Ladrillazo a la concertaci¨®n

Un nuevo gesto de la Confederaci¨®n de Empresarios de Andaluc¨ªa (CEA) ha puesto sobre la mesa un serio conflicto que el Gobierno andaluz deber¨¢ afrontar antes del fin de la legislatura. El plant¨®n del presidente de la CEA, Santiago Herrero, a la comisi¨®n de seguimiento del VI Acuerdo de Concertaci¨®n, una de las banderas m¨¢s s¨®lidas del ejecutivo de Manuel Chaves, dej¨® claro el pasado mi¨¦rcoles que la CEA hablaba muy en serio cuando en su asamblea general del pasado mes de marzo acus¨® a la Consejer¨ªa de Obras P¨²blicas de "deslealtad".

El punto de mira: Concepci¨®n Guti¨¦rrez, responsable del ¨¢rea que ha impuesto una importante bater¨ªa de normas legales para frenar la especulaci¨®n urban¨ªstica y la corrupci¨®n, y a la que los empresarios no le perdonan ni su "talante autoritario" ni la modificaci¨®n unilateral que introdujo en el ya famoso POTA (Plan de Ordenaci¨®n del Territorio de Andaluc¨ªa), despu¨¦s de haber alcanzado un consenso con la CEA.

La CEA afirma que se ha roto la confianza con la Consejer¨ªa de Obras P¨²blicas

El Ejecutivo resta importancia al plante y lo considera un error estrat¨¦gico

El asunto de la construcci¨®n y las obras p¨²blicas ha sido desde hace m¨¢s de tres legislaturas una batalla constante entre la patronal andaluza y el Gobierno auton¨®mico, y su principal punto de desencuentro. Pero curiosamente fueron las consejer¨ªas de Medio Ambiente y Cultura el objeto de la ira de la patronal durante las dos anteriores legislaturas y no directamente el departamento del ramo.

Adem¨¢s, otra coincidencia de las crisis pol¨ªticas habidas entre los diferentes Gobiernos de Manuel Chaves y la CEA es que todos los pulsos sostenidos por la patronal han coincidido con departamentos dirigidos por mujeres. A los tres citados -Obras P¨²blicas, Medio Ambiente y Cultura- hay que unir la tensa relaci¨®n mantenida con la ministra de Fomento, Magdalena ?lvarez, durante su etapa de consejera de Econom¨ªa y Hacienda.

La principal queja de los empresarios hasta entonces eran los retrasos en las autorizaciones que deb¨ªan emitir estos departamentos para la concesi¨®n de licencias de obras o de instalaci¨®n de empresas, sobre todo cuando los terrenos ten¨ªan alguna dificultad medioambiental, conten¨ªan restos arqueol¨®gicos o pod¨ªan alterar el patrimonio hist¨®rico.

No fueron ocultos los rifirrafes entre el anterior presidente de la CEA, Rafael ?lvarez Colunga, y la anterior consejera y actual ministra de Cultura, Carmen Calvo. Incluso llegaron al terreno personal. Y acabaron, tras unas declaraciones altisonantes del primero, quien tuvo que zanjar la pol¨¦mica organizando un acto-fiesta p¨²blico de desagravio en C¨®rdoba, cuna natal de la ahora ministra.

Tampoco fueron ocultas las tensiones con la Consejer¨ªa de Medio Ambiente, en las que fuentes de este departamento afirman haber recibido en p¨²blico "m¨¢s de una cornada dial¨¦ctica" del empresariado. Sin embargo, la firma de un acuerdo al 100%, en la llamada pol¨ªtica "marr¨®n" del Medio Ambiente, con el consenso alcanzado en la Ley de Gesti¨®n de la Calidad Ambiental, puso fin a esos episodios de tensi¨®n. "Las relaciones son ahora incluso muy cordiales", aseguraban ayer fuentes cercanas al departamento de Fuensanta Coves.

Las aguas en Cultura tampoco han vuelto a salirse de su cauce. Fuentes de este departamento aseguran que las relaciones son "normales, escasas pero normales", dicen. En esta legislatura CEA y Cultura han tenido poco que discutir y la relaci¨®n con la nueva titular, Rosa Torres, fue la firma, hace a?o y medio, de un convenio de colaboraci¨®n en materia cultural.

