La otra Uni¨®n Europea

"Los problemas de Alcal¨¢ de Henares son los mismos que tenemos aqu¨ª. La empresa sigue fabricando productos viejos y no se innova". Mohamed Brahmi, que pertenece al Eurocomit¨¦ de Bosch, lo sabe bien. ?l trabaja en la factor¨ªa que tiene la multinacional alemana en V¨¦nissieux, a las afueras de Lyon (Francia).

Brahmi, que naci¨® en Argelia, vive en Francia desde que ten¨ªa dos a?os. Ahora tiene 44. En 1983 entr¨® a trabajar en la Bosch. Hoy es, dentro del sindicato CGT (el primero en Francia), el secretario de Inmigraci¨®n. En el aparcamiento de la f¨¢brica, afirma que los trabajadores franceses de la Bosch no van a consentir "que se cierre ninguna f¨¢brica en Espa?a".

Porque Espa?a, Alemania o Italia, sufren del mismo c¨¢ncer: la huida de las empresas hacia pa¨ªses con una mano de obra barata. Unidos en esa lucha se juntaron ayer en la localidad francesa casi 200 trabajadores de la Bosch de Alcal¨¢ de Henares amenazados de cierre desde el pasado 5 de febrero. Son un grupo representativo de los 417 obreros que trabajan en la planta de Alcal¨¢, amenazados por la prejubilaci¨®n o el traslado a Aranjuez. Para protestar, viajan este fin de semana a la sede central de la compa?¨ªa en Stuttgart (Alemania). V¨¦nissieux es una escala en el periplo.

El recibimiento fue estupendo, aunque apenas hubo una quincena de trabajadores de la planta francesa apoyando a los espa?oles. Pero s¨ª estaban los representantes de los sindicatos franceses CGT y CFDT. Adem¨¢s, el alcalde de V¨¦nissieux, Andr¨¦ Garin, pronunci¨® un emotivo discurso en el instituto Alain Colas: "Os apoyo en vuestra batalla con Bosch para defender la industria. Una batalla que concierne a los trabajadores de Espa?a, Alemania y Francia". Fue un continuo ba?o de uni¨®n europea, as¨ª en min¨²sculas. Una uni¨®n diferente de la UE. Pero una confraternizaci¨®n m¨¢s emotiva de la gente de a pie, obrera y del Viejo Continente.