"Rehuir los temas escabrosos es una actitud irresponsable"

La escritora A. M. Homes (Washington DC, 1961) propone que la entrevista tenga lugar en un caf¨¦ del Village neoyorquino que no figura en ninguna gu¨ªa. Tarda en llegar y cuando se les pregunta por ella, los camareros no saben qui¨¦n es. Cuando aparece, sin embargo, todo el mundo la saluda. La conocen pero no saben c¨®mo se llama ni que es una escritora famosa. Lleva a cuestas una enorme bolsa de libros que acaba de comprar porque se va de viaje a Europa y le perturba la posibilidad de no tener lecturas de su elecci¨®n a mano. Pide un t¨¦. Desborda vitalidad. Es inquieta y muy locuaz, y en los momentos en que calla es raro que deje de sonre¨ªr.

PREGUNTA. Usted escribe acerca de temas sumamente oscuros y escabrosos, ?qu¨¦ le lleva a ello?

RESPUESTA. Las cosas acerca de las que escribo son las mismas que encontramos a diario en los peri¨®dicos. Mis personajes proceden de la cultura en la que vivo. Lo chocante de mis libros no es lo que cuento, sino que doy voz a individuos a quienes nunca o¨ªmos hablar.

P. Uno de sus relatos m¨¢s conocidos cuenta la historia de un adolescente que se obsesiona sexualmente con una mu?eca Barbie. ?C¨®mo se le ocurri¨®?

R. Me vino a la cabeza la idea de escribir un cuento protagonizado por una mu?eca Barbie. Para inspirarme, puse una Barbie encima de la mesa. Lo curioso es que cuando me ven¨ªa a ver la gente, la presencia de la mu?eca despertaba reacciones y comentarios de lo m¨¢s extra?o. Me di cuenta de que hab¨ªa algo muy oscuro all¨ª. Empec¨¦ a incorporar lo que ve¨ªa y el relato acab¨® en una historia perturbadora, pero tambi¨¦n muy sintom¨¢tica, porque en el fondo lo ¨²nico que hago es reflejar comportamientos y actitudes reales.

P. En El final de Alicia va m¨¢s lejos y se adentra en la mente de un violador que asesina a una ni?a.

R. Mucha gente cree que elijo temas escabrosos por sensacionalismo, pero lo que yo busco es obligar a los lectores a enfrentarse a asuntos dif¨ªciles, porque, contrariamente a lo que dicen mis cr¨ªticos, rehuirlos es una actitud irresponsable. Las reacciones al libro fueron muy virulentas. En muchos lugares se cancel¨® la publicaci¨®n o se boicote¨® la venta. Lo m¨¢s curioso es que sus enemigos m¨¢s ac¨¦rrimos no hab¨ªan le¨ªdo la novela. Lo innegable es que en todo el mundo los ni?os son v¨ªctimas de abusos sexuales. Esquivar el tema, taparlo, impedir que se hable de ello equivale a convertirse en c¨®mplice y contribuye a perpetuar la situaci¨®n. Lo dif¨ªcil es dar con una manera adecuada de hablar honestamente acerca de esas lacras.

P. ?C¨®mo toma un artista la decisi¨®n de meterse ah¨ª? ?Fue dif¨ªcil?

R. S¨ª, fue un libro dif¨ªcil y doloroso de escribir. Me met¨ª en zonas muy oscuras, que la mayor¨ªa de la gente prefiere evitar, y eso me afect¨®, pero cuando lo termin¨¦ pens¨¦ que desde el punto de vista art¨ªstico e intelectual era lo m¨¢s riguroso que hab¨ªa hecho jam¨¢s.

P. Este libro te salvar¨¢ la vida es muy distinto de lo que hab¨ªa escrito hasta ahora.

R. Es mi respuesta personal a los acontecimientos del 11 de septiembre de 2001, de los que fui testigo desde mi apartamento. La idea subyacente es que hay que intentar mantener la esperanza en tiempos desesperanzados. Quer¨ªa escribir algo que levantara el ¨¢nimo a la gente. Es una invitaci¨®n a ser un poco m¨¢s solidario con los dem¨¢s. Ofrezco una visi¨®n coral de Estados Unidos: el punto de vista del rico, que no valora lo que tiene, y el del inmigrante, que aporta una mirada esperanzada. Es un intento de entender nuestra cultura. Hablo de los miedos y carencias de mis conciudadanos, de nuestros valores y limitaciones, de c¨®mo son las relaciones personales en los Estados Unidos de hoy. Estudio la condici¨®n humana desde ¨¢ngulos ins¨®litos, y el final es abierto. Mejor dicho, no hay final. No se sabe qu¨¦ va a ser del protagonista. En cierto modo les he jugado una mala pasada a mis cr¨ªticos, porque es un libro optimista, y eso es algo que no se espera de m¨ª.

P. De todos modos, hay elementos de continuidad con el resto de su obra como la presencia de la s¨¢tira y el humor.

R. La lectura que hago de la cultura norteamericana y de la vida que lleva el individuo en la sociedad contempor¨¢nea es agridulce. Lanzo una mirada ir¨®nica a nuestras relaciones familiares, a nuestros traumas y dependencias, me r¨ªo un poco de c¨®mo vivimos, critico nuestra incapacidad para abrirnos a los dem¨¢s. Satirizo algunas falsas soluciones que se nos dan. El protagonista est¨¢ atrapado por un modo de vida, hasta que un d¨ªa decide romper con todo. En cuanto al humor, la vida es demasiado dura y dolorosa como para sobrellevarla sin una dosis de comicidad. En la vida hay tragedia, iron¨ªa, sublimidad, pero en toda circunstancia ha de haber espacio para el humor. Ni siquiera falta en El final de Alicia, pese a su brutalidad.