Llamar la atenci¨®n

Ha causando cierto impacto en la Red la aparici¨®n de una web llamada jorjejuanalcalde.com. El galerista valenciano Jorge Juan ha aprovechado las aguas turbulentas de las elecciones para introducir una candidatura ful que, imitando las formas de la pol¨ªtica fet¨¦n, transgrede sus fr¨¢giles principios e inamovibles apariencias. Est¨¢ en la tradici¨®n del arte conceptual y como tal hay que interpretarlo: una iron¨ªa que ofrece un candidato virtual dentro de la ya de por si considerable virtualidad de las candidaturas reales. Este divertimento tiene muchos y afortunados precedentes, no s¨®lo de candidaturas virtuales sino de propuestas que, situ¨¢ndose en un nivel paralelo y te¨®ricamente inferior al oficialismo, y sin voluntad de ganar, animaron comicios destinados a la reiteraci¨®n y al sopor.

Uno de los casos m¨¢s celebrados fue el de Coluche, el c¨®mico franc¨¦s que, en broma, empez¨® postul¨¢ndose como candidato a la presidencia y que, al final, hizo campa?a de verdad y la aprovech¨® para expandir un discurso tremendamente cr¨ªtico con el estatus pol¨ªtico establecido.

En el caso de Jorge Juan, el experimento proporciona a los publicistas responsables de esta campa?a una oportunidad ¨²nica: utilizar la parodia en el mejor momento, cuando puede cotejarse con la realidad parodiada. El efecto de contraste es inmediato y realza el oportunismo de una f¨®rmula a la que no se puede acusar ni de oportunista ni de t¨®pica porque imita una realidad, la del circo electoralista, con niveles de oportunismo y de t¨®picos insuperables (y probablemente perjudiciales para la salud).

El ¨²nico problema con el que puede tropezarse esta simp¨¢tica idea es que quede enterrada bajo las toneladas de electoralismo de perfil bajo. Distinguir la iron¨ªa de la idea en el mar de propuestas aut¨¦nticas resulta dif¨ªcil y. al final, las promesas populistas del candidato falso, entre las que figura convertir Valencia en la ciudad de los autobuses descapotables, son bastante menos extravagantes que las de, pongamos, Jordi Portabella, el candidato real de Esquerra Republicana por Barcelona, que propone instaurar la figura del "jardinero de barrio".

Se trata, por supuesto, de una propuesta-disparate, ideada por publicistas mucho m¨¢s inteligentes que los que ha contratado Jorge Juan, ya que lo que han hecho Portabella y su equipo es publicitar un disparate-anzuelo para llamar la atenci¨®n de los medios, que es, en estos momentos, lo ¨²nico importante. Y as¨ª nos va.

http://www.jorgejuanalcalde.com/ http://www.portabella.cat/