Goldoni, puerta hacia el futuro del teatro

Arlequines virtuales, Pantalone en vaqueros, Rosaura en minifalda... Los personajes goldonianos revelan su eternidad en esta apuesta que, bajo el lema Goldoni y el nuevo teatro europeo, culmina hoy.

La Bienal del Teatro apost¨® por Goldoni como un paso necesario, una puerta hacia el futuro de un teatro vivo en manos de los j¨®venes, de los nuevos actores y directores que aqu¨ª han compartido escena con las vacas sagradas, los iconos incontestables como Ugo Gregoretti, Lina Wertm¨¹ller o la interesante reescritura de Marcello Scuderi.

"?No a Sarkozy, s¨ª a la Bienal del Teatro!", dijo Mnouckhine, en respuesta al apoyo de ciertos intelectuales de izquierda al presidente

Una de las versiones m¨¢s aplaudidas por p¨²blico y cr¨ªtica ha sido La familia del anticuario, dirigida por Llu¨ªs Pascual, con escenograf¨ªa de Ezio Frigerio y trajes de Franca Squarciapino, y las sorpresas vitales de Il feudatario (reescrito por Leticia Russo y dirigido por Pierpaolo Sepe, en coproducci¨®n con Cl¨¢sicos de Alcal¨¢), con un plantel de actores maravillosos. Y sobre todo La bottega del caff¨¨, seg¨²n Rainer W. Fassbinder, y adaptado y dirigido por Tiziano Turci. De Hungr¨ªa lleg¨® la gran sorpresa con A h¨¢bor¨² (La guerra), de G¨¢bor Zs¨¢mb¨¦ki con el Teatro Katona de Budapest, montajes que se podr¨¢n ver en Espa?a a partir del pr¨®ximo oto?o.

Como ¨²ltima manifestaci¨®n veraniega de la Bienal de Venecia (am¨¦n del sacrosanto festival de cine a fines de agosto), tras la poco alentadora muestra de artes visuales y el pol¨¦mico festival de danza dedicado a Eros y el Cuerpo, el evento global m¨¢s importante de Europa en cuanto a reuni¨®n de las manifestaciones art¨ªsticas en todas sus ramas cierra el caluroso est¨ªo con el teatro y con Carlo Goldoni como tema central. La idea de Mauricio Scaparro, su director art¨ªstico, era enfocar al cl¨¢sico autor teatral del siglo XVIII hacia el XXI, con m¨¢s de 500 j¨®venes actores y futuros estudiosos del teatro venidos de toda Europa, adem¨¢s de Marraquech y de Estambul, y reunidos en un campus universitario con performances, filmes alternativos, montajes nuevos y mesas de debate. Para muchos, en este campus est¨¢ no s¨®lo la esperanza, sino la sabia de la Bienal del Teatro.

Anteayer por la tarde hizo su aparici¨®n en Venecia Ariane Mnouckhine (Boulogne Billancourt, 1939), que anoche recibi¨® el Le¨®n de Oro honorario a la carrera. Mnouckhine, que ya hace unos d¨ªas levant¨® ampollas en Francia con sus declaraciones, se ratific¨® en su expresi¨®n: "?No a Sarkozy, s¨ª a la Bienal del Teatro!", en una airada respuesta vital a una oferta de condecoraci¨®n por parte del Estado franc¨¦s, y al extra?o apoyo que ha recibido el dignatario galo de los intelectuales de izquierda. Mnouckhine, fundadora en 1964 del legendario Th¨¦¨¤tre du Soleil, amante de la Am¨¦rica Latina y de la India, vital directora del ya cl¨¢sico filme Moli¨¨re, apareci¨® con los pelos de Beethoven y vestida como tramoyista en faena, dispuesta a reivindicar La Cartoucherie como espacio abierto a los j¨®venes, pero con los pies en la tierra de hoy: "No ven¨ªa aqu¨ª desde 1975, pero siento un eco vivo de entonces, importante, profundo, de memoria cercana". Hablando cort¨¦smente en italiano, sigui¨®: "Lo del Le¨®n de Oro a una carrera no me gusta, me da la sensaci¨®n de que he terminado, y eso no es verdad en absoluto. Vivo en el teatro, respiro teatro; esa relaci¨®n vital es lo importante. Yo propongo los espect¨¢culos que me gustar¨ªa ver. El p¨²blico que va al teatro va siempre con una enorme esperanza, tanto art¨ªstica como humana. Y si encuentra sobre la escena una tragedia, mejor que sea all¨ª". Mirando el techo de b¨®veda descascarillada a lo Tiepolo, concluy¨®: "El teatro de la utop¨ªa puede cambiar el mundo. Ma?ana no, pero el teatro puede ser honestamente un grano de arena contra la barbarie, es ¨²til dentro de la desesperaci¨®n contempor¨¢nea. La utop¨ªa no representa una paz atemporal, sino una tempestad perpetua: el teatro es un camino". Como lo ha sido este festival, con m¨¢scaras crueles y evolucionadas junto a las cl¨¢sicas. Como dijo Scaparro, "este teatro que hacemos, que buscamos, es un estadio de libertad posible". Goldoni resulta un buen veh¨ªculo de emociones y sendas.

Otros premios de esta Bienal del Teatro han sido el Le¨®n de Oro del Futuro a la ?cole des Ma?tres, que dirige el cr¨ªtico del diario La Repubblica, Franco Quadri, alma de la legendaria revista teatral Sipario, y la placa Ch¨¨discena a la mejor adaptaci¨®n contempor¨¢nea de un texto goldoniano a Tiziano Scarpa por su versi¨®n de L'ultima casa, montado por la compa?¨ªa veneciana Pantakin con direcci¨®n de Michele Modesto Casarin.