Un movimiento muy heterog¨¦neo
Los mandatarios m¨¢s poderosos del planeta saben desde hace alg¨²n tiempo que sus reuniones pueden ser a veces aburridas, pero casi nunca silenciosas. Lo saben desde noviembre de 1999, cuando durante la cumbre en Seattle de la Organizaci¨®n Mundial del Comercio (OMC) irrumpi¨® con tanta fuerza el movimiento antiglobalizaci¨®n que logr¨® incluso abortar, ante la estupefacci¨®n general, una reuni¨®n tan importante que se hab¨ªa bautizado como Ronda del Milenio.
Parad¨®jicamente, la globalizaci¨®n hab¨ªa sido la clave para alumbrar el movimiento, que dice no renegar de la globalizaci¨®n, sino de la globalizaci¨®n capitalista: Internet y todas las redes globales ponen en contacto permanente a grupos muy diversos, que se juntan en las principales cumbres para protestar. Desde Seattle se han propuesto incidir en cada cumbre importante, y a veces han vuelto a lograr suspenderla. Como en Praga, en 2000, durante la reuni¨®n conjunta del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial. Y en Barcelona, en 2001, en una cumbre del Banco Mundial.
Alentados por el ¨¦xito en negativo, el heterog¨¦neo grupo antiglobalizador decidi¨® que deb¨ªa realizar propuestas tambi¨¦n en positivo. Naci¨® entonces el Foro Social Mundial -y su lema, "Otro mundo es posible"-, que tuvo su primera edici¨®n en Porto Alegre (Brasil) en 2001, y que supone el gran encuentro anual de movimientos sociales de todo el mundo. Entre las propuestas que ha alumbrado destacan la tasa Tobin -un impuesto a las transacciones financieras internacionales- y la constituci¨®n de redes de comercio justo, que garantiza un "precio digno" a los productores del Tercer Mundo.
El movimiento es tan dispar que muchos s¨®lo se encuentran en las contracumbres. Tienen en com¨²n la reticencia al capitalismo, pero algunos aspiran a reformarlo y otros a destruirlo. Est¨¢n desde las ONG a los partidos pol¨ªticos de la izquierda parlamentaria, pero tambi¨¦n grupos misteriosos como el Bloque Negro, abanderado de la acci¨®n directa, que en cada cumbre llevan de cabeza tanto a la polic¨ªa como a la gran mayor¨ªa de manifestantes pac¨ªficos.
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