Constructor valenciano forma capataz polaco
"Espa?a es muy peque?a. Y el mundo tambi¨¦n". Al menos desde la perspectiva de Eloy Dur¨¢, presidente de la patronal provincial del sector de la construcci¨®n de Valencia (Fevec), empe?ado en ganar mercados para sus asociados ante los evidentes s¨ªntomas de debilidad del sector de edificaci¨®n de segundas residencias y viviendas tur¨ªsticas, uno de los grandes motores de la industria valenciana de la construcci¨®n a lo largo de los ¨²ltimos a?os.
Pero construir en el exterior no es f¨¢cil. "La construcci¨®n es un sector muy regulado", explica Rafael de la Cuadra, secretario general de Fevec, "y a las autoridades les escama que los directores t¨¦cnicos de las obras sean todos extranjeros".
?Soluci¨®n? "En lugar de expatriar t¨¦cnicos espa?oles para que dirijan obras en Polonia, por ejemplo, hemos dise?ado un curso para repatriarlos". ?C¨®mo? A trav¨¦s de un convenio firmado por Fevec y la Universidad Polit¨¦cnica de Valencia para formar aqu¨ª a graduados extranjeros que, una vez instruidos, implicados y vinculados a empresas valencianas, den la cara en sus pa¨ªses de origen.
El curso es eminentemente pr¨¢ctico. Ram¨®n Congost, director gerente de Aidico, el instituto tecnol¨®gico de la construcci¨®n, explica que los alumnos del curso de posgrado "trabajar¨¢n" en una empresa constructora valenciana "durante cuatro d¨ªas a la semana" y recibir¨¢n formaci¨®n te¨®rica "los tres d¨ªas restantes".
Tras un a?o de formaci¨®n, si el t¨¦cnico y la empresa congenian, el constructor en cuesti¨®n habr¨¢ dado un paso decisivo en favor del salto internacional.
La persona adecuada
Polonia es uno de los pa¨ªses m¨¢s atractivos para los constructores valencianos, al menos sobre el papel. Pero no es el ¨²nico. El instituto tecnol¨®gico de la construcci¨®n puso su primera piedra en Marruecos hace ya cinco a?os. "Como entidad sin ¨¢nimo de lucro", explica Congost, "no ¨ªbamos a pedir nada, sino a ofrecer formaci¨®n". Despu¨¦s de cinco a?os, "hemos logrado ganarnos la confianza de los marroqu¨ªes", sigue el director de Aidico, "ahora, el responsable del instituto es un marroqu¨ª". Y ese empleado constituye un canal insustituible para que los constructores espa?oles puedan abrirse camino en "una sociedad tremendamente burocratizada en la que, al margen de la normativa, la clave est¨¢ en saber acceder a la persona adecuada".
El curso que impulsa Fevec aspira a abrir decenas de canales similares en otros tantos pa¨ªses de este peque?o mundo.
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