Los interrogatorios diluyen las pruebas contra El Haski, supuesto autor intelectual del 11-M
El tribunal deber¨¢ dirimir por qu¨¦ Attila Turk cambi¨® su declaraci¨®n contra el acusado
La sesi¨®n del macrojuicio tuvo ayer un perfil poco medi¨¢tico, aunque fue muy importante para uno de los principales procesados: Hassan el Haski, l¨ªder del Grupo Isl¨¢mico Combatiente Marroqu¨ª (GICM) y considerado uno de los autores intelectuales de los atentados. Las pruebas existentes en el sumario contra ¨¦l fueron diluy¨¦ndose durante la vista y aunque ser¨¢ el tribunal el que deber¨¢ realizar la valoraci¨®n definitiva y puede condenarlo por pertenencia a banda terrorista, es poco probable que pueda justificar que orden¨® los atentados del 11-M, por lo que se le piden 38.656 a?os de c¨¢rcel.
El Haski, de 43 a?os, est¨¢ procesado y preso por conspirar para la realizaci¨®n de los atentados del 11-M. Le imputan delitos de pertenencia a banda armada en grado de dirigente, por lo que la fiscal solicita 14 a?os; 191 asesinatos consumados, a raz¨®n de 30 a?os por cada uno; 1.824 asesinatos frustrados, a 18 a?os cada uno, y cuatro delitos de estragos, a 20 a?os cada uno. En total 38.656 a?os, aunque en caso de ser considerado culpable s¨®lo cumplir¨ªa 40. Adem¨¢s, el islamista se encuentra tambi¨¦n en prisi¨®n por orden de Garz¨®n por delitos de terrorismo como inspirador de la voladura de la Casa de Espa?a en Casablanca (Marruecos), en mayo de 2003.
El procesado est¨¢ considerado un "l¨ªder del m¨¢ximo nivel" que estaba empezando a constituir, con la seguridad que le brindaba la isla de Lanzarote y protegido por adeptos, "una nueva estructura para Europa, con la intenci¨®n, seg¨²n se desprende de las manifestaciones de algunos l¨ªderes detenidos, de hacerse con el liderazgo absoluto del continente".
En el sumario de Del Olmo figuran declaraciones de otros islamistas considerados miembros del GICM con los que se aloj¨® El Haski durante su estancia en Francia, entre ellos Attila Turk. En sus manifestaciones, Turk aseguraba que El Haski "huy¨® de Espa?a antes de los atentados, ya que me imagino que sab¨ªa lo que iba a pasar". Seg¨²n Turk, antes de los atentados, El Haski "estaba muy nervioso y quer¨ªa alg¨²n sitio para esconderse". Tras la matanza, "se qued¨® tranquilo, como si ya no tuviera importancia lo que le pudiera pasar, y si le deten¨ªan no ten¨ªa importancia".
15 d¨ªas juntos
Ayer, sin embargo, Turk, que est¨¢ preso en Francia por su pertenencia al GICM, declar¨® por videoconferencia desde Versalles y neg¨® todas las acusaciones formuladas anteriormente. Asegur¨® que mantuvo una reuni¨®n a finales de 2003, cerca de B¨¦lgica, con El Haski y otros detenidos del GICM. Reconoci¨® que aloj¨® en su casa a El Haski pero dijo no estar seguro de si fue antes o despu¨¦s del 11-M. No obstante, agreg¨® que no recordaba haber dicho a las autoridades francesas que El Haski estaba nervioso antes o despu¨¦s de los atentados. Ahora precisa que lo que ¨¦l dijo es que El Haski no ten¨ªa alojamiento y que necesitaba uno. A?adi¨® que ¨¦ste permaneci¨® con ¨¦l unos 15 d¨ªas y luego se march¨®.
Admiti¨® que a finales de 2003 hizo un viaje para reunirse con Said Abdelkader y en el que se discuti¨® sobre el liderazgo del GICM para Francia y B¨¦lgica. Aleg¨®, sin embargo, que no se enter¨® de mucho porque los otros hablaban ¨¢rabe y el no entiende este idioma, porque es turco. Estaban Charouali y Bachir Ghoumid pero, seg¨²n dijo, ellos no le traduc¨ªan. No recuerda una discusi¨®n entre Abdelkader Hakimi y Hassan El Haski sobre qui¨¦n de ellos hab¨ªa de ser el l¨ªder del GICM.
Attila Turk tambi¨¦n admiti¨® que utilizaron su propio veh¨ªculo y que pasaron por la plaza Duchesse de Brabant, en Bruselas, -donde viv¨ªa Youssef Belhadj, otro de los supuestos autores intelectuales de los atentados- para recoger a una persona a la que no identific¨®. En cualquier caso, tampoco figuran contactos telef¨®nicos conocidos entre Belhadj y El Haski. Cuando se le pregunt¨® si ¨¦l hab¨ªa dicho que esa persona que recogieron en Bruselas les hab¨ªa indicado que pararan la recaudaci¨®n de dinero y las actividades porque se hab¨ªan producido varias detenciones de miembros del GICM, afirm¨® que no lo recordaba.
No obstante, sus negativas parecen las de un terrorista tratando de salvar a un compa?ero, tal y como suelen hacer los etarras. Turk lleg¨® a decir, tras haber hablado del GIMC durante toda su declaraci¨®n, que las autoridades francesas dijeron que pertenec¨ªa al GICM, pero que desconoc¨ªa qu¨¦ era ese grupo.
El tribunal, en la sentencia, deber¨¢ juzgar la prueba contra El Haski y puede concluir que las declaraciones de Turk en el sumario son m¨¢s cre¨ªbles que las que hizo ayer. Lo que ocurre es que no hay ni una huella, ni ADN de El Haski en ninguno de los escenarios del 11-M, tampoco hay contactos telef¨®nicos ni de otro tipo con ninguno de los yihadistas implicados en los atentados que se le puedan atribuir, aunque parece que conoc¨ªa a algunos de los supuestos autores, como por ejemplo Jamal Zougam. Y, si bien el tribunal puede apreciar que El Haski es culpable de pertenencia a banda terrorista como dirigente del GIMC, con las pruebas que se han visto en el juicio es muy dif¨ªcil que pueda condenarle por haber ordenado el 11-M.
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