"Vamos a decir chorradas como pianos"

Este hombre es el responsable de una de las letras m¨¢s infecciosas de los ¨²ltimos a?os. "No permit¨¢is que la palabra hijo de puta desaparezca de nuestras vidas, de nuestras calles, de nuestras escuelas". As¨ª empieza el clip Hijo de puta, hay que decirlo m¨¢s, que ha sido descargado casi un mill¨®n de veces en YouTube y quiz¨¢ sea el sketch m¨¢s conocido de Joaqu¨ªn Reyes (Albacete, 1974), uno de los cerebros del programa televisivo La hora chanante, que ha convertido sus imitaciones en un ¨¦xito de audiencia en la Paramount Comedy y en Localia. Reyes descansa unos d¨ªas antes de empezar a trabajar en el asalto a la televisi¨®n p¨²blica. Junto a su equipo, comenzar¨¢ en septiembre en La 2 un nuevo programa semanal que ser¨¢ "el mismo cuerpo con distinto traje".

Pregunta. En la escuela usted deb¨ªa de ser tremendo.

Respuesta. Era el imitador de la clase, el graciosete. Eso s¨ª, nunca pens¨¦ que acabar¨ªa en la tele.

P. Ha conseguido lo que desea cualquiera: trabajar divirti¨¦ndose.

R. S¨ª, mi trabajo es ir a disfrazarme. Estoy todo el d¨ªa vestido de payaso y cuando vuelvo a casa mi mujer me pregunta qu¨¦ tal ha ido, y le digo uf, dur¨ªsimo.

P. ?Se lleva el trabajo a casa?

R. La gente cree que los c¨®micos somos gente exc¨¦ntrica. Mi vida es normal. Pero, mira, voy a empezar a cultivar historias, para crear una imagen de m¨ª. Dir¨¦ que monto a caballo y cazo con arco peque?os gamos. No, en realidad soy como todo el mundo. Veo House y eso.

P. ?C¨®mo surgi¨® Hijo de puta?

R. El casero del piso de estudiantes que ten¨ªa Ernesto Sevilla [compa?ero de La hora...] en Albacete entr¨® un d¨ªa a arreglar una persiana y dijo: "?C¨®mo ten¨¦is el piso, hijos de puta!". La letra la escrib¨ª en 20 minutos, pero parece que deb¨ªa de estar inspirado.

P. Mr. T, Michael Jackson, Niki Lauda... ?El imaginario de los ochenta es una mina?

R. Es nuestra d¨¦cada, cuando pasamos de ni?os a adolescentes. En la m¨²sica y la tele hab¨ªa personajes muy divertidos. Mis pol¨ªticos favoritos eran Thatcher, Reagan, Gorbachov. Y Tachenko, que era como un dibujo animado. Esos deportistas con bigote eran hombres. Ahora son como rockeros y parecen cr¨ªos.

P. ?Les han comparado con los Monty Python?

R. Ellos eran muy grandes. Hemos empezado con su libertad, y hay referencias como lo de pasar de un sketch a otro sin avisar, las animaciones y el humor absurdo.

P. La gente se sabe de memoria sus gags. ?C¨®mo explica su ¨¦xito?

R. Hab¨ªa un p¨²blico joven, de treinta?eros, que buscaban un humor diferente y hemos cubierto ese hueco. Es gente que comparte nuestros referentes. Hemos conseguido una cosa diferente porque nos han dejado hacerlo sin presiones de audiencia.

P. ?C¨®mo se llamar¨¢ el nuevo programa?

R. No tiene t¨ªtulo. Y es complicado porque hay que buscar uno tan chorra como el original. Los fans ya est¨¢n dando miedo, porque dicen que si no se llama igual no va a funcionar. Pero yo creo que s¨ª, porque vamos a decir chorradas como pianos, como siempre.

P.?Puede avanzar alguna novedad?

R. Tendr¨¢ la misma filosof¨ªa y seremos el mismo equipo. Habr¨¢ personajes nuevos. Algunos de los antiguos seguir¨¢n, como El Ga?¨¢n, que es un paleto universal, pero otros como Marlo o Vicent¨ªn no tiene sentido conservarlos.