, sus hijos y sus nietos. Y las e¨®licas, donde no molesten.
ANTONIO ALARC?N
Es director general de la empresa de ingenier¨ªa Soluciones Renovables, dos de cuyos responsables fueron ejecutivos de Umweltkontor, compa?¨ªa alemana que desarroll¨® el parque e¨®lico Cabo de Trafalgar. Ahora realiza servicios de consultor¨ªa a empresas e instituciones para diversos proyectos relacionados, entre otros, con instalaciones energ¨¦ticas marinas.
RAFAEL SERRANO
Es t¨¦cnico en la Agencia Provincial de Energ¨ªa de la Diputaci¨®n de C¨¢diz. Esta agencia naci¨® tras el Foro de la Energ¨ªa E¨®lica Marina impulsado en 2005 para acercar posturas entre las partes implicadas en la instalaci¨®n de molinos en el mar. El foro recomend¨® la instalaci¨®n de miniparques a modo de ensayo antes de conceder permisos.
ANTONIO ROLD?N
Es alcalde de Conil (C¨¢diz) y coordinador provincial de IU. Aspira a la reelecci¨®n en su municipio, uno de los tres del litoral gaditano, junto a Barbate y Vejer, directamente afectados por el los proyectos de energ¨ªa e¨®lica. Su posici¨®n siempre ha estado al lado de los colectivos de su pueblo que han rechazado tajantemente la instalaci¨®n de los molinos.
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