Los talibanes atacan con nuevo armamento antia¨¦reo a las tropas de la OTAN

Siete soldados de la OTAN murieron en la noche del mi¨¦rcoles en Afganist¨¢n al ser derribado su helic¨®ptero por un ataque talib¨¢n en la provincia sure?a de Helmand, seg¨²n reconocieron portavoces de la OTAN. El ataque islamista fue respondido ayer por las fuerzas occidentales, que causaron una decena de muertos y heridos entre los rebeldes en esa zona. En Zabul, otra provincia del sur, una emboscada de los radicales cost¨® la vida a 16 polic¨ªas. Los ataques forman parte de la estrategia talib¨¢n de eludir el combate y optar por los golpes de mano con nuevo armamento antia¨¦reo.

El helic¨®ptero era un Chinook estadounidense capaz de transportar 28 soldados plenamente equipados y su derribo cost¨® la vida a los cinco tripulantes y a sendos soldados de Canad¨¢ y del Reino Unido, el total de los viajeros. Fuentes aliadas se?alan que todo apunta a que el aparato cay¨® por fuego enemigo, mientras que un representante talib¨¢n se jactaba de haberlo hecho con "un nuevo cohete antia¨¦reo".

El incidente se produjo en las inmediaciones de la presa de Kajaki, donde a primeros de marzo soldados de la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad de Afganist¨¢n (ISAF) lanzaron la operaci¨®n Aquiles para conseguir limpiar el terreno de insurgentes con vistas a poner a restaurar y poner en marcha la central hidroel¨¦ctrica, que deber¨¢ brindar servicio a unos dos millones de personas, incluidos los habitantes de Kandahar, la gran ciudad del sur del pa¨ªs.

El ataque talib¨¢n suscit¨® una respuesta aliada y del Ej¨¦rcito afgano "para eliminar la amenaza enemiga" que, con apoyo de fuego a¨¦reo, produjo con las primeras luces de ayer "diez muertos o heridos" entre los talibanes, seg¨²n el Ministerio de Defensa de Kabul. La OTAN present¨® esta ofensiva como parte de la operaci¨®n Mango de Hacha, heredera de Aquiles, que moviliza a unos 2.000 soldados, de los que la mitad son brit¨¢nicos, el contingente aliado que soporta el peso de la ISAF en Helmand.

Esta acci¨®n de limpieza aliada en el distrito de Sangin (Helmand) coincidi¨® en el tiempo con otro golpe de mano de los talibanes que, en una emboscada tendida en la provincia de Zabul, mataron a 16 polic¨ªas afganos. Fue uno de sus m¨¢s mort¨ªferos ataques de los ¨²ltimos meses. En la provincia de Helmand se cultiva el 45% de la producci¨®n del opio afgano, del que deriva el 90% de la hero¨ªna que se consume en el mundo. Por las ingentes cantidades de dinero que mueve, es un basti¨®n de la insurgencia, el narcotr¨¢fico y las conexiones entre ambos. Los productores y narcotraficantes ofrecen compensaciones financieras a los talibanes a cambio de que protejan sus cosechas de los intentos de erradicaci¨®n.

Francesc Vendrell, representante especial de la Uni¨®n Europea en Afganist¨¢n, ha dicho esta semana en Bruselas que en Afganist¨¢n no se ha producido la esperada ofensiva de primavera de los talibanes "quiz¨¢ porque aprendieron el a?o pasado que el enfrentamiento directo no da resultado".

El pasado septiembre, la operaci¨®n Medusa de ISAF cost¨® cientos de vidas a los talibanes, que plantearon un ataque convencional contra las fuerzas occidentales. Vendrell subray¨® que el ataque frontal ha dejado paso a acciones de tipo comando. "Ha habido y habr¨¢ ataques suicidas y con bombas", dijo para subrayar que los islamistas han vuelto a su vieja t¨¢ctica de golpear y abandonar el campo. Es lo que hicieron ayer en Zabul.

La estancia de Vendrell en Bruselas coincidi¨® con la aprobaci¨®n oficial por la UE del env¨ªo de una misi¨®n de polic¨ªa de 160 efectivos, incluidos seis expertos jur¨ªdicos, a Afganist¨¢n para instruir las fuerzas de seguridad locales durante al menos tres a?os.

La llamada EUPOL Afganist¨¢n contar¨¢ con 14 polic¨ªas y guardias civiles espa?oles. Los agentes europeos llevar¨¢n armas para defensa propia y tendr¨¢n cierta cobertura de seguridad proporcionada por ISAF.