Algo se mueve en el PP
Algo se mueve en el seno del Partido Popular andaluz.
El silencio mantenido en los diez ¨²ltimos d¨ªas por su presidente regional, Javier Arenas, y algunos comentarios que nacen de c¨ªrculos cercanos a la direcci¨®n nacional del partido, apuntan a que se pueda estar viviendo una crisis interna desencadenada por los resultados -flojos resultados- electorales obtenidos en nuestra Comunidad.
Lo cierto es que puede que en Madrid est¨¦ cundiendo el temor de que si bien se mantienen graneros de voto tradicionales para los populares, como puedan ser Castilla-Le¨®n, Galicia o Murcia, estos han llegado a su techo o incluso mermado en algunos casos, sin que comunidades como Castilla la Mancha, Extremadura y, sobre todo, Andaluc¨ªa, por el porcentaje nacional de censo que esta ¨²ltima aporta -casi el 20% del nacional-, hayan conseguido a¨²n despegar de su suelo para ara?ar a los socialistas los votos necesarios para hacer posible la victoria del PP en las pr¨®ximas generales.
Algo que se justifica si nos asomamos a los resultados de las municipales de los ¨²ltimos doce a?os en los que el Partido Popular de Andaluc¨ªa (PP-A) ha pasado del 31,15% de los votos en 1995 al 32,08% en 2007, situ¨¢ndose en aqu¨¦l a?o a 2,81 puntos del PSOE, para pasar en el presente a estar a 8,56 puntos de los socialistas.
Es m¨¢s. Mientras el PP-A consegu¨ªa el pasado 27 de mayo en torno a 24.000 votos m¨¢s que en 2003, el PSOE-A incrementaba su cuenta de apoyos en 65.000 votos, dato este que se hace a¨²n m¨¢s patente si tenemos en cuenta que de 1995 a 2007 los socialistas han incrementado el n¨²mero de apoyos municipales en 281.757, mientras que los populares lo han hecho en s¨®lo 59.187.
De ello cabe deducir que si Arenas represent¨® en 1994 un revulsivo para el partido en Andaluc¨ªa, tras la refundaci¨®n de la extinta AP, lo que supuso un cambio cualitativo y cuantitativo muy importante, no es menos cierto que el PP-A se estanc¨® en el tiempo, tanto en su imagen como en su capacidad de convocatoria, manteniendo un suelo electoral tan estable como inm¨®vil de cara a incrementarse con votos procedentes de la izquierda, a la vez que no logrando grandes avances en el medio rural, feudo incontestable de socialistas y comunistas.
Las causas hay que buscarlas en una din¨¢mica de partido excesivamente conservadora, marcada por los postulados de la democracia cristiana, adscripci¨®n pol¨ªtica en la que se sit¨²an Arenas y el n¨²cleo m¨¢s duro de su equipo en estos a?os, escasamente aperturista, clientelista en lo org¨¢nico y carente de compromisos y objetivos reales que pusiesen en peligro, por su riesgo, el status de su clase dirigente.
Ello, que se ha querido revestir con el discurso de la confrontaci¨®n con el PSOE, ha dado lugar a una estructura escasamente el¨¢stica, poco creativa, con limitado poder de comunicaci¨®n social y carente de liderazgos capaces de dinamizarla internamente.
Un partido que en Andaluc¨ªa ha huido del debate interno real, por miedo a generar tensiones que pusiesen en peligro aspiraciones personales, con lo que se ha empobrecido el discurso, se ha limitado la renovaci¨®n y se ha ofrecido a la sociedad una imagen de continuismo, alejada del liberalismo que debiera competir con el proyecto socialista.
A partir de ah¨ª entiendo que no cabe sino modificar esta situaci¨®n y adem¨¢s hacerlo de forma decisiva, sin miedo a coste electoral alguno, si tenemos en cuenta la fidelidad del voto de centro-derecha y las posibilidades reales que en Andaluc¨ªa existen de incrementar el n¨²mero de votantes tras veinticinco a?os de agotamiento de las pol¨ªticas municipales y auton¨®micas de los socialistas en nuestra Comunidad.
A la transformaci¨®n que el PP vivi¨® en Andaluc¨ªa en 1994 le debe seguir, trece a?os despu¨¦s, un nuevo cambio singular que apueste por la aplicaci¨®n efectiva de los planteamientos liberales que imperan en la mayor parte de Europa, protagonizado, ello resulta evidente, por nuevas personas que sientan como propio el pensamiento liberal y, por tanto, lo transmitan con entusiasmo y capacidad de convicci¨®n.
No olvidemos que los andaluces no son de izquierdas o derechas porque su mapa gen¨®mico as¨ª lo establezca, sino por la calidad o el dem¨¦rito de las pol¨ªticas y sus representantes que en cada caso les hayan sido aplicadas y pruebas de ello las tenemos a cientos del este al oeste y del norte al sur de Andaluc¨ªa.
Conseguir la nueva transformaci¨®n es una misi¨®n que le corresponde llevar a cabo a la direcci¨®n nacional del partido y que ha de contar con la colaboraci¨®n de la actual direcci¨®n regional.
Enrique Bellido Mu?oz ha sido senador y presidente del PP de C¨®rdoba.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.