Medio Ambiente ignora el paradero de los escombros del auditorio vigu¨¦s

La Conseller¨ªa de Medio Ambiente no ha controlado la gesti¨®n ni el destino de las decenas de toneladas de escombros generadas por las obras de demolici¨®n del edificio de Casa Mar, en cuyo solar se construir¨¢ el auditorio de Vigo. Aunque al principio de las operaciones inspeccion¨® y sancion¨® a una empresa que deposit¨® en Salvaterra de Mi?o una peque?a cantidad, Medio Ambiente se inhibi¨® de hacer cualquier seguimiento posterior. Ninguna de las empresas implicadas ofrece tampoco una explicaci¨®n coherente sobre el destino de esos residuos.

Las empresas que produzcan m¨¢s de tres toneladas de residuos de construcci¨®n y demolici¨®n, conocidos como RCD, tiene la obligaci¨®n de presentar ante la Conseller¨ªa de Medio Ambiente un plan de gesti¨®n de obra que ha de recoger, entre otros, los datos relativos al volumen y calidad de los materiales que se van a mover, los criterios que se emplear¨¢n para su segregaci¨®n, el detalle de las operaciones de gesti¨®n, las empresas encargadas de esas operaciones y una certificaci¨®n del destino donde finalmente sean depositados los RCD.

Adem¨¢s, si se trata de obras p¨²blicas, como es el caso del palacio de congresos-auditorio de Vigo, los promotores est¨¢n obligados a hacerse cargo directamente de la gesti¨®n de los RCD o a entregarlos a un gestor autorizado para su valoraci¨®n o eliminaci¨®n, y a sufragar los correspondientes costes de las operaciones.

En el caso de los escombros de Casa Mar, en Medio Ambiente s¨®lo tienen constancia de las 3.280 toneladas depositadas en Salvaterra de Mi?o en una semana, entre el 5 y el 12 de septiembre del a?o pasado. Al d¨ªa siguiente, una inspecci¨®n de Medio Ambiente paraliz¨® la recepci¨®n de los RCD de Vigo en ese lugar, tramit¨® una sanci¨®n que acabar¨ªa alcanzado 30.000 euros de multa a la empresa responsable y otros 15.000 a la UTE que promueve las obras del auditorio (Sacyr, Caixanova y Puentes y Calzadas) y ah¨ª se acab¨® el control oficial de los RCD de Casa Mar, cuyo volumen podr¨ªa superar las 50.000 toneladas.

Medio Ambiente, pese a la normativa de su autor¨ªa se?alada m¨¢s arriba, no ha podido indicar a este peri¨®dico los vol¨²menes ni calidad de los RCD generados por la obra ni su destino. Se apresta, eso s¨ª, a realizar "inspecciones y comprobaciones" en el lugar de San Lourenzo, Goi¨¢n-Tomi?o, donde presuntamente estar¨ªan depositadas m¨¢s de 20.000 toneladas de RCD de Casa Mar, aunque la cantidad es discutible.

"El vertedero que se?alan ustedes ten¨ªa una capacidad de 8.000 metros c¨²bicos y nosotros lo encontramos ya medio ocupado", afirm¨® ayer un portavoz de Trexre Mi?o S.L, la empresa que efectu¨® el dep¨®sito, en San Lourenzo y en otro vertedero pr¨®ximo al aeropuerto vigu¨¦s de Peinador. Trexre Mi?o estuvo dos semanas trabajando en el transporte de RCD de Casa Mar, contratada, seg¨²n su portavoz, por Demoliciones Usabiaga. El contrato se rompi¨® a ra¨ªz de la inspecci¨®n realizada por Medio Ambiente en Salvaterra de Mi?o.

Tampoco en Demoliciones Usabiaga facilitan los datos de volumen y destino de los escombros, que dicen ignorar "porque la obra se contrat¨® con Sacyr a precio alzado". La demolici¨®n de Casa Mar, seg¨²n la misma fuente, ha sido "una obra emblem¨¢tica", que ha podido ejecutarse con una plantilla de tres a cinco personas y sin el menor percance, pese al gran movimiento de materiales, por el empleo de maquinaria de ¨²ltima tecnolog¨ªa y de gran capacidad. "Hemos realizado en tres meses lo que estaba previsto realizar en nueve", aseguran.

Precisamente esta eficacia ser¨ªa ahora una de las causas de insidia de las empresas locales, que pensaban emplear a 40 personas para demoler Casa Mar a mano. Esta circunstancia se superpondr¨ªa al problema de base, que seg¨²n la citada fuente, est¨¢ en que "la Administraci¨®n no tiene ni idea de d¨®nde dejar los RCD".

En Usabiaga aseguran que no hay otras empresas relacionadas con ella para el transporte y dep¨®sito de los RCD, ya que los contratos para esa tarea los han promovido directamente las empresas que gestionan los vertederos de Valga y A Estrada. No es probable, y el caso de Trexre lo desmiente. Sacyr tambi¨¦n dio ayer la callada por respuesta. De manera que decenas de miles de toneladas de escombros parecen haberse volatilizado.