El Gran Telescopio de Canarias estar¨¢ listo para los cient¨ªficos dentro de un a?o

Para el pr¨®ximo 13 de julio est¨¢ previsto que el Gran Telescopio de Canarias (GTC), una de las principales instalaciones cient¨ªficas espa?olas, afronte su prueba de fuego, la denominada primera luz, en la que la m¨¢quina astron¨®mica capta por primera vez la luz de los astros en su espejo principal, o en parte del mismo en este caso.

La experiencia de la instalaci¨®n espa?ola tiene notable valor ante los futuros telescopios

Una decena de grandes observatorios del mismo rango de tama?o ya funcionan en el mundo

Seguramente se apuntar¨¢ a Polaris, estrella que, por su posici¨®n en el cielo, exige poco movimiento del telescopio para seguirla, explic¨® la semana pasada Jos¨¦ Miguel Rodr¨ªguez Espinosa, director cient¨ªfico del GTC, durante el congreso Astrid de instrumentaci¨®n cient¨ªfica celebrado en Madrid. Pero tambi¨¦n se tomar¨¢n im¨¢genes de otros objetivos celestes que est¨¢n a¨²n por decidir, coment¨®. Tras 10 a?os de trabajos, incluidos cuatro de retraso sobre el plan inicialmente previsto, el GTC debe demostrar ahora que funciona. Su operaci¨®n cient¨ªfica rutinaria tendr¨¢ que esperar otro a?o m¨¢s.

Con una decena de grandes telescopios del mismo rango -de espejo de ocho a 10 metros de di¨¢metro- ya funcionando en el mundo, el observatorio espa?ol tiene ahora el doble reto de desempe?ar un papel clave para el avance de la astronom¨ªa espa?ola y de ser competitivo en el marco cient¨ªfico internacional.

Tras la primera luz, el plan de los responsables del GTC, impulsado por el Instituto de Astrof¨ªsica de Canarias, es optimizar el telescopio e ir incorporando y probando los instrumentos de observaci¨®n previstos, algunos de los cuales est¨¢n listos y otros en diferentes fases de su desarrollo.

La primera luz se har¨¢ con la caja de guiado del telescopio y las c¨¢maras se instalar¨¢n despu¨¦s, aunque la c¨¢mara espectr¨®grafo Elmer, planeada como instrumento de reserva, est¨¢ ya lista. El instrumento Osiris tiene que pasar las ¨²ltimas pruebas y se instalar¨¢ en el telescopio dentro de seis meses, y el multiespectr¨®grafo Emir est¨¢ previsto para 2009. Estos tres equipos se han desarrollado en Espa?a, y a ellos se a?ade la c¨¢mara CanariCam, desarrollada y construida en la Universidad de Florida (EE UU), que est¨¢ terminada.

El GTC, cuyo coste es de 104 millones de euros (sin apenas encarecimiento sobre lo previsto), est¨¢ financiado al 90% por Espa?a, con un 70% a cargo de la Administraci¨®n Central y un 30% de la Comunidad Aut¨®noma de Canarias, explica Pedro ?lvarez, director del telescopio. El 10% restante lo aportan la Universidad Aut¨®noma de M¨¦xico y la Universidad de Florida.

Sin embargo, cuando en la d¨¦cada de los a?os noventa el entonces Consejo Asesor de Grandes Instalaciones dio luz verde al proyecto, especific¨® que deb¨ªa tener una implicaci¨®n de socios extranjeros abultada. "No pudo ser, las previsiones iniciales fracasaron y s¨®lo se consigui¨® la participaci¨®n de M¨¦xico y Florida", explica Miguel Angel Quintanilla, secretario de Estado de Universidades e Investigaci¨®n. "Pero ahora hay gran participaci¨®n internacional en el GTC gracias a la entrada de Espa?a en el Observatorio Europeo Austral (ESO) y, de hecho, parte de nuestro pago en especies de la cuota de ingreso en dicha organizaci¨®n la hacemos en horas de utilizaci¨®n del GTC para ESO".

El espejo del telescopio estar¨¢ formado por 36 segmentos exagonales que compondr¨¢n una superficie de 10,4 metros de di¨¢metro. Esta opci¨®n, frente a la inicialmente considerada de espejo de una sola pieza, facilita enormemente su transporte hasta el observatorio del Roque de los Muchachos (La Palma). Pero con el tiempo la idea ha resultado adem¨¢s ser una gran ventaja tecnol¨®gica, porque la siguiente generaci¨®n de telescopios gigantes, como el ELT (de 40 metros) del ESO y el futuro James Webb espacial, tendr¨¢n espejos segmentados. Por esto adquiere valor a?adido notable la experiencia del telescopio espa?ol, que hered¨® la idea del espejo principal m¨²ltiple de los dos Keck estadounidenses, el primero de ellos estrenado en 1990.

En la otra cara de la moneda, los espejos han supuesto no pocos quebraderos de cabeza para los responsables del GTC, dadas las dificultades que ha tenido la empresa francesa que los fabrica. Los problemas de pulido de los bordes est¨¢n ya solucionados, asegura Rodr¨ªguez Espinosa.

Los espejos han tenido bastante que ver en el retraso acumulado del proyecto, que "pec¨® de excesivo optimismo inicial, aunque no podemos estar descontentos en comparaci¨®n con otros proyectos similares", dice Quintanilla. Pero no han sido el ¨²nico escollo.

?lvarez argumenta que el GTC ha afrontado los problemas normales de cualquier proyecto de esta envergadura. Parte de los defectos de fabricaci¨®n de la c¨²pula se han subsanado y otros "ya sabemos como arreglarlos y lo haremos este verano, pero optamos por aplazar las modificaciones necesarias para que no afectaran al avance de la construcci¨®n y montaje del telescopio". Tambi¨¦n algunas piezas estructurales dieron problemas. Ahora es el software de control del telescopio el que preocupa, con el agravante de la escasez de personal para abordar esta tarea que reconocen responsables del proyecto. En el proyecto trabajan 58 personas.

Con talante de mirar hacia adelante y de confiar en que las fases m¨¢s problem¨¢ticas han quedado atr¨¢s, muchos astr¨®nomos espa?oles esperan la hora de empezar a usar el GTC. "Es un elemento cr¨ªtico en el desarrollo de la astronom¨ªa espa?ola, hay cient¨ªficos que ya est¨¢n pensando en las observaciones que har¨¢n", comenta Jordi Torras, gestor del Programa Nacional de Astronom¨ªa.

Quintanilla se?ala: "Ahora que se est¨¢ terminando la puesta en marcha del telescopio, esperamos que sea lo m¨¢s provechoso posible; vamos a preparar los protocolos para optimizar su utilizaci¨®n con los criterios de calidad cient¨ªfica que deben tener todas las grandes instalaciones".

El GTC cuenta con explotar con ¨¦xito lo que se consideran sus especialidades, frente a los telescopios hermanos o competidores que ya observan el cielo tanto desde el hemisferio Sur como desde el Norte. "Con el instrumento Osiris podr¨¢ destacar en el estudio de las galaxias activas, el universo violento", adelanta Rodr¨ªguez Espinosa. "CanariCam es id¨®neo para estudiar discos protoplanetarios fr¨ªos y Emir para observar galaxias en las que la formaci¨®n estelar es intensa", a?ade.