EE UU impone nuevas sanciones a Sud¨¢n por no detener el "genocidio" en Darfur
Bush proh¨ªbe cualquier negocio con 31 empresas y busca una resoluci¨®n m¨¢s dura de la ONU
Bajo una fuerte presi¨®n pol¨ªtica interna, el presidente norteamericano, George Bush, anunci¨® ayer nuevas sanciones econ¨®micas contra el r¨¦gimen de Sud¨¢n por negarse a detener el genocidio en Darfur y prometi¨® una nueva iniciativa internacional para acelerar la actuaci¨®n de las Naciones Unidas en ese territorio. Estas medidas llegan despu¨¦s de muchos meses de pasividad de parte de las potencias occidentales y es dudoso que sirvan para cambiar la posici¨®n del Gobierno sudan¨¦s, que conserva el apoyo de China, comprador de dos terceras partes del petr¨®leo que produce este pa¨ªs.
"Prometo esto al pueblo de Darfur: Estados Unidos no va a cerrar sus ojos ante una crisis que desaf¨ªa la conciencia del mundo", dijo Bush en una declaraci¨®n grabada ayer en la Casa Blanca. El presidente acus¨® al r¨¦gimen de Omar Hassan al Bashir de complicidad con el bombardeo, asesinato y violaci¨®n de miles de civiles inocentes. "Mi Administraci¨®n califica estas acciones de manera clara: genocidio. Y el mundo tiene la responsabilidad de ayudar a ponerle fin", manifest¨®.
Con ese prop¨®sito, el Gobierno norteamericano proh¨ªbe cualquier tipo de negocios con 31 empresas de Sud¨¢n acusadas de estar bajo control de figuras del r¨¦gimen sudan¨¦s o de haber participado en el env¨ªo de armas a la regi¨®n de Darfur. Entre estas empresas se encuentran algunas vinculadas a la industria del petr¨®leo, producto esencial para la supervivencia de ese pa¨ªs.
El Departamento del Tesoro norteamericano ha elaborado tambi¨¦n una lista de cuatro dirigentes pol¨ªticos sudaneses a los que se proh¨ªbe todo tipo de actividad dentro del sistema financiero de Estados Unidos.
Estas medidas pretenden vencer la resistencia de las figuras que ostentan el poder en Jartum. El Gobierno de Al Bashir se ha negado a permitir el despliegue de tropas de la Uni¨®n Africana encargadas por la ONU de garantizar la seguridad en Darfur, donde m¨¢s de 200.000 personas han muerto y dos millones se han visto obligados a abandonar sus hogares en los ¨²ltimos cuatro a?os.
Pero quiz¨¢ la medida pol¨ªtica de mayores consecuencias anunciada ayer por Bush fue la de instruir a su secretaria de Estado, Condoleezza Rice, para que intente la aprobaci¨®n por parte del Consejo de Seguridad de la ONU de una nueva resoluci¨®n que permita actuar de forma m¨¢s contundente en Darfur.
EE UU intentar¨¢ que esa resoluci¨®n imponga un total embargo de armas a Sud¨¢n, proh¨ªba los vuelos sobre Darfur por parte del Gobierno de Jartum y cree un sistema de inspecci¨®n que permita vigilar con garant¨ªas la evoluci¨®n de los acontecimientos.
"Demasiado poco y demasiado tarde", dijo ayer David Rubinstein, el director ejecutivo de la Coalici¨®n Salvar Darfur, una influyente organizaci¨®n de la que forman parte relevantes figuras del mundo del espect¨¢culo, como el actor George Clooney, y que cuenta con enormes simpat¨ªas entre la mayor¨ªa dem¨®crata del Congreso, sobre todo entre los senadores y representantes negros. "El presidente tiene que marcar un corto e inflexible l¨ªmite para que el Gobierno de Sud¨¢n cumpla con sus compromisos", a?adi¨® Rubinstein.
Tarde, desde luego, s¨ª que llega la reacci¨®n. Han pasado ocho meses desde que Bush dijera desde la tribuna de la Asamblea General de la ONU que "si el Gobierno sudan¨¦s no permite el despliegue de cascos azules, la ONU tiene que actuar". Pero es m¨¢s discutible que estas medidas sean escasas. Lo son, seguramente, para la gente que sufre sobre el terreno la dram¨¢tica situaci¨®n denunciada. Pero no si se tiene en cuenta que es muy probable que ni siquiera esta modesta iniciativa consiga vencer el veto de China en el Consejo de Seguridad.
China es el principal socio comercial de Sud¨¢n y el comprador de dos terceras partes del petr¨®leo que produce ese pa¨ªs. El Gobierno chino comparte en t¨¦rminos generales la posici¨®n de Jartum de que la situaci¨®n en Darfur no es tan grave como se dice y que las cifras de muertos y refugiados han sido exageradas por los organismos internacionales. Un enviado de China visit¨® recientemente la regi¨®n de Darfur y lleg¨® a la conclusi¨®n de que la situaci¨®n all¨ª no era desesperada y que la gente no estaba muriendo de hambre.
Es dif¨ªcil que, hoy por hoy, China cambie de postura para apoyar la propuesta de Bush. La Coalici¨®n Salvar Darfur est¨¢, no obstante, ejerciendo mucha presi¨®n en ese sentido sobre uno de los pocos puntos d¨¦biles que el r¨¦gimen de Pek¨ªn exhibe en la actualidad: la organizaci¨®n de los Juegos Ol¨ªmpicos de 2008. Los partidarios de actuar contra Sud¨¢n est¨¢n amenazando con un boicoteo activo a las Olimpiadas si China no corrige su pol¨ªtica sobre Darfur.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.