La estrategia de la ara?a iran¨ª

En Oriente Pr¨®ximo las cosas est¨¢n claras para quien quiera verlas. Tan claras como clara es la estrategia de Ir¨¢n: ganar tiempo, confundir, provocar y generar una gran cortina de humo que aparte la mirada de su oscuro plan nuclear (bomba incluida) con el que hacer un permanente chantaje a nuestros pobres principios morales y democr¨¢ticos. Una vez lograda la capacidad nuclear militar, su posici¨®n ser¨¢ la del conflicto disuasorio, se mirar¨¢ en el espejo de la vieja guerra fr¨ªa, y su modelo social ser¨¢ la consolidaci¨®n de la tiran¨ªa religiosa. No es casual que un tirano tan arrogante como Ch¨¢vez haya encontrado un aliado -y no t¨¢ctico sino estrat¨¦gico- en Ahmadineyad. Vivimos tiempos en que los tiranos renacen, los peligros se ven venir desde lejos, no hay tapujos en los planteamientos de nuestros enemigos, no disimulan sus intenciones. Y sin embargo, nos cuesta mucho asimilar el concepto de que son "nuestros enemigos". A veces no creemos ni siquiera que estemos amenazados. El juicio del 11-M, tal vez lo m¨¢s importante que est¨¢ pasando hoy en Europa, se ha convertido en algunos medios o para algunas personas en algo ajeno, irreal, que tiene un poderoso componente espectacular, como lo es un reality show o un extra?o laberinto dial¨¦ctico.

Hace tiempo que hay indicios suficientes para advertir de que en Oriente Pr¨®ximo se est¨¢n llevando a cabo los experimentos del futuro. Es un dram¨¢tico y no menos espectacular campo de pruebas de una realidad que vemos tan ajena, por desgracia, como el juicio del 11-M. En Oriente Pr¨®ximo hay un plan. Para quien quiera verlo, insisto, ya que la ceguera es libre. No me refiero a una conspiraci¨®n, pero casi. Hay una estrategia que tiene por objetivo la provocaci¨®n, la desesperaci¨®n de Israel, la confusi¨®n de todos los pa¨ªses estables de la zona (Egipto, Jordania) y la amenaza insistente de unos pocos. Este plan tiene metas, fases, programaci¨®n, y es un plan en el que el tiempo juega a su favor. El origen est¨¢ en dos pa¨ªses: Ir¨¢n y Siria. La oportunidad del plan surgi¨® y ha ido desarroll¨¢ndose con la guerra de Irak, o mejor dicho con la evoluci¨®n que ha tomado la guerra de Irak. Ir¨¢n ha optado por presionar cuando se ha demostrado que nunca ser¨¢ atacada ni invadida por EE UU de una manera convencional, ya que si algo ha ense?ado esta guerra en Irak es que quien inicia acciones as¨ª, en el mundo isl¨¢mico moderno, basado en la permanente guerra civil como arma, se ve arrojado a una humillante derrota.

Cuando sucedi¨® hace un a?o, el orquestado secuestro de unos soldados israel¨ªes motiv¨® la en¨¦sima provocaci¨®n por parte de Ham¨¢s, un grupo terrorista, y el pretendido reequilibrio de fuerzas en L¨ªbano fue inducido por Ir¨¢n y Siria, quienes sab¨ªan perfectamente que Israel entrar¨ªa enseguida al trapo. No ten¨ªa m¨¢s remedio, si no quer¨ªa dar imagen de debilidad, de derrota, de incapacidad. Otra cosa es c¨®mo entr¨®, y c¨®mo fracas¨®, y para ello, para juzgar sus errores, algunos de enorme calado humano, militar y pol¨ªtico, se constituy¨® una comisi¨®n (Vinograd) cuyos resultados han sido demoledores con el Gobierno de Olmert -fracasado se mire desde donde se mire-. Pero al menos en Israel son capaces de justicia y cr¨ªtica. ?Existe en el mundo ¨¢rabe una comisi¨®n as¨ª, capaz de reprocharle crudamente a sus gobiernos sus errores militares con tanta crudeza? La respuesta es: obviamente, no.

