Hartos de las riadas
Vecinos de Fuencarral denuncian la reiteraci¨®n de las inundaciones en la zona
Los vecinos de la calle de Joaqu¨ªn Lorenzo, en el distrito de Fuencarral, tienen el coche asegurado a todo riesgo. Ya no se f¨ªan ni un pelo. "Pasa cada a?o, y cada vez, cinco o seis veh¨ªculos terminan en el desguace. La riada se los lleva. Necesitamos un colector m¨¢s potente", denuncia Carmen Hernando, vecina de esa calle, frente a un tramo cuyo asfalto est¨¢ completamente levantado por el agua ca¨ªda el pasado domingo. Bel¨¦n lleva cinco a?os viviendo en la calle. En ese tiempo ha reparado el coche tres veces por culpa de las inundaciones. Ayer fue la ¨²ltima.
La lluvia que cay¨® entre las siete y las nueve de la tarde volvi¨® a causar estragos. Los colectores, como pasa cada vez que rompe a llover con esa intensidad (22 litros por metro c¨²bico), no absorbieron las riadas que se forman en esa zona de antiguos arroyos.
El Canal de Isabel II admite que los colectores "no tienen suficiente capacidad para absorber la tromba de agua que cay¨® el domingo" y se compromete a pagar los desperfectos y buscar una soluci¨®n para que no vuelva a ocurrir. "Veremos si es mejor ampliar la capacidad de los colectores o desviar la canalizaci¨®n de aguas residuales a otra zona", explica una portavoz del Canal de Isabel II.
El tramo de la M-30 que discurre bajo de las glorietas reci¨¦n inauguradas de Isaac Rabin y Francisco Bayeu y Sub¨ªas y que fue ampliado en un carril el pasado septiembre, qued¨® completamente inundado. El tr¨¢fico estuvo cortado entre las siete de la tarde y las once y media de la noche. Pero en la Concejal¨ªa de Urbanismo se insiste en que dicha reforma no tiene relaci¨®n con la inundaci¨®n. "Se ampli¨® un carril y se pusieron muros de contenci¨®n. El problema es que llovi¨® mucho en muy poco tiempo", explic¨® un portavoz.
Los garajes de la calle Joaqu¨ªn Lorenzo y de la v¨ªa de servicio de la M-30 quedaron anegados, los ¨¢rboles reci¨¦n plantados arrancados y las aceras cubiertas por una gruesa capa de barrio. "Cada vez que se mea un gato, esto se inunda. Llevamos as¨ª toda la vida. En vez de solucionar el problema, construyen m¨¢s casas", denuncia Antonio Casas, vecino de Pe?agrande.
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