La donaci¨®n de ¨®vulos sigue sin control

El retraso de la maternidad y los crecientes problemas de fertilidad por diversas causas han propiciado un aumento de las demandas de fecundaci¨®n asistida. La gestaci¨®n con ¨®vulos de donante se ha convertido en la t¨¦cnica m¨¢s eficaz y m¨¢s demandada por las mujeres mayores de 40 a?os. Sin embargo, un a?o despu¨¦s de aprobarse en Espa?a la nueva ley de reproducci¨®n asistida todav¨ªa no existe ning¨²n sistema nacional que garantice el control y las buenas pr¨¢cticas de estas t¨¦cnicas ni se ha creado el registro que ya estaba previsto en la ley de 1988. La ley establece un l¨ªmite de seis descendientes por cada donante, pero nadie controla que eso sea realmente as¨ª y un donante puede ir a diferentes centros. Los expertos reclaman la creaci¨®n del registro de centros y de donantes que exige la normativa espa?ola y que tambi¨¦n establece la Uni¨®n Europea.

La gestaci¨®n con ¨®vulos de donante es la t¨¦cnica m¨¢s usada por mujeres mayores de 40

Catalu?a es la ¨²nica comunidad que registra la actividad de los centros de reproducci¨®n

"Llevamos a?os intentando que el Ministerio de Sanidad cree estos registros. Los ¨²ltimos intentos de la comunidad cient¨ªfica para colaborar con el ministerio no han prosperado, y la respuesta a una iniciativa realizada con el apoyo de la Sociedad Espa?ola de Androlog¨ªa, la Asociaci¨®n para el Estudio de la Biolog¨ªa de la Reproducci¨®n y la Sociedad Europea de Fertilidad ha sido positiva pero insuficiente", afirma Buenaventura Coroleu, presidente de la Sociedad Espa?ola de Fertilidad (SEF).

En la misma l¨ªnea se pronuncia Montserrat Boada, coordinadora del Programa de Fecundaci¨®n in Vitro y Donaci¨®n del Servicio de Medicina de Reproducci¨®n Asistida del Instituto Dexeus de Barcelona: "No se han cumplido las sucesivas leyes espa?olas y ahora tampoco las directivas europeas que establecen un registro ¨²nico disponible para Espa?a y resto de los pa¨ªses comunitarios", afirma.

Lo ¨²ltimo que Sanidad ha comunicado a la SEF, seg¨²n Coroleu, es que se trabaja en un proyecto de real decreto que crear¨¢ el Sistema de Informaci¨®n Nacional de Reproducci¨®n Asistida que integrar¨¢ ambos registros. El Ministerio confirma que se est¨¢ trabajando en la norma, pero no precisa cu¨¢ndo estar¨¢ disponible.

La SEF habilit¨® en 1992 un registro nacional de t¨¦cnicas de reproducci¨®n, pero es voluntario. En 2004 han colaborado 84 centros, p¨²blicos y privados, que cubren aproximadamente el 70% de las intervenciones. Seg¨²n este registro, del que hasta ahora no se han hecho p¨²blicos los datos, ese a?o se realizaron 38.886 ciclos de fecundaci¨®n, de los cuales 4.801 fueron con ¨®vulos de donante (12,3% del total) y se transfirieron una media de 2,2 embriones por acto. En el 36,2% de los casos el tratamiento fue por esterilidad masculina, el 22,6% femenina, y el restante 20,8%, mixta. Catalu?a, por su parte, es la ¨²nica comunidad que tiene un registro de la actividad de los centros de fecundaci¨®n. La comparaci¨®n de los datos recogidos por estas dos iniciativas permite tener una primera informaci¨®n sobre la tasa de ¨¦xito de los tratamientos y el perfil de usuarias y donantes.

Se da la circunstancia de que entre las demandantes de tratamiento hay muchas extranjeras, y tambi¨¦n entre las donantes de ¨®vulos. "Las mujeres extranjeras vienen a Espa?a a seguir un tratamiento de fecundaci¨®n fundamentalmente por razones legales, econ¨®micas y de calidad asistencial. Las donantes extranjeras residen temporalmente en Espa?a y donan sus ¨®vulos aqu¨ª, muchas veces porque en sus pa¨ªses est¨¢ prohibido o no se protege la identidad, como sucede en Reino Unido", explica Marisa L¨®pez Teij¨®n, jefa de Reproducci¨®n Asistida del Instituto Marqu¨¦s de Barcelona.

La fecundaci¨®n con ¨®vulos de donante est¨¢ indicada en las mujeres que tienen alg¨²n fallo ov¨¢rico y ha fracasado la fertilizaci¨®n in vitro. La donante tiene que seguir un tratamiento farmacol¨®gico de estimulaci¨®n hormonal y someterse a una peque?a intervenci¨®n de media hora en la que se extraen los ¨®vulos. El tratamiento y los controles se alargan durante unas dos semanas, pero desde que empiezan las pruebas pueden transcurrir dos meses.

Por las molestias, desplazamientos o p¨¦rdidas de horas de trabajo, el Gobierno espa?ol estableci¨® una compensaci¨®n econ¨®mica para la donante, que determina cada comunidad y oscila entre los 600 y 1.000 euros. Al respecto, los facultativos tambi¨¦n instan al Gobierno a que determine una cantidad, de manera que no haya diferencias entre las autonom¨ªas.

"Existe un alto grado de altruismo en las donantes y, aunque probablemente estar¨ªan menos motivadas sin la compensaci¨®n, la donaci¨®n se hace porque hay voluntad altruista y solidaridad con las mujeres que necesitan los ¨®vulos", apunta Agust¨ªn Moreno, coordinador del Grupo de Inter¨¦s de Psicolog¨ªa de la SEF y psic¨®logo cl¨ªnico de la cl¨ªnica Tambre de Madrid

La nueva ley establece que se compruebe la salud emocional de la donante. Por eso mantienen una primera entrevista con el ginec¨®logo y luego son evaluadas por el psic¨®logo o psiquiatra. "Se rechaza alrededor del 1% de las donantes, principalmente por motivos de ¨ªndole personal, depresi¨®n, falta de peso o consumo de estupefacientes, m¨¢s que por alguna enfermedad que puedan transmitir", apunta Moreno.

Para Alejando Gonz¨¢lez, ginec¨®logo y presidente del comit¨¦ cient¨ªfico de la Asociaci¨®n Nacional de Cl¨ªnicas de Reproducci¨®n Asistida (Anacer), la ovodonaci¨®n no es una innovaci¨®n tecnol¨®gica, sino "una demanda social necesaria. Por ello hay que evitar cualquier mercantilismo y ofrecer garant¨ªas ¨¦ticas, legales y m¨¦dicas tanto a las donantes como a las receptoras".5