Calentamiento local
Los alcaldes tienen la mayor¨ªa de las competencias para luchar contra el cambio clim¨¢tico. Pero ¨¦sa no es su guerra
Aunque el cambio clim¨¢tico se trata en lejanas reuniones en Bangkok, y a veces tiene lenguaje cient¨ªfico, la realidad es que su lucha se libra en gran parte en los ayuntamientos. Ellos tienen la capacidad de limitar el tr¨¢fico, promover los coches compartidos, reciclar, obtener energ¨ªa de la basura, obligar a que los edificios consuman menos y usen energ¨ªa renovable, dise?ar ciudades en las que se puede caminar en detrimento del coche, o ahorrar en alumbrado p¨²blico. Medidas fundamentales que dif¨ªcilmente saldr¨¢n en campa?a electoral.
El secretario general para la Prevenci¨®n del Cambio Clim¨¢tico del Ministerio de Medio Ambiente, Arturo Gonzalo Aizpiri, explica que, aunque hay muchos buenos ejemplos de lucha contra el cambio clim¨¢tico en muchas ciudades, "pr¨¢cticamente ninguna afronta el problema en su totalidad". "Pero lo est¨¢n empezando a hacer ahora", admite.
De los 8.110 municipios espa?oles, s¨®lo 140 ciudades se han adherido a la Red de Ciudades por el Clima, en la que el ministerio y la Federaci¨®n de Municipios se comprometen a ahorrar energ¨ªa. Y de ellas, algunas tienen un comportamiento nada ecol¨®gico -como la de Madrid, que no s¨®lo incumple todas las normas de calidad del aire, sino que el a?o pasado duplic¨® el gasto en alumbrado navide?o-, aunque casi cualquier ciudad entra en este saco. Aizpiri pide que "la campa?a electoral sirva para asumir compromisos concretos en los ayuntamientos en la lucha contra el cambio clim¨¢tico".
Espa?a emite actualmente un 48% m¨¢s gases de efecto invernadero que en 1990; eso s¨ª, en 2006 registr¨® por primera vez un descenso, debido en parte a la lluvia. Y mientras el consumo de las industrias se ha moderado, el transporte y el consumo dom¨¦stico siguen creciendo: justo donde su alcalde puede actuar. El calentamiento global es ya un problema local.
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