"A partir de la taza ochocientos mil todo fue coser y cantar"
Antonio Fraguas, Forges se excusa ante la posibilidad de no resultar lo suficientemente gracioso -"la gente suele esperar unas frases hilad¨ªsimas y desternillantes"- e insiste en se?alar que es "un tipo de lo m¨¢s normal". Son las 11 de la ma?ana de un lunes cualquiera en el estudio de este madrile?o que naci¨® en 1942 y que lleva 44 a?os haciendo reir con el humor cotidiano de sus vi?etas. Llega "duchado, desayunado y con la vi?eta del d¨ªa siguiente terminada y enviada". Y se presta, con su incre¨ªble "morro creativo" a la broma de imaginar c¨®mo habr¨ªa sido pintar una por una todas las tazas de la colecci¨®n. Y, mientras bebe de su propia taza, en medio de las carcajadas, responde as¨ª.
Pregunta. ?Le cost¨® mucho pintar todas las tazas?
Respuesta. S¨ª, pero a partir de las ochocientas mil, la cosa fue coser y cantar.
P. ?A cuantos becarios tuvo que contratar?
R. Apenas a 120.000, en tres turnos.
P. ?Caf¨¦ con porras, t¨¦ con leche o cerveza fresca en su interior?
R. Ya puestos, caf¨¦ solo, que decimos en Madrid.
P ?A quien le tirar¨ªa una a la cabeza?
R. A la cabeza, a nadie. Quiz¨¢ a las narices u otras partes pudendas, a alguno de ellos.
P. ?Ha pensado en deslocalizarse e ir a alg¨²n pa¨ªs remoto a cultivar el arte de la taza?
R. Me alegra que me haga esa pregunta: hab¨ªa pensado en irme a Tazakist¨¢n, pero suena a chiste malo.
P. ?La pondr¨ªa usted en un museo?
R. Me alegro de que me haga esa pregunta: lo estoy valorando.
P. ?Ha pensado ya en alguno?
R. Pues no me decido entre el Ermitaze, el Museo Brit¨¢zico, la Taze Gallery y el madrile?o Museo del Tazo, zona Moneo, claro.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.