El irresistible poder de Google
La multinacional compra Panoramio y ficha a sus dos fundadores alicantinos
A Joaqu¨ªn Cuenca y Eduardo Manch¨®n se les ha acabado ir por libre y funcionar como aut¨®nomos. En los pr¨®ximos d¨ªas, los j¨®venes alicantinos har¨¢n las maletas para incorporarse al centro de investigaci¨®n de Google en Z¨²rich, Suiza. La multinacional americana les ha fichado, tras adquirir el portal Panoramio que hab¨ªan creado hace menos de dos a?os en sus ratos libres.
Su idea no naci¨® en el garaje de una casa, como sucede en Estados Unidos, donde casi todas las viviendas tienen el garaje a la altura del sal¨®n. Pero en todo lo dem¨¢s, su corta historia corre paralela a las leyendas sobre corporaciones creadas por amigos en un rinc¨®n del garaje.
Joaqu¨ªn Cuenca y Eduardo Manch¨®n pidieron becas Erasmus para estudiar en Bergen y Par¨ªs, sin saber noruego, ingl¨¦s ni franc¨¦s.
La herramienta que han desarrollado permite a los usuarios de Google Maps o Google Earth observar im¨¢genes panor¨¢micas hechas por ellos mismos
Panoramio naci¨® en octubre de 2005 y surgi¨® tras o¨ªr a un abuelo preguntar si pod¨ªa colocar una foto para que otros la vieran
Joaqu¨ªn Cuenca y Eduardo Manch¨®n son amigos desde la infancia, de cuando compart¨ªan su com¨²n afici¨®n por los ordenadores en el instituto de Callosa del Segura (Alicante). Cuenca procede del municipio contiguo, Cox, y acab¨® estudiando F¨ªsicas e Inform¨¢tica en Valencia. Manch¨®n se licenci¨® en Psicolog¨ªa.
Los dos se acogieron a una beca Erasmus con distintos destinos. Sin saber ingl¨¦s ni noruego, Manch¨®n fue a Bergen (Noruega) a especializarse en Usabilidad, una disciplina que intenta adaptar al usuario corriente el manejo de art¨ªculos manufacturados. No lleg¨® a terminar el doctorado porque La Caixa le contrat¨®, entre otras cosas, para adaptar a los clientes el uso de los cajeros. "Un cajero puede desarrollar 300 acciones, pero en el 98% de las ocasiones los clientes s¨®lo los usan para sacar dinero. Los que las dise?an se olvidan de que deben hacer f¨¢cil esa operaci¨®n", dice Manch¨®n, que ha escrito decenas de art¨ªculos sobre su especialidad.
La carrera de Cuenca se canaliz¨® en Par¨ªs, adonde lleg¨® sin saber una palabra de franc¨¦s. Mientras terminaba sus dos especialidades se ganaba la subsistencia en el campo de la programaci¨®n inform¨¢tica para varias empresas.
Cuenca y Manch¨®n permanec¨ªan distanciados f¨ªsicamente, pero su com¨²n dedicaci¨®n a la inform¨¢tica les manten¨ªa tan cerca como en su ¨¦poca infantil, gracias a Internet y a su com¨²n inter¨¦s por desarrollar ideas en su entorno.
La primera en la que coincidieron fue en el desarrollo de un portal que el cubano Ubaldo Huertas mont¨® con un servidor instalado en el sal¨®n de su casa de Barcelona. "Con la comunidad Loquo quer¨ªamos hacer algo parecido a Craigslist, un portal gratuito de enorme popularidad en San Francisco. Imagina que conoces a una chica a la entrada del metro, la pierdes de vista y quieres contactar con ella. Pones un anuncio y a lo mejor tienes la suerte de dar con ella", explica sonriente Joaqu¨ªn Cuenca.
Fotos de los usuarios
Los dos amigos, con los 30 a?os ya cumplidos, se han convertido de pronto en personajes populares, aunque ya gozaban de notoriedad en el mundo de Internet. Las cadenas de televisi¨®n hacen cola para entrevistarlos. En cuanto Loquo empez¨® a destacar la compr¨® E-Bay. Y a ellos les acaba de comprar Google, cuando empezaban a ser conocidos en todo el mundo gracias a Panoramio, un programa que pusieron en marcha en octubre de 2005. Surgi¨® tras o¨ªr a un abuelo preguntar c¨®mo pod¨ªa colocar una foto para que otros la pudieran ver. La herramienta que han desarrollado permite al usuario de Google Maps o Google Earth observar im¨¢genes panor¨¢micas realizadas por los propios usuarios. No hay m¨¢s que pinchar el punto elegido para que aparezca un ramillete de estrellas en las que cada una da paso a una fotograf¨ªa panor¨¢mica del lugar.
Esta aplicaci¨®n es posible gracias al programa AdSense que Google pone a disposici¨®n de los usuarios con web propia. El programa permite obtener ingresos por los anuncios relacionados con la actividad del propietario de la web o el blog a donde Google los reconduce de forma aut¨®mata.
Cuenca y Manch¨®n han trabajado en sus ratos libres y por amor al arte en esta actividad. Siempr
e han estado del lado del software gratuito, en favor de compartir libremente las extraordinarias herramientas que brinda Internet. Tampoco ten¨ªan la necesidad de muchos recursos. Les bast¨® alquilar un servidor por menos de 100 euros mensuales y comprar por siete euros al a?o el dominio Panoramio (nombre propuesto por la novia de Manch¨®n) para poner en marcha un proyecto que, a los pocos meses de iniciarlo, ten¨ªa m¨¢s de medio mill¨®n de internautas pendientes de ¨¦l.
Dos proyectos m¨¢s en cartera
Cuenca ha ganado varias olimpiadas de F¨ªsica. Es el art¨ªfice de los algoritmos que permiten situar fotos en Google Maps, excluir pornograf¨ªa, cambiar fotos inexactas y seleccionar las de mayor calidad. Todo ello realizado por los propios usuarios, los mismos que han traducido Panoramio a m¨¢s de 20 idiomas.El trabajo sedujo al director de Google Earth, Jonh Hanke. En febrero de 2006 les invit¨® por correo electr¨®nico "para conocerse y estrechar lazos" en San Francisco. As¨ª empez¨® un idilio que ha concluido con la compra de Panoramio y su fichaje por la compa?¨ªa. ?Cu¨¢nto han costado? Google se calla. Manch¨®n y Cuenca no pueden revelarlo. "Nos han pagado bien", dicen. Ya forman parte de una multinacional con una filosof¨ªa de trabajo corporativa rigurosamente definida. Se acab¨® el ir por libre. Los proyectos en los que trabajaba Cuenca, una plataforma para cursos y una aplicaci¨®n para anuncios de pisos, se ver¨¢n quiz¨¢ pronto con la marca de la multinacional.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.