Uno de los autores del ataque de Glasgow es un m¨¦dico iraqu¨ª formado en Bagdad

Reino Unido sigue en estado de alerta cr¨ªtica por temor a un inminente atentado, pero la tensi¨®n empez¨® a relajarse ayer. En parte porque ese temido atentado no se ha producido, pero tambi¨¦n porque las nuevas detenciones -que elevan a ocho el n¨²mero de arrestados tras el ataque en el aeropuerto de Glasgow- hacen pensar que los servicios de seguridad tienen la situaci¨®n bajo control. Uno de los detenidos en Glasgow es un m¨¦dico iraqu¨ª formado en Bagdad. Hay otro m¨¦dico arrestado, un saud¨ª que emigr¨® a Jordania en 1991. Ambos trabajaban en hospitales brit¨¢nicos.

Seg¨²n la cadena de televisi¨®n Sky, un tercer detenido ser¨ªa tambi¨¦n m¨¦dico, lo que sin duda llama la atenci¨®n. Aunque son meras especulaciones, esa coincidencia podr¨ªa tener dos explicaciones completamente distintas. Una, que se tratara de un grupo de gente cercana que se ha radicalizado en tiempos relativamente recientes. Otra, que se tratara de elementos extremistas que han aprovechado la facilidad con la que el Reino Unido acepta la llegada de m¨¦dicos extranjeros porque el pa¨ªs no produce todos los que necesita el sistema sanitario.

Uno de los m¨¦dicos, identificado ayer por los medios brit¨¢nicos como Bilal Abdul¨¢, de 27 a?os, es algo m¨¢s que sospechoso: es el copiloto del Jeep Cherokee incendiado a las puertas de la terminal de pasajeros del aeropuerto de Glasgow el s¨¢bado. Abdul¨¢, cualificado como m¨¦dico en Bagdad en 2004, y registrado por primera vez como doctor en Reino Unido en 2006, sali¨® indemne. El conductor del coche sigue en estado cr¨ªtico en el hospital Royal Alexandra, en Paisley (sur de Glasgow), en el que Abdul¨¢ trabajaba como interino.

La polic¨ªa realiz¨® ayer dos explosiones controladas en un autom¨®vil estacionado en ese hospital. El domingo ya hab¨ªa provocado otra explosi¨®n en otro coche.

Un segundo m¨¦dico, detenido el s¨¢bado por la noche con su esposa en la autopista M6 cerca de Liverpool, ha sido identificado como Mohamed Asha, de 26 a?os, nacido en Arabia Saud¨ª pero formado en Jordania, adonde se fue a vivir en 1991. Asha, que lleg¨® a Reino Unido en 2004 para especializarse en neurolog¨ªa, trabajaba como m¨¦dico en el Royal Shrewsbury Hospital y en el Princesa Royal Hospital, en Telford.

La polic¨ªa, que mantiene bajo arresto a una quinta persona detenida el domingo en Liverpool, detuvo ayer a otros dos hombres, de 25 y 28 a?os, en las residencias donde se aloja parte del personal del hospital Royal Alexandra, aunque no confirm¨® si viv¨ªan all¨ª. Anoche, la polic¨ªa inform¨® de la detenci¨®n de otro hombre en un pa¨ªs extranjero. M¨¢s tarde, las autoridades australianas confirmaron que un hombre de 27 a?os fue detenido en el aeropuerto de Brisbane en relaci¨®n con el atentado. Se cree que ninguno de los detenidos es brit¨¢nico y que son de distintos pa¨ªses de Oriente Pr¨®ximo.

Tambi¨¦n ayer se supo que la polic¨ªa estaba tras los pasos de los autores del atentado de Glasgow. Diez minutos antes del ataque, la polic¨ªa intent¨® contactar con la agencia inmobiliaria que les hab¨ªa alquilado el piso en que viv¨ªan en Paisley. La polic¨ªa quer¨ªa saber por qu¨¦ la agencia hab¨ªa intentado contactar con un n¨²mero de tel¨¦fono. Seg¨²n algunos medios, se trata de uno de los tel¨¦fonos usados como detonadores en los coches bomba del viernes en el centro de Londres, que no llegaron a explotar. El director de la agencia, Daniel Gardiner, dijo que los inquilinos le parecieron profesionales respetables.

En una declaraci¨®n en los Comunes, la ministra del Interior, Jacqui Smith, dijo que los servicios de seguridad hab¨ªan registrado 19 lugares, pero no quiso entrar en detalles para no perjudicar las investigaciones. En l¨ªnea con las declaraciones de la v¨ªspera del primer ministro, Gordon Brown, Smith reiter¨® la voluntad del Gobierno de consensuar con la oposici¨®n la introducci¨®n de las medidas antiterroristas preparadas por su antecesor, John Reid, y en especial la extensi¨®n del actual periodo de 28 d¨ªas de detenci¨®n preventiva sin cargos.

El nuevo Gobierno, que ha tenido un estreno muy dif¨ªcil -con graves inundaciones en el centro de Inglaterra y tres intentos de atentado- parece haber adoptado una l¨ªnea de bajo perfil en sus declaraciones p¨²blicas, huyendo de las aparatosas reacciones del Ejecutivo de Tony Blair.