Investigado un laboratorio cercano a la granja donde comenz¨® la fiebre aftosa

Expertos brit¨¢nicos en salud y seguridad tomaron ayer el control de un complejo de investigaci¨®n y producci¨®n farmac¨¦utica que las autoridades han identificado como posible origen del brote de fiebre aftosa detectado el pasado viernes en el sur del pa¨ªs. Localizado a pocos kil¨®metros de la granja infectada, en el condado de Surrey, el complejo aloja la sede gubernamental del Instituto de Salud Animal y el laboratorio de la farmac¨¦utica Merial Animal Health, que el mes pasado produjo una nueva vacuna contra la fiebre aftosa. La cepa del virus utilizado es como el detectado en las 40 vacas sacrificadas el fin de semana.

Los inspectores de Salud y Seguridad centraron ayer su investigaci¨®n en los laboratorios de Merial Animal Health, l¨ªder mundial en la investigaci¨®n y producci¨®n de vacunas contra el virus de fiebre aftosa. Propiedad de las farmac¨¦uticas Merck y Sanofi-Aventis, la compa?¨ªa estadounidense comparte instalaciones con el principal instituto p¨²blico brit¨¢nico en salud animal (IAH, en sus siglas en ingl¨¦s), en el complejo de Pirbright, a unos cinco kil¨®metros de la granja afectada por la infecci¨®n.

Merial produjo, el pasado 16 de julio, una nueva vacuna con una cepa de virus que, de acuerdo con los resultados del laboratorio, coincide exactamente con la detectada en la granja Woolfords, en la localidad de Normandy, en el condado de Surrey. Identificada como 01 BFS67, esta cepa no hab¨ªa infectado antes a ganado europeo, pero s¨ª se aplica en pruebas de laboratorio y producci¨®n de vacunas. Merial detuvo inmediatamente la producci¨®n de la vacuna.

Los investigadores sospechan que el virus salt¨® del laboratorio a los prados donde pastaban las vacas infectadas, que fueron sacrificadas el pasado s¨¢bado. A¨²n deben confirmar las sospechas y, una vez descartada otra fuente posible de la infecci¨®n, deben descubrir el conducto de la transmisi¨®n del nuevo brote de fiebre aftosa en el Reino Unido. La farmac¨¦utica defendi¨® la seguridad de sus laboratorios. "Mientras Merial tiene completa confianza en la integridad de nuestra bioseguridad, y nuestra investigaci¨®n inicial no muestra infracci¨®n alguna en nuestros procedimientos, la investigaci¨®n est¨¢ en una fase demasiado prematura para determinar la fuente de la infecci¨®n", se?al¨® en un comunicado.

El primer ministro Gordon Brown, que interrumpi¨® sus vacaciones nada m¨¢s confirmarse el brote de fiebre aftosa, prometi¨® ayer desvelar los resultados de la investigaci¨®n en las pr¨®ximas 48 horas. "Debemos contener, controlar y, luego, erradicar la enfermedad", dijo ayer Brown. Mientras, el ¨¢rea acordonada se extendi¨® a un radio de 10 kil¨®metros.

Veto a la exportaci¨®n

La zona controlada incluye las instalaciones de Merial y del IAH, donde tambi¨¦n se han practicado ensayos con la misma cepa de virus en las ¨²ltimas cuatro semanas. En declaraciones a la BBC, el director del instituto, Martin Shirley, asegur¨® que "no se han infringido" las normas de seguridad en el principal centro de investigaci¨®n del Reino Unido en enfermedades infecciosas en animales.

La identificaci¨®n del complejo de Pirbright como fuente de la infecci¨®n tiene una doble lectura. Por una parte, podr¨ªa ser la mejor garant¨ªa de que el brote de Surrey es un caso aislado o, al menos, de que no dar¨¢ pie a una epidemia similar a la de 2001, cuando el virus se propag¨® por grandes ¨¢reas de Reino Unido. La enfermedad no se ceba con igual fuerza en un animal infectado con el virus de una vacuna y, seg¨²n los expertos, el peligro de transmisi¨®n es tambi¨¦n menor. La suspensi¨®n en los movimientos de animales y el veto a la exportaci¨®n de carnes y l¨¢cteos se mantienen vigentes de todas formas.

Por otra parte, la confirmaci¨®n de que el virus procede de un laboratorio suscitar¨¢ dudas sobre el nivel de control en las instalaciones de una compa?¨ªa privada o de un instituto financiado por el Gobierno de Londres. "Ser¨ªa una noticia extraordinaria, porque las organizaciones responsables de frenar cosas como la fiebre aftosa ser¨¢n efectivamente responsables de empezarla", se?al¨® ayer el l¨ªder conservador, David Cameron, en su primer comentario cr¨ªtico hacia el Ejecutivo de Brown desde que salt¨® la alarma en Surrey.

La fiebre aftosa afecta al vacuno, ovino y porcino, pero no es com¨²n en los humanos. El virus es altamente infeccioso y debilita la capacidad del animal de producir leche y merma la calidad de su carne. El sacrificio de los animales suele responder a razones econ¨®micas. Por ello, numerosos expertos llaman la atenci¨®n sobre el hecho de que la fiebre aftosa es end¨¦mica en partes de ?frica, Asia, India y Sudam¨¦rica. "Se han acostumbrado a vivir con ella", apunt¨® ayer Sir Brian Follet, presidente de la Royal Society, en un art¨ªculo publicado en The Sunday Times.