Duelo de mujeres por la Casa Blanca

?C¨®mo se mide cu¨¢nto se es mujer? De hecho: ?se puede medir? Y si se puede, ?qu¨¦ lo mide? ?Llevar pantalones (en casa)? ?Enfrentar los problemas y las situaciones "c¨®mo lo har¨ªa un hombre" -por cierto, ?c¨®mo lo har¨ªa un hombre?- ?Puede un var¨®n ser "m¨¢s mujer" o tener "m¨¢s sensibilidad" para los temas femeninos que una dama? Para la se?ora de John Edwards -uno de los candidatos dem¨®cratas a la Casa Blanca para 2008- existen en el mundo dos ejemplos de todo lo anterior.

"John", su "John", su compa?ero, esposo y padre de sus hijos es sin duda alguna mucho m¨¢s receptivo a las necesidades femeninas de lo que lo es la primera mujer con aspiraciones reales a la presidencia de EE UU: Hillary Clinton. "No es tan defensora de los derechos de los mujeres como a m¨ª me gustar¨ªa. John (Edwards) lo es", ha dicho.

"Hillary quiere ser comandante en jefe", ha dicho Elizabeth Edwards

"No creo que est¨¦ jugando a ser un hombre", ha dicho Bill Clinton de Hillary

Una guerra entre mujeres se desataba a mediados de semana. Elizabeth Edwards contra Hillary Clinton. Una esposa con aspiraciones de primera dama -que tiene a la opini¨®n p¨²blica de su lado debido a su infatigable lucha contra un c¨¢ncer incurable que no la ha apartado de la campa?a- contra una esposa que puede convertir por primera vez en la historia a un hombre en consorte (el nombre que se le dar¨ªa a Bill Clinton var¨ªa dependiendo del grado de humor que se le aplique, pero el calificativo Primer Caballero parece ser el oficial). Mujer contra mujer. Elizabeth Edwards declaraba en una entrevista en la revista electr¨®nica Salon que no estaba "convencida de que (Hillary) sea una defensora de las mujeres. Necesita un fundamento para su campa?a m¨¢s fuerte del que tiene ahora mismo".

De la entrevista parec¨ªa desprenderse que la se?ora Edwards calificaba el comportamiento de la senadora dem¨®crata por Nueva York como el "de un hombre". "Quiere ser comandante en jefe", admit¨ªa y comprend¨ªa Elizabeth Edwards... "No estoy convencida de que sea una buena defensora de los derechos de las mujeres. Cuando anunci¨® su candidatura dijo: 'Estoy aqu¨ª para ganar'. ?Qu¨¦ significa eso? No es racional. John es muy claro sobre lo que puede ofrecer y por qu¨¦ lo ofrece".

El mujer contra mujer se convirti¨® en "esposo contra esposa". Si la esposa del candidato dem¨®crata -situado en tercer lugar en las encuestas en intenci¨®n de voto (tras Clinton y Barack Obama)- hac¨ªa campa?a a favor de John, el marido cuyos pecados y mentiras conoce el mundo entero sal¨ªa en defensa de su dama.

Bill glosaba en Good Morning Am¨¦rica el feminismo de su mujer. "Repasando lo que se ha dicho sobre los derechos de las mujeres, desaf¨ªo a cualquiera a que encuentre a alg¨²n candidato en la historia reciente que tenga una trayectoria tan dilatada en su trabajo por las mujeres, las familias y los ni?os como Hillary", dijo Clinton. Y dej¨® claro: "No creo que

est¨¦ jugando a ser un hombre. No creo que sea contradictorio ser una mujer y tener experiencia en temas militares y de seguridad. Ella ser¨¢ fuerte cuando la ocasi¨®n lo requiera. No se trata de ser masculina. Es ser l¨ªder".

Esta es la opini¨®n de un hoy amante esposo que un d¨ªa no lo fue tanto y cuya consecuencia fue la promesa de lavar la afrenta con su entregado apoyo para ayudar a su mujer a ganar la Casa Blanca. Bill apoya a Hillary. Pero si alguien esperaba que las mujeres est¨¦n al 100% de acuerdo con el ex presidente habr¨¢ que sacarle de su error. S¨ª, Hillary Clinton tiene mejor imagen entre las mujeres que entre los hombres. Pero s¨®lo un 45% de ellas tiene una opini¨®n positiva de la senadora. Y muchas votantes confiesan tener sus reservas hacia la candidata, seg¨²n la ¨²ltima encuesta de The New York Times y la CBS publicada el viernes. Este dato es importante si se tiene en cuenta que en las ¨²ltimas elecciones presidenciales el 54% de votantes eran mujeres.

Esta ¨²ltima encuesta expone algo en lo que tendr¨¢ que trabajar Clinton si quiere convertirse en el 44? presidente de EE UU: un 38% de los votantes confiesa no querer saber nada de ella, una cifra alarmantemente alta. ?Las razones que dan los encuestados? No es honesta, no es sincera, est¨¢ demasiado metida en pol¨ªtica.

Dicho todo lo anterior, el 80% de los encuestados de ambos sexos cree que al final Clinton ser¨¢ la ganadora del proceso de primarias dem¨®cratas y un 63% asegura que ganar¨¢ las elecciones y ser¨¢ la primera mujer presidente de los Estados Unidos. Sin la ayuda de Bill ni las cr¨ªticas de Elizabeth.