Cuerpos serranos
En el ecuador del verano las rebajas se extienden a los cuerpos propiamente dichos y ya nos anuncian tantos descuentos en liposucciones, estiramientos y siliconas como en viajes o moda ba?o. Porque se supone que a estas alturas ya deber¨ªamos haber hecho todos los sacrificios posibles por nuestro palmito, que hubiera debido quedar impoluto antes de ser arrastrado a un resort de la Riviera Maya, todo incluido.
Antes hay que pensar en la chapa y pintura, antes. Estas v¨ªsperas del veraneo las he pasado entre alaridos procedentes del gabinete de belleza colindante con el de mi fisio, que trataba de tranquilizarme. Eran voces juveniles, pero inequ¨ªvocamente masculinas: chavalines que acuden a la depilaci¨®n de la mano de las novietas, o de las propias madres, porque aquello del hombre y el oso se acab¨®. Y una no sabe si echarse a llorar o alegrarse de que ellos, tambi¨¦n, sepan lo que es sufrir por moda. O por amor.
Pero en estas tesituras relacionadas con el destape canicular caben perfectamente muy diversas combinaciones. Una de ellas tiene que ver con el "milagro" del Photoshop: pongamos por caso que usted no ha tenido tiempo, o no le ha alcanzado el presupuesto para ambos lujos al alim¨®n, o no le ha dado la gana pasar por el quir¨®fano, as¨ª que a la vuelta de Canc¨²n o Alcal¨¢ de Xivert se horroriza ante las pruebas del delito, ya sean impresas o digitales. Pues nada, tranqui, una pasadita por el ordenador...y milagro para la posteridad. A este respecto es impagable la an¨¦cdota, real como la vida misma, referida a una modelo brasile?a que ha aparecido a toda plana en el afamado Playboy... ?sin ombligo! Sin duda que se ha pasado el editor fotogr¨¢fico, y s¨®lo se dieron cuenta de la p¨¦rdida de tan com¨²n cicatriz cuando ya hab¨ªan distribuido m¨¢s de 600.000 ejemplares.
Este asunto de los cuerpos y su exhibici¨®n es que es inacabable. En Estados Unidos acaban de censurar un libro escolar donde al explicar los museos aparecen ilustraciones con desnudos. Sin embargo, acabo de ver un v¨ªdeo que promociona al candidato dem¨®crata Barack Obama mostr¨¢ndole en ba?ador cual apetitoso Trit¨®n, y a muchas chicas con su nombre en las bragas. O sea, que no s¨®lo somos las mujeres las juzgadas por nuestra carcasa. Por cierto que la pel¨ªcula a favor de la rival trata de una maestra que canta a diminutos escolares su amor l¨¦sbico por Hillary. Obama y Rudy Giuliani son a su vez defendidos por dos grupos de se?oras de las llamadas "imponentes" que se enzarzan en una incruenta pero muy sugerente guerra de almohadones.
Volviendo a la censura, Polonia har¨¢ patrullar por las playas pelotones de polic¨ªa que amonestar¨¢n y multar¨¢n a quien haga top less. No han tardado por aqu¨ª los ultraconservadores de "Hazte o¨ªr" en pedir "playas limpias y decoro", reclamando "espacios de uso familiar" ya que presuponen que los ni?os se pueden espantar o tener pensamientos impuros ante un par de tetas a remojo. Por las mismas hay quien aconseja que ni los m¨¢s peque?os puedan estar en la playa con el culito al aire, con la excusa de que hay mucho pederasta suelto. Es lo mismo que culpabilizar a una violada por llevar la falda "demasiado" corta.
Hablando de traseros, me alegro de que Buenafuente haya ganado el pleito a quienes publicaron el suyo sin permiso. Y de que haya quedado de manifiesto otra vez la zafiedad de tele-Espe, ella tan de alta cuna, cuando S¨¢nchez Drag¨® y Arrabal, cobrando una pasta de la empresa p¨²blica, se l¨ªan a debatir en Telemadrid si la pilila del primero es tirando a azul o "m¨¢s bien rojita". Luego dicen de El Jueves.
Por contra, varios cuerpos (por sus respectivas mentes) me han causado admiraci¨®n: el sudafricano Pistorius, atleta con piernas de fibra de carbono que quiere competir con los "normales". Robert Millar, escoc¨¦s rey de la monta?a que desapareci¨® durante cuatro a?os para emerger pedaleando como Philippa York. Isidro Esteve, piloto de raids parapl¨¦jico que dice que la vida es un regalo que hay que disfrutar. Piero Paci, escalando el punto m¨¢s alto de los Apeninos para celebrar su 89 cumplea?os (y sigue haciendo planes).
Hasta pronto, disfruten de las vacaciones.
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