Un pirata coreano en el canal 40
Coral la vidente. Zap. Una se?orita frot¨¢ndose un tel¨¦fono en el trasero. Zap. Otra, vestida, ofreciendo una tostadora si adivinas de qu¨¦ color es el caballo blanco de Santiago. Zap. Un videoclip de 1991. Zap. Un "xco d 30 k bsca xclavas en Mstoles". Zap. M¨¢s all¨¢ del bot¨®n 6 del mando, la tele madrile?a es una selva de interferencias; un batiburrillo de charlatanes, porno y modestos programas locales. Zap. Un chino hablando sobre los boinas verdes.
En la pantalla Hoon Cho, coreano de 52 a?os, explica que el Ej¨¦rcito estadounidense usa acupuntura para curar esguinces. Para ello invierte 25 minutos. Incluye explicaciones como: "los boinas verdes se llaman as¨ª porque llevan un sombrerito redondo que es verde" o "en paraca¨ªdas aterrizas de cualquier manera y el capit¨¢n malo te sacrifica si te tuerces un tobillo, oy, oy, oy, ?qu¨¦ bruto!". Pone voces, hace met¨¢foras hilarantes, se parte de risa. Se va por las ramas hasta el paroxismo, pero hay algo hipn¨®tico en sus divagaciones improvisadas. "Todo autom¨¢tico, no preparo nada, me grabo s¨®lo; es una nueva forma de hacer televisi¨®n", dice Cho, que define su estilo como "monodi¨¢logo". Le pueden ver, con algo de nieve, en el canal 40 del UHF, si viven cerca del piso de la Gran V¨ªa desde donde emite.
Duson TV lleva 12 a?os en antena y pertenece a Golden Clover, una fundaci¨®n sin ¨¢nimo de lucro de medicina natural. Cho recibe en el pisazo de Gran V¨ªa mientras ve Los Lunnis y fuma. Repeinado con gomina, camisa y chaleco, anillos, reloj de oro y chancletas. El piso est¨¢ manga por hombro. Pilas de papeles, muebles destartalados donados por los vecinos, cables por todos lados. Hay un pasillo lleno de cintas de v¨ªdeo, una sala de edici¨®n con siete ordenadores, otra con la emisora. Le han colocado un ventilador de los setenta para que no se caliente. Repartidas por la casa, 27 c¨¢maras mini DV duermen enfundadas sobre tr¨ªpodes porque hace dos a?os que aqu¨ª no se graba nada en directo.
Cho tiene un problema: en el canal 40 tambi¨¦n emite La Otra de Telemadrid. Cho lleva m¨¢s de dos a?os litigando. Seg¨²n ¨¦l, en 2005, la Comunidad le cort¨® los cables de la antena que ten¨ªa en un edificio de O'Donnell para invadir su frecuencia. Alega que le discriminaron por ser "un chinito que habla mal espa?ol". A la semana volvi¨® a emitir desde Gran V¨ªa, "?Sorpresa!, soy un chino con recursos", dice.
El Tribunal Superior de Justicia de Madrid fall¨® a su favor en 2006 anulando el cierre porque no hab¨ªa "motivaci¨®n expl¨ªcita" para coartar su libertad de expresi¨®n. El texto subraya que Duson TV llevaba a?os emitiendo a sabiendas de las autoridades. ?stas no piensan lo mismo: "En lo ¨²nico que Cho se llev¨® el gato al agua fue en un mero formalismo", dice Salvador Victoria, secretario general del Consejo de Gobierno de la Comunidad. Esgrime que la sentencia tambi¨¦n dice que Duson TV nunca tuvo licencia ("?Y qui¨¦n la tiene?", dice Cho) y que no existi¨® "el espurio prop¨®sito" de cerrarla para colocar La Otra. Tambi¨¦n que de discriminaci¨®n por coreano, nada. Ambas cadenas siguen emitiendo a codazos, vi¨¦ndose indistintamente (mal). El f¨¢rrago legal s¨®lo deja claro que en esto de las teles locales anal¨®gicas (en Madrid, unas 40) lo que prima es la nieve. Victoria describe su tarea como "un l¨ªo considerable": "Si por m¨ª fuera todas las piratas podr¨ªan expresarse, pero desgraciadamente las frecuencias son limitadas".
Cho es un pirata renqueante en un mar cat¨®dico que se complica con el apag¨®n digital previsto para 2012. Victoria lo llama "el encendido", y prev¨¦ que la tele normal colear¨¢ durante a?os, "como el VHS". El acupunturista tambi¨¦n est¨¢ en los tribunales contra el concurso digital; dice que no tuvo en cuenta la antig¨¹edad de las emisoras. Cho est¨¢ "cabreado". Le gustar¨ªa "hacer tele menos cutre", poner conciertos de Alejandro Sanz, emitir desde el barco que tiene en Ibiza... Pero tiene toda la pinta de que va a perder la batalla. "Hay un dicho en Corea", explica: "Si cura un solo paciente, un m¨¦dico ya ha cumplido. Si llego a un solo espectador, me contento".
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