Gallard¨®n y N¨²?ez Feij¨®o piden recuperar a Piqu¨¦ mientras otros moderados le alaban

A pesar de su espantada y el da?o que puede hacer al partido a ocho meses de las elecciones, Josep Piqu¨¦ recibi¨® ayer pocas reprimendas y muchas alabanzas, incluidas las de su l¨ªder, Mariano Rajoy, quien, visiblemente tocado, aplaudi¨® su labor y dijo: "La pol¨ªtica a veces es muy dura". Alberto Ruiz-Gallard¨®n y Alberto N¨²?ez Feij¨®o, dos l¨ªderes moderados, reclamaron que el PP recupere al ex ministro. N¨²?ez Feij¨®o se?al¨®: "Era un buen jugador en el puesto equivocado". Otros dirigentes moderados tambi¨¦n le alabaron, mientras ?ngel Acebes y Eduardo Zaplana guardaban silencio.

Tanto Mariano Rajoy como los dem¨¢s dirigentes del partido ten¨ªan ayer una papeleta muy dura encima de la mesa. Piqu¨¦ no s¨®lo hab¨ªa dimitido, sino que lo hab¨ªa hecho con una carta en la que denunciaba las "mezquindades y miserias" del PP, y apuntaba indirectamente al secretario general, ?ngel Acebes. El entorno del catal¨¢n le culpa de la filtraci¨®n a la prensa que parece haber desatado la crisis. Acebes se quit¨® ayer de en medio y anul¨® un viaje a M¨¦rida.

Hablaron sobre todo los moderados. Nadie en p¨²blico reconoce la existencia de estas dos almas -la moderada y la radical- en el PP, pero algunas palabras las hicieron m¨¢s evidentes que nunca. Alberto Ruiz-Gallard¨®n, alcalde de Madrid, reclam¨® a su partido que recupere al ex ministro. "Mi deseo es que, en el puesto que sea, Piqu¨¦ siga siendo uno de los grandes activos. Un partido como el nuestro no deber¨ªa prescindir nunca de una persona que ha realizado una labor tan extraordinaria".

Rajoy tambi¨¦n alab¨® la trayectoria del catal¨¢n como ministro -ambos salieron juntos del Gobierno, record¨®- pero no fue tan entusiasta con su gesti¨®n en Catalu?a: "Ha hecho lo que ha podido; ahora iniciamos una nueva etapa", dijo para ofrecer una sensaci¨®n de normalidad. Sin embargo, estaba visiblemente tocado. Su rostro denotaba la decepci¨®n que le ha producido el abandono de uno de sus m¨¢s fieles colaboradores, a quien quer¨ªa recuperar para la pol¨ªtica nacional. "He mantenido una buena relaci¨®n con ¨¦l, la sigo teniendo. Respeto su decisi¨®n. La pol¨ªtica no es f¨¢cil y muchas veces es muy dura", sentenci¨®.

El gallego Alberto N¨²?ez Feij¨®o, otro de los dirigentes moderados m¨¢s conocidos, en conversaci¨®n telef¨®nica con EL PA?S pidi¨® al PP que recupere al l¨ªder catal¨¢n, aunque reconoci¨® que no ha tenido buenos resultados en su comunidad. "All¨ª no despeg¨¢bamos, es evidente. Pero es un excelente pol¨ªtico y debe tener un sitio en el partido. Yo creo que es un buen jugador en un sitio equivocado. ?D¨®nde colocarlo? Eso le corresponde al entrenador: Rajoy".

A Feij¨®o no le preocupa la interpretaci¨®n de que con la salida de Piqu¨¦ y, antes, de Jaume Matas, pierden los moderados en el PP. As¨ª lo expres¨® el socialista Jos¨¦ Blanco: "Rajoy ha vuelto a demostrar que en el PP no caben ni los pol¨ªticos ni las pol¨ªticas de centro. Cada d¨ªa se parece m¨¢s a AP".

10 millones de extremistas

"El PSOE lleva mucho tiempo diciendo eso, mucho antes de lo de Piqu¨¦", respondi¨® Feij¨®o. "No es cre¨ªble. Es imposible que en Espa?a haya casi 10 millones de extremistas, que son los votantes del PP. Matas y Piqu¨¦ son muy buenos, son activos del partido, pero el PP est¨¢ fuerte, s¨®lido, enraizado. Ha aguantado muy bien estos a?os dif¨ªciles, y los resultados de las municipales lo avalan. Vamos a seguir".

Las palabras de Rajoy, si bien lac¨®nicas, explican con m¨¢s detalle el desenlace de una crisis que ha dejado a todos sorprendidos. Varios dirigentes culpan en privado tanto a Acebes, por falta de tacto a la hora de vender unos cambios que no ten¨ªan por qu¨¦ implicar ning¨²n terremoto, como a Piqu¨¦, por saltar demasiado pronto. El catal¨¢n quiso forzar a Rajoy a elegir entre los dos. No lo logr¨®. Ayer el l¨ªder tambi¨¦n ten¨ªa que optar entre criticar siquiera veladamente la gesti¨®n de la crisis, algo que ir¨ªa contra Acebes, o desautorizar a Piqu¨¦ por hablar de "mezquindades y miserias". De nuevo, no hizo ninguna de las dos cosas.

El sector m¨¢s cr¨ªtico con Piqu¨¦ est¨¢ convencido de que la manera que ha elegido para irse, con una carta demoledora y casi en vacaciones, har¨¢ que su figura se olvide pronto. La r¨¢pida soluci¨®n del vac¨ªo de poder en Catalu?a ayudar¨ªa a esta versi¨®n. Sin embargo, otros dirigentes moderados mostraron su desolaci¨®n por la desaparici¨®n de una gran figura. El valenciano Vicente Rambla, hombre del presidente Francisco Camps, destac¨® su "enorme trayectoria profesional y pol¨ªtica". Antonio Sanz, mano derecha del andaluz Javier Arenas, el principal aliado del catal¨¢n, le alab¨®: "Es un personaje pol¨ªtico que ha sabido comprender muy bien cu¨¢les eran los objetivos con el Estatuto". Por contra, un dirigente cercano a la madrile?a Esperanza Aguirre como Francisco Granados se?alaba: "Puede haber otras personas que aporten m¨¢s al proyecto del partido".