Implosi¨®n
Una semana despu¨¦s del 27-M (qu¨¦ l¨ªo ya de fechas efem¨¦rides abreviadas), este domingo no pasar¨¢ a la historia como el 3-J. Un alivio. Veinticuatro horas sin dimisiones ni broncas, aunque los telediarios dominicales trajeron sangre, en ese derramamiento ritual que se produce en los lugares habituales (Irak y L¨ªbano) y con las v¨ªctimas de rigor (la mujer asesinada en Vitoria por su marido). La programaci¨®n respiraba la ligereza propia del d¨ªa de descanso. En El hormiguero (Cuatro), la violencia era aparatosa pero falsa: Pablo Motos experimentaba con gaseosa, o algo igual de espumoso, logrando la implosi¨®n de unos contenedores antibalas que saltaban por los aires; despu¨¦s, dos de sus colaboradores se hund¨ªan, en otro gracioso juego, en sendos bidones de arenas movedizas. Arenas menos traidoras que las que pisan los Supervivientes de Tele 5, donde en la madrugada se debat¨ªan cuestiones tranquilizadoramente balad¨ªes: ?construir¨¢ el concursante Javier otro palafito a su medida? Incluso en el reportaje de Espa?a directo (TVE-1) sobre los mariscadores gallegos manifest¨¢ndose contra el barco gasero en sus aguas, la polic¨ªa repart¨ªa porrazos con parsimonia, dando pie a que el c¨¢mara de TVE dialogase con su golpeador: "Yo no puedo grabar si me est¨¢s dando".
Pero lleg¨® el lunes, con la amargura de los d¨ªas de diario. Enfrentamiento en Las ma?anas de Cuatro entre Mar¨ªa Antonia Iglesias y ?ngela Exterminadora Vallvey sobre la previsi¨®n de atentados de ETA y la actitud negociadora de Zapatero, mientras en Noticias Cuatro se manten¨ªan a la espera, como dijo su conductor Javier Ruiz, de dar en directo "la cabeza de Rafael Simancas". Ruiz mostr¨® entretanto la imagen de los calcetines clareados de Rajoy tomados por detr¨¢s; ?descuido ropero o mensaje subliminal de humildad tras no decir su sueldo en p¨²blico? Informativos Tele 5 de Hilario Pino nos sirvi¨® la anunciada cabeza cortada de Simancas, pero s¨®lo despu¨¦s del divertido arranque sobre la letra del himno nacional. Mientras se ponen de acuerdo los poetas y a los futbolistas les da igual, Luis Aragon¨¦s sigue cantando la letra de Pem¨¢n.
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