La Yago cambia de teatro
La hist¨®rica sala compostelana cierra con una fiesta abierta a toda la cultura gallega
"Esto es un edificio privado, no una instituci¨®n p¨²blica. Si hemos cambiado de r¨¦gimen, que me lo digan, pero no estamos en ¨¦poca de bolcheviques. No se puede ocupar la propiedad de uno". Esto es lo que dice Miguel Carrero L¨®pez, presidente del Colegio de M¨¦dicos de A Coru?a y portavoz de la familia propietaria de la Sala Yago, en el coraz¨®n de la zona vieja compostelana, un teatro de 1.200 metros cuadrados. Seg¨²n la sociedad creada en 2000 por Eduardo Alonso (Teatro do Noroeste), Jorge Rei (T¨ªteres Cachirulo) y la actriz Luma G¨®mez para gestionar la sala, el valor del edificio supera el mill¨®n de euros.
La Sala Yago cierra ahora sus puertas como teatro el d¨ªa 27, con una fiesta abierta a toda la cultura gallega. Despu¨¦s de 1955 d¨ªas de programaci¨®n, incluyendo los ciclos de cine en versi¨®n original, no hubo duelos mayores duelo por el teatro en Compostela, acostumbrado como est¨¢ el g¨¦nero a las misas de r¨¦quiem. S¨ª se critica, sin embargo, la opresi¨®n de los espacios de un g¨¦nero altamente subvencionado por la Administraci¨®n. Tras la defunci¨®n de la Sala Gal¨¢n, las actividades esc¨¦nicas en Compostela habr¨¢n de repart¨ªrselas entre el Sal¨®n Teatro, el Principal y la Nasa.
El edificio es para uso cultural, pero sus due?os quieren otra catalogac¨ª¨®n urban¨ªstica
"La primera noticia que tuve fue hace un mes", indica Miguel Mart¨ªn, director del Instituto Galego de Artes Esc¨¦nicas e Musicais, dependiente de Cultura. "Jorge y Eduardo hablaron conmigo para decirme que no ten¨ªa remedio, y les dimos todas las facilidades para conservar las ayudas. Las posiciones estaban muy enconadas, pero quiz¨¢ con m¨¢s tiempo habr¨ªamos tenido m¨¢s margen para trazar alternativas". "Si el Ayuntamiento hiciese una propuesta para dar una alternativa al local", traslada Mart¨ªn, "desde la Conseller¨ªa se estudiar¨ªa con seriedad".
Reciclada la Yago como materia electoral, el concejal de Cultura de Santiago, N¨¦stor Rego (BNG), defendi¨® en campa?a que el Ayuntamiento deb¨ªa comprar la sala. PSOE y PP defendieron tambi¨¦n la vida del espacio teatral. La concejala de urbanismo en funciones, Mercedes Ros¨®n, se?ala que el Plan Xeral de Ordenaci¨®n Municipal que se tramita actualmente no variar¨¢ la calificaci¨®n urban¨ªstica de la sala, que conservar¨¢ el uso "sociocultural y recreativo". Sin embargo, Carrero advierte: "Haremos todo lo posible por recuperar el uso libre. A m¨ª no me gusta que me metan la mano en el bolsillo, y lo del uso sociocultural y recreativo fue una expropiaci¨®n que nos hizo el Ayuntamiento con nocturnidad y alevos¨ªa".
Ros¨®n apunta que los due?os de la Sala Yago "tuvieron tiempo" de enterarse durante los diez a?os que tard¨® en aprobarse el Plan Especial, tras m¨¢s de 6.000 alegaciones. Pero la opci¨®n de compra por parte del Ayuntamiento, que deber¨ªa nuclearse en torno al Consorcio, no parece inmediata.
"Nosotros les preguntamos cu¨¢nto ped¨ªan", recuerda Alonso, "no para pagarlo, pero s¨ª para dise?ar una estrategia de compra". "Con un a?o de margen podr¨ªamos interesar a m¨¢s de un empresario del audiovisual", insin¨²a. "La ¨²nica queja que tengo es que ni siquiera nos diesen una cifra, porque va contra toda l¨®gica capitalista". En la versi¨®n de Carrero, "nunca han pretendido comprarlo". "Yo nunca perder¨ªa el tiempo en ese tipo de mercado. No me cabe en la cabeza que un espect¨¢culo de t¨ªteres pueda estar en uno de los edificios principales de Santiago". El portavoz de los propietarios asegura que "no hay ninguna decisi¨®n tomada". El Ayuntamiento recuerda que hay "herramientas legales" para obligar a los due?os a restaurar la sala. Pero la sensaci¨®n de Alonso es que el edificio "estar¨¢ abandonado en unos a?os".
"Una prueba de dejadez"
Espect¨¢culos Capitol, de la empresa familiar Gesto Nieto, alquil¨® el antiguo edificio de Correos en los a?os 50 para hacerlo funcionar como cine. Desde 1998, un acuerdo de explotaci¨®n conjunta permiti¨® a Eduardo Alonso y Jorge Rei inaugurar la Sala Yago como espacio teatral de referencia en Santiago.
En 2000, tras el abandono de los Gesto Nieto, compa?¨ªas gallegas y espa?olas comenzaron a trasladar sus montajes a la Yago, con un concepto claro: "Preferimos un teatro medio lleno durante dos d¨ªas que abarrotar un d¨ªa y cerrar al siguiente", en palabras de Alonso.
Para Gustavo Pernas, de ?ncora Teatro, "lo de la Yago es una prueba m¨¢s de la dejadez de los pol¨ªticos, en un momento en que, si hablamos de teatro, hay claros signos de involuci¨®n e improvisaci¨®n pol¨ªtica". "De la gente de la cultura s¨®lo se echa mano cuando interesa", dice Pernas.
El director andaluz Carlos ?lvarez-Ossorio, residente en Santiago, no fija la ra¨ªz del problema en la ausencia de espacios esc¨¦nicos de iniciativa privada. "Con problemas parecidos a ¨¦stos, el Ayuntamiento de Sevilla cede espacios para construir salas", dice. "Los due?os tienen todo el derecho del mundo a alquilarle la Yago a quienes deseen, pero el riesgo es dejarla morir".
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