Un nuevo atentado en Pakist¨¢n agrava la crisis del r¨¦gimen de Musharraf

Un terrorista suicida caus¨® 13 muertos y casi 40 heridos anoche en Islamabad al hacerse estallar entre los asistentes a un mitin de apoyo al juez Iftikhar Mohamed Chaudhry, el presidente del Tribunal Supremo paquistan¨ª al que el Gobierno suspendi¨® el pasado marzo. El atentado, en pleno centro de la capital de Pakist¨¢n junto a un puesto de la oposici¨®n laica, subraya la grave crisis de legitimidad que afronta el presidente, Pervez Musharraf, cuya continuaci¨®n al frente del Ejecutivo est¨¢ siendo contestada por todas las fuerzas de oposici¨®n.

Cerca de 2.000 personas se hab¨ªan congregado en un aparcamiento pr¨®ximo a los tribunales para escuchar a Chaudhry, convocados por el Colegio de Abogados. Globos de colores y un ambiente festivo esperaban la llegada del juez cuando dos explosiones que pudieron o¨ªrse en todo el centro sembraron el caos. Las im¨¢genes de televisi¨®n mostraban personas cubiertas de sangre que sal¨ªan como fantasmas de entre el humo. En otra toma se ve¨ªan los zapatos perdidos por quienes trataban de huir.

Al menos 13 personas resultaron muertas y cerca de 40 heridas, entre ellas varios polic¨ªas, seg¨²n inform¨® el jefe policial de Islamabad, Iftikhar Ahmed. Cinco heridos se encontraban en estado cr¨ªtico. "Hemos puesto en alerta a todos los hospitales de Islamabad", declar¨® el jefe de la Administraci¨®n de la capital, Khalid Pervez.

"Definitivamente, se ha tratado de un atentado suicida, porque si hubiera sido una bomba, habr¨ªa abierto un cr¨¢ter y no es el caso", admiti¨® Pervez. Poco antes, varios testigos aseguraron a la cadena Geo que el suicida lleg¨® en una moto y se hizo estallar.

Al parecer, la explosi¨®n se produjo junto a un tenderete instalado por el Partido Popular de Pakist¨¢n (PPP) a la entrada al recinto y a apenas 50 metros del estrado desde el que iba a hablar Chaudhry. Esta circunstancia hizo que la polic¨ªa interpretara el ataque como una respuesta de los islamistas al apoyo que el partido de Benazir Bhutto dio la semana pasada al asalto de la Mezquita Roja, donde se hab¨ªan atrincherado decenas de radicales isl¨¢micos.

Sin embargo, en las filas de la oposici¨®n se apuntaba a los servicios secretos. "Tratan de amedrentar a los miembros del Supremo", declar¨® un abogado a una televisi¨®n local. Los magistrados tienen que dar su veredicto sobre la destituci¨®n de Chaudhry antes del viernes y podr¨ªan decidir su reintegraci¨®n al servicio, lo cual constituir¨ªa un duro golpe para Musharraf.

Este atentado es el ¨²ltimo de una cadena que desde el asalto de la Mezquita Roja ha dejado cerca de un centenar de muertos. Pero todos los anteriores se han producido en la regi¨®n noroccidental del pa¨ªs, en las zonas tribales fronterizas con Afganist¨¢n donde el control del Gobierno es relativo. Adem¨¢s, hasta ahora ten¨ªan como objetivo las fuerzas de seguridad. Ayer mismo, otro suicida acab¨® con la vida de tres soldados y un civil en Wazirist¨¢n del Norte.