National Geographic muestra el busto de Nefertiti por dentro y desvela su historia

Un halo de misterio sigue rodeando la escultura policromada de la reina Nefertiti que se conserva en Berl¨ªn, un retrato que con su enigm¨¢tica sonrisa -?de sabidur¨ªa, de sensualidad o de desd¨¦n?- ha sido considerado la Mona Lisa de Amarna, la representaci¨®n emblem¨¢tica de las maravillas y misterios de una de las ¨¦pocas m¨¢s asombrosas de Egipto.

Un halo de misterio sigue rodeando la escultura policromada de la reina Nefertiti que se conserva en Berl¨ªn, un retrato que con su enigm¨¢tica sonrisa -?de sabidur¨ªa, de sensualidad o de desd¨¦n?- ha sido considerado la Mona Lisa de Amarna, la representaci¨®n emblem¨¢tica de las maravillas y misterios de una de las ¨¦pocas m¨¢s asombrosas de Egipto. El busto de Nefertiti, obra maestra de la retrat¨ªstica fara¨®nica, guarda todav¨ªa hoy, despu¨¦s de casi 3.500 a?os, gran parte de sus secretos. Algunos, no obstante, han sido desvelados en una nueva inspecci¨®n de la pieza practicada en Alemania con toda la panoplia de las nuevas tecnolog¨ªas cient¨ªficas, tomografia computadorizada incluida. Un excelente y emocionante documental, La odisea de Nefertiti, que hoy estrena National Geographic Channel (21.00, dial 61 de Digital + y operadores de cable), muestra esos an¨¢lisis y sus resultados, sigue la historia del descubrimiento del busto y su cuestionado traslado a Berl¨ªn y revive la historia de una reina fascinante.

En paralelo al examen cient¨ªfico de la escultura, el documental nos traslada a El Amarna, las ruinas de la antigua capital del fara¨®n hereje Akenat¨®n, el esposo de Nefertiti. En el lugar, el brit¨¢nico Barry Kemp, uno de los egipt¨®logos m¨¢s prestigiosos del mundo y que excava desde hace 30 a?os en el yacimiento, explica in situ -lo que resulta muy emotivo- los entresijos del hallazgo en 1912 del taller del escultor Tutmose, donde apareci¨® el busto de la reina. El descubrimiento lo realiz¨® una misi¨®n alemana de la Deutsche Orient-Gesellchaft dirigida por Ludwig Borchardt, que maniobr¨® de manera turbia para que el busto saliera de Egipto y fuera a parar a Alemania. El documental aborda la pol¨¦mica, reactivada recientemente, recabando opiniones favorables y cr¨ªticas hacia la estancia del busto en Berl¨ªn.

El reportaje, que utiliza la habitual t¨¦cnica de la recreaci¨®n hist¨®rica ficcional con actores, hace aparecer al propio Borchardt excavando y, en otras secuencias, a la mism¨ªsima Nefertiti (delgada y bella, bien interpretada con sus trajes de lino blanco, aunque las vestimentas de la reina en las im¨¢genes antiguas parecen haber sido mucho m¨¢s osadas, incluso desvergonzadas, desde el punto de vista moderno). Entre las novedades del reportaje est¨¢ el trabajo de Kemp para encajar uno de los bustos inacabados de Nefertiti en el cuerpo de una estatua del mismo granito jaspeado hallada por su predecesor Borchardt, lo que probar¨ªa que muchas de esas cabezas del taller amarniano estaban destinadas a completarse as¨ª. En el programa aparecen asimismo dos estudiosos alemanes que han investigado los archivos de Borchardt -un personaje poco querido, controvertido y escasamente acla-rado- y descubierto cartas suyas (incluidas de amor) que aportan nueva luz sobre ¨¦l. El documental exhibe tambi¨¦n fotos antiguas -entre ellas, algunas im¨¢genes contempor¨¢neas del descubrimiento del busto- e investiga pormenorizadamente la enigm¨¢tica historia de la c¨¦lebre escultura, muy apreciada por Hitler, durante la II Guerra Mundial.

La gran baza del programa es, por supuesto, el an¨¢lisis tecnol¨®gico de Die Bunte K?nigin, la "reina pintada", como la denomin¨® Borchardt, "el chequeo a la mujer m¨¢s anciana de Berl¨ªn" que ha demostrado que se trata de una pieza original -y no una copia como se hab¨ªa sugerido- y que su estado de salud es bueno. La tomograf¨ªa computadorizada muestra que el busto tiene una capa de escayola moldeada sobre una base, un n¨²cleo de piedra, que es en realidad otra escultura, de caliza, de la reina y que la representa de manera muy distinta. Nadie sabe por qu¨¦ el escultor trabaj¨® as¨ª. Pero es hermoso que ni bajo el escalpelo de la ciencia la m¨¢s bella de las reinas rinda la esencia ¨²ltima de su misterio.