Curiosamente, las relaciones con los consejeros de las ¨¢reas m¨¢s econ¨®micas, mantienen un cauce ordenado y sin sobresaltos. Jos¨¦ Antonio Gri?¨¢n (Econom¨ªa y Hacienda), Antonio Fern¨¢ndez (Empleo) y Francisco Vallejo (Innovaci¨®n, Ciencia y Empresa) mantienen fluidas relaciones con la Confederaci¨®n de Empresarios de Andaluc¨ªa.

Pero el pulso lanzado al Gobierno de Manuel Chaves tiene ahora adem¨¢s de las discrepancias pol¨ªticas un marcado car¨¢cter personal. Los empresarios afirman que las negociaciones con Concepci¨®n Guti¨¦rrez son misi¨®n imposible y que existe una "total desconfianza". "Sus planteamientos son imposibles de discutir. No admite razones, la raz¨®n es siempre suya, y alguna raz¨®n tambi¨¦n pueden tener los empresarios. Gobernar no es s¨®lo ordenar", alegan. Adem¨¢s, le critican el car¨¢cter autoritario que ejerce desde su posici¨®n de responsable del urbanismo andaluz. "S¨®lo hemos tenido desencuentros, no ha habido ni un punto positivo, y cuando lo hemos tenido ha tardado poco en incumplir el acuerdo", critican desde la patronal, que se?alan a Guti¨¦rrez como una protegida del presidente.

Los empresarios entienden que la bater¨ªa de medidas legislativas en materia de urbanismo s¨®lo ha ido dirigida a "demonizar" al sector de la construcci¨®n. "Si hay un empresario corrupto, que use la ley y se le meta en la c¨¢rcel, pero no todos los constructores son chorizos", insisten.

Otro de los motivos que ha dado pie a que la CEA pusiera el mi¨¦rcoles en jaque el acuerdo de concertaci¨®n con su plante en la comisi¨®n de seguimiento ha sido la respuesta del Chaves, a las cr¨ªticas vertidas por Santiago Herrero ante su asamblea general el pasado 23 de abril. "En Andaluc¨ªa debe preservarse la existencia de un entorno de confianza y seguridad jur¨ªdica (...), que se est¨¢ resquebrajando por la obcecaci¨®n de algunos, esos que identifican sostenibilidad con conservacionismo o aquellos otros que confunden regulaci¨®n con intervencionismo", dec¨ªa el presidente de la CEA a sus asociados en marzo. Y anunciaba el arma que utilizar¨ªa en esta disputa: "El POTA y los Planes subregionales de la Costa del Sol y de la Costa Occidental de Huelva son ejemplos de lo que no debe hacer un Gobierno que tiene como bandera los seis acuerdos de concertaci¨®n con los agentes sociales".

Y remataba: "El Gobierno debe evitar modificaciones en un acuerdo despu¨¦s de pasar por la mesa de la concertaci¨®n o por el propio Consejo Econ¨®mico y Social. Porque esto es una falta de lealtad, que no puede ser admitida en el seno del di¨¢logo social"

Chaves, desde Roma, pidi¨® entonces una rectificaci¨®n a la acusaci¨®n de deslealtad y record¨® a Herrero que qui¨¦n desarrolla la pol¨ªtica urban¨ªstica es el Gobierno andaluz y no la CEA. La rectificaci¨®n no se ha producido, al menos, en p¨²blico. Desde la CEA entienden que la poca confianza que quedaba se ha disipado, pese a la carta remitida por la consejera emplazando a la patronal a una reuni¨®n sin fecha.

Pero pese al escenario que dibujan los empresarios, en el Gobierno se manten¨ªa ayer una posici¨®n de absoluta normalidad. "Se han excusado con que no asistieron por un cambio de fecha y eso es lo ¨²nico que criticamos ayer, una falta de cortes¨ªa por no avisar con tiempo", indicaban fuentes del Gobierno andaluz. "No es m¨¢s que un episodio m¨¢s en unas relaciones marcadas por la disparidad de criterios sobre el urbanismo", insist¨ªan ayer desde el Ejecutivo, que no obstante, calificaron el plante en la mesa de concertaci¨®n como "un error estrat¨¦gico de calado".