Pero sigamos. Como Ir¨¢n y Siria lo sab¨ªan, iniciaron la provocaci¨®n. El precio que hab¨ªa que pagar tambi¨¦n estaba ya en el plan previo: unos cuantos miles de muertos en L¨ªbano, unos cuantos millones de d¨®lares en destrucci¨®n de infraestructuras (que de inmediato se repusieron descaradamente por Ir¨¢n y Siria). Pero los beneficios fueron enormes: tensi¨®n de fuerzas en L¨ªbano, inmerso en una larga par¨¢lisis sin protagonismo, desgaste de su Gobierno prooccidental, con el consiguiente paso a la otra fase, la del predominio de Hezbol¨¢ como fuerza emergente en busca de una oportunidad, y la subida del petr¨®leo en Ir¨¢n, que todo lo acalla con el alza de precios. No olvidemos que Ir¨¢n es "intocable" no porque figuras como Ahmadineyad o los ayatolahs gobiernen un pa¨ªs que, tarde o temprano, tendr¨¢ que reaccionar, sino por la presi¨®n que ejerce sobre los precios del crudo. ?Qu¨¦ riesgos asum¨ªan entonces los creadores de ese plan? ?stos: la evidencia de que Siria est¨¢ detr¨¢s del asesinato de Hariri, todo un s¨ªmbolo, y la tensi¨®n en la zona hasta el extremo de parecer que nadie tiene el control de nada. La turbulencia como clima pol¨ªtico. Pero Hezbol¨¢ y Ham¨¢s, es decir, Siria e Ir¨¢n, s¨ª tienen el control, y saben que con unas cuantas fotos impactantes, unos cuantos terribles dramas humanos y unas cuantas hipocres¨ªas, la conciencia occidental europea se ablanda y enseguida entra en la espiral de la culpa y el manique¨ªsmo.

Ahora estamos en una fase m¨¢s: ahora la vuelta de tuerca de Ir¨¢n, en materia nuclear, se ha vuelto a dar. No olvidemos que ¨¦ste es su Gran Objetivo. Todos los dem¨¢s hechos en la zona son acciones o etapas para llegar a ese objetivo, el de hacerse potencia. Por tanto, en la nueva fase, a la que estamos asistiendo, las piezas "t¨ªteres" vuelven a moverse, a generar humo, a crear muertos (algo barato para el mundo isl¨¢mico): Ham¨¢s busca eliminar pol¨ªticamente a Al Fatah mediante el amago de guerra civil, y Siria activa los muyahidim de Fatah al Islam, de Al Qaeda, que desde hace un a?o viene depositando en los campos palestinos libaneses, en la confianza de que ya ser¨¢n barridos por Hezbol¨¢ cuando convenga. Y Siria los "activa" justo cuando la ONU se va a pronunciar, con su investigaci¨®n, sobre la culpabilidad de ese pa¨ªs en el asesinato de Hariri, y justo cuando Bachar al Assad ha salido reforzado en un simulacro de refer¨¦ndum (el t¨ªpico 97,6%). Ahora que nadie para los pies a Ir¨¢n, ahora que la debilidad de Abu Mazen es mayor, ahora que la pol¨ªtica de Israel est¨¢ tocada y en entredicho, precisamente ahora se da cabida a estas milicias de un terrorista del que oiremos hablar mucho, como es Shakir al Absi. Tomen nota. Son el monstruo que se ha dejado crecer confiando en que sirva para desestabilizar durante un tiempo. Y se instaurar¨¢n tambi¨¦n en Gaza contra Al Fatah, son los perros que necesitan Ham¨¢s e Hezbol¨¢ para convertirse en necesarios. Lo que falta por ver es si se volver¨¢n contra ellos o no. Hay que esperar a ver si Al Qaeda tendr¨¢ a medio plazo un papel protagonista o no en Oriente Pr¨®ximo, mediante una progresi¨®n a base de "guerras civiles port¨¢tiles" para que, finalmente, la gran confrontaci¨®n, el pulso esperado, sea entre Arabia Saud¨ª e Ir¨¢n. Un Ir¨¢n muy poderoso porque nadie se habr¨¢ atrevido a enfrentarse a su amenaza nuclear, nada velada, muy n¨ªtida y expansiva. Nuestro enemigo. ?Lo diremos?

Adolfo Garc¨ªa Ortega es escritor.