"Pasamos a debatir el botell¨®n"
El Senado celebra los 30 a?os de democracia con un pleno con estudiantes
"A continuaci¨®n, pasamos a debatir el botell¨®n". Pasaban las seis de la tarde cuando el presidente del Senado, Javier Rojo, dejaba recogida en el diario de sesiones esta ins¨®lita frase. Frente a ¨¦l, en el hemiciclo, se sentaban 259 estudiantes de bachillerato de 16 y 17 a?os, y ¨¦se era uno de los temas sobre los que hab¨ªan decidido debatir.
Los alumnos pidieron a los senadores "humildad respecto al pueblo y seriedad en la pol¨ªtica"
El Senado los hab¨ªa invitado para celebrar el 30 aniversario de las primeras elecciones democr¨¢ticas. Se trataba de celebrar una sesi¨®n parlamentaria oficial, pero con aqu¨¦llos que se supone m¨¢s alejados de la pol¨ªtica. Los 259, el n¨²mero de senadores, con la misma representaci¨®n territorial, estaban escogidos por las consejer¨ªas de Educaci¨®n de cada autonom¨ªa, con el criterio de equilibrar hombres y mujeres y ambiente rural o urbano. Reci¨¦n aterrizados en Madrid, se organizaron en comisiones sobre varios temas (ocio, pol¨ªtica, educaci¨®n...). No se conoc¨ªan entre s¨ª. En una ma?ana hicieron un diagn¨®stico de Espa?a que plasmaron en recomendaciones por la tarde.
El senador del PP Jos¨¦ Manuel Barquero, que presid¨ªa la Comisi¨®n de Participaci¨®n Social y Pol¨ªtica sali¨® de la sala moviendo la cabeza, con cara de asombro y media sonrisa. "Me he quedado impresionado. Se han puesto de acuerdo en seguida en los grandes problemas. Han identificado perfectamente los problemas de la pol¨ªtica. Lo han clavado".
En el pleno de la tarde, Paula Arribas fue la ponente que explic¨® a los espa?oles el trabajo que hab¨ªa dejado a Barquero sin palabras. "S¨®lo cada cuatro a?os participamos con un papel en el que no est¨¢n reflejados no nuestros problemas ni nuestras aspiraciones", comenz¨® Arribas. "Es necesario que la pol¨ªtica se centre en grandes temas, como sanidad, educaci¨®n o econom¨ªa". Y en esos grandes temas, "no se pueden cambiar las leyes cada cuatro a?os".
Adem¨¢s, la pol¨ªtica se est¨¢ resumiendo en "una lucha bipartidista entre dos colores" que no es m¨¢s que "una falacia", dijo Arribas en nombre de la comisi¨®n. "Se?or¨ªa, presidente, lo que sea...", a?adi¨® atropellada otra de las ponentes, "s¨®lo pedimos humildad respecto al pueblo y seriedad respecto a la pol¨ªtica".
Rojo, que opina que iniciativas como las jornadas abiertas del parlamento est¨¢n ya un poco pasadas, se empe?¨® en que la jornada tuviera el m¨¢ximo rigor parlamentario. Cada comisi¨®n estuvo presidida por un miembro de la Mesa del Senado y asesorada por un letrado de las Cortes para ordenar el debate y ayudara redactar los textos. Los tiempos de intervenci¨®n en el pleno se respetaron escrupulosamente. "Uno se ha pasado 14 segundos y otro 30, los dem¨¢s [varias decenas de intervinientes] lo han clavado", comentaba Rojo.
El rigor parlamentario incluy¨® la presencia de taqu¨ªgrafas en el Pleno. Del debate se editar¨¢ un diario de sesiones con la transcripci¨®n taquigr¨¢fica y las recomendaciones de los chavales se recoger¨¢n en un Bolet¨ªn Oficial de las Cortes que se enviar¨¢ al Gobierno, a las comunidades aut¨®nomas y a las comisiones parlamentarias.
Adem¨¢s, el Senado aprovech¨® ayer para poner en marcha algo que muy pocos han visto. En la sesi¨®n plenaria, los chavales de las comunidades con lengua propia la usaron para dirigirse al hemiciclo. A nadie se le hizo raro ponerse los cascos de traducci¨®n simult¨¢nea para o¨ªr, por ejemplo, a Unai Mart¨ªnez en euskera decir que "el Estado debe intervenir los mercados de operadores telef¨®nicos y controlar los precios", porque Internet es una herramienta de educaci¨®n. O a Joan Solana, en catal¨¢n, decir sin complejos desde la tribuna: "No tenemos nada que envidiar a los senadores que aqu¨ª se sientan".
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