Brown quiere m¨¢s poder para el Parlamento y un Gobierno abierto a los ciudadanos
El candidato a suceder a Blair reconoce errores en Irak y se compromete a aprender de ellos
Gordon Brown apost¨® ayer por una nueva forma de Gobierno, con m¨¢s poder para el Parlamento, abierto a "todos los talentos" y basado en la consulta y participaci¨®n ciudadana, como base de su campa?a para suceder a Tony Blair en el liderazgo del Partido Laborista y la jefatura del Gobierno brit¨¢nico. El responsable de Finanzas defendi¨® su compromiso con el Nuevo Laborismo y afirm¨® que "el Gobierno debe ser m¨¢s abierto y responsable ante el Parlamento para restaurar la confianza del electorado en la democracia" . Con Brown, las guerras ser¨¢n decididas en los Comunes, no en Downing Street.
Respaldado por el apoyo y los elogios vertidos por el todav¨ªa primer ministro a primera hora de la ma?ana, Gordon Brown present¨® poco despu¨¦s su candidatura en la galer¨ªa londinense Imagination, rodeado de j¨®venes militantes para compensar su imagen de pol¨ªtico del pasado y mostrarse como un hombre moderno, abierto y con futuro. En sus primeras palabras, Brown lleg¨® a sugerir la necesidad de una Constituci¨®n escrita para el Reino Unido al decir: "Necesitamos una constituci¨®n que ponga en claro los derechos y las responsabilidades de ser hoy ciudadano brit¨¢nico". Tambi¨¦n abog¨® por un sistema de nombramiento de altos cargos similares al de Estados Unidos, donde los candidatos han de convencer al Parlamento (Senado, en el caso norteamericano) de que merecen la designaci¨®n.
El futuro l¨ªder laborista quiere construir un consenso nacional para apuntalar el control sobre todos los que detentan el poder, fijar los derechos y las responsabilidades del ciudadano, proteger la uni¨®n de las distintas naciones brit¨¢nicas y amparar las libertades individuales "sin transigir en nuestro ataque contra el terrorismo", dijo. "Quiero un Gobierno lo suficientemente humilde como para que sepa cu¨¢l es su sitio -donde siempre me esforzar¨¦ en estar- y ese sitio es al lado del pueblo", a?adi¨®.
Libre de la sombra de Blair, por primera vez en 13 a?os, el veterano responsable de Tesoro concret¨® su credo pol¨ªtico en dos conceptos: "Justicia y oportunidades para todos". "Ser un nuevo laborista significa que a medida que los retos cambian, nosotros tambi¨¦n debemos cambiar", dijo, en una alocuci¨®n de 10 minutos.
Con sus propuestas de cambio, Brown, que de momento es el ¨²nico candidato a suceder a Blair al frente del partido y del Gobierno, trat¨® de marcar distancias con ¨¦l, a menudo, muy criticado por su estilo presidencialista, al comprometerse a potenciar el poder del Parlamento de Westminster y promover un ambicioso programa de reforma constitucional.
En el consenso y la apertura est¨¢n las claves del sucesor de Blair. Brown prometi¨® ayer "escuchar y aprender" de todas las secciones de la sociedad brit¨¢nica porque, afirm¨®, "todos queremos que nuestra voz se escuche, se tomen en cuenta nuestras preferencias y que los servicios sociales se ajusten a nuestras necesidades personales". "As¨ª es el punto de vista progresista del siglo XXI: el ciudadano al mando, servido por el Gobierno, un Estado siervo", dijo.
Prometi¨® liderar "un Ejecutivo de todos los talentos", abriendo con ello la posibilidad de que profesionales y pol¨ªticos independientes o de otros partidos entren en un futuro Ejecutivo laborista. Es una idea que Blair baraj¨® en sus primeros a?os de liderazgo pero que olvid¨® tras la apabullante victoria de 1997.
Su sucesor tambi¨¦n manejar¨¢ unas coordenadas muy distintas de la hora de difundir las iniciativas gubernamentales. "Nunca he cre¨ªdo que la presentaci¨®n debe ser sustituto de la pol¨ªtica. No creo que la pol¨ªtica sea una cuesti¨®n de celebridades", resalt¨®. Brown nunca ha podido competir con Blair en carisma pero ayer record¨® que es muy distinto liderar el Ministerio de Hacienda que dirigir el pa¨ªs. "Ser¨¢ un Gobierno que escucha, aprende y se esfuerza por cumplir con las aspiraciones del ciudadano. Les demostrar¨¢ que representa sus dificultades, inseguridades, oportunidades...", resalt¨®.
"Acepto que se ha cometido errores en Irak", admiti¨® en la conferencia de prensa que sigui¨® a su discurso, "pero vamos a escuchar y aprender de los errores". El candidato a la direcci¨®n laborista se comprometi¨® a "mantener las obligaciones con el pueblo iraqu¨ª", pero asegur¨® que el peso de la acci¨®n se enfocar¨¢ a partir de ahora en "la reconciliaci¨®n pol¨ªtica y la construcci¨®n econ¨®mica".
Brown se declar¨® partidario de potenciar el frente ideol¨®gico para "ganar la batalla de la mente y el coraz¨®n" que reste ox¨ªgeno a la expansi¨®n de Al Qaeda.
Por la ma?ana, Tony Blair expres¨® su apoyo a Brown en unas declaraciones a las puertas de Downing Street, poco antes de viajar a Par¨ªs. Aunque ya en el pasado hab¨ªa elogiado las cualidades de Brown como su potencial sucesor, la larga rivalidad que han vivido estos dos antiguos amigos hizo pensar que Blair no llegar¨ªa a decantarse p¨²blicamente en su favor como sucesor.
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