Oligopolios de la informaci¨®n

Podemos leer en la prensa de hoy la noticia de la compra del Dow Jones, grupo editorial que controla The Wall Street Journal, por parte de News Corporation del magnate de la informaci¨®n Rupert Murdoch. Este australiano, antes de crear News Corporation, en 1980, ya era poseedor de: The Australian; The Sun; News of the World; The Sunday Telegraph; The San Antonio Express News, y The New York Post. Posteriormente, se ha hecho con el control de The Times y The Sunday Times. Adquiri¨® la Twentieth Century Fox. Lanz¨® Fox Television Network. Compr¨® entre muchos otros a Harper & Row. Crea Fox News y New World Comunications, adem¨¢s de Sky Italia. Uno de sus hobbies fue la compra del equipo L.A. Dodgers, que posteriormente vendi¨®.

La actuaci¨®n de la Fox fue clave en el recuento de votos en Florida, cuando Bush y Gore se disputaban la presidencia de Estados Unidos.

Este l¨ªder de la comunicaci¨®n hizo algo m¨¢s que apoyar la guerra de Irak: a trav¨¦s de sus medios demoniz¨® al enemigo para satisfacci¨®n de John Howard, Tony Blair y George Bush. Su recompensa la obtuvo con flexibilidad de las leyes antimonopolio y los permisivos oligopolios de la informaci¨®n. El gran poder de los medios cada d¨ªa tiene una fuerza mayor tanto pol¨ªtica como econ¨®micamente. As¨ª podemos echar la vista atr¨¢s y analizar el caso venezolano donde se llega a promover un golpe de Estado que frena Ch¨¢vez. La prohibici¨®n posterior de algunos medios demuestra el choque de poderes que se produce por estas circunstancias. Caso como el surcoreano, en el que su presidente Roh Moo-Hyun tildaba a los medios de tir¨¢nicos y cre¨® un grupo de prensa en Internet. O el de Berlusconi en Italia, controlando los medios privados del pa¨ªs, que no dud¨® en adecuar las leyes a sus negocios.

Una gran mayor¨ªa de estos magnates tienen una l¨ªnea de pensamiento conservadora. Prueba de ello es el Grupo Globo en Brasil, frenando las ideas progresistas de Lula. En el caso alem¨¢n tenemos al ultraconservador Springer, que controla el 23% de la prensa del pa¨ªs. Otra prueba m¨¢s de estos oligopolios es el caso de Arnaud Lagardere en Francia.

Adyacente a estos oligopolios e intr¨ªnsecamente unidos a ellos se produce la menor competencia y pluralismo que desembocan en una menor calidad que mira los rating y el consumo.