Cuba noquea a los desertores
Los dos campeones mundiales de boxeo deportados por Brasil tras abandonar el equipo cubano aguardan en La Habana su castigo
Los dos boxeadores cubanos que desertaron en Brasil el 22 de julio, deportados a La Habana el pasado lunes como indocumentados, permanecen retenidos en casas de protocolo [residencias para los invitados de las autoridades], a las que tienen acceso sus familiares, a la espera de las "tareas decorosas y en favor del deporte de acuerdo con su conocimiento y experiencia" prometidas por Fidel Castro. El abanico de funciones posibles para Guillermo Rigondeaux, de 26 a?os, dos veces campe¨®n mundial de aficionados de peso gallo, y para Erislandy Lara, de 24 a?os, campe¨®n mundial welter, es amplio: boxear en torneos locales, entrenar p¨²giles, ojear nuevos talentos o barrer el ring.
Cualquier cosa menos volver a formar parte de una delegaci¨®n cubana de boxeo, seg¨²n Castro, que ayer arremeti¨® contra los dos deportistas en un art¨ªculo del diario oficial Granma. "El atleta cubano que abandona su delegaci¨®n es como el soldado que abandona a sus compa?eros en medio del combate", escribe el l¨ªder cubano, que no aparece en p¨²blico desde una grave operaci¨®n intestinal, hace un a?o. Despu¨¦s de acusar a los "tiburones de la mafia" de buscar "carne fresca", Castro anuncia que, ante los pr¨®ximos Juegos Ol¨ªmpicos y para evitar deserciones, las autoridades deportivas analizan la posibilidad de cambiar la lista de boxeadores o "no enviar delegaci¨®n alguna". "Cuba no sacrificar¨¢ un ¨¢pice de su honor y sus ideas por medallas de oro ol¨ªmpicas", concluye.
Un promotor alem¨¢n ofreci¨® a los dos cubanos un contrato de medio mill¨®n de euros
Fidel Castro dice que Cuba podr¨ªa no enviar a su equipo de boxeo a los Juegos Ol¨ªmpicos
Las deserciones de cubanos son frecuentes porque los est¨ªmulos ideol¨®gicos, e incluso materiales, ofrecidos por la revoluci¨®n a sus atletas de ¨¦lite dif¨ªcilmente pueden competir con las multimillonarias bolsas del deporte profesional. M¨¢s que las supuestas drogas ingeridas en R¨ªo de Janeiro, el medio mill¨®n de euros apalabrado por Rigondeaux y Lara les hab¨ªa dejado fuera de combate antes de su participaci¨®n en los Juegos Panamericanos. Los boxeadores, casados y con hijos, viv¨ªan sin grandes privilegios, aunque con autom¨®vil propio, en un pa¨ªs con graves carencias en los sectores del transporte, la vivienda y la alimentaci¨®n. "Yo lo he visto a Rigondeaux beber ron de la pipa", dice una persona que asegura haberlo sorprendido amorrado al grifo de una barrica de aguardiente.
Cierta o no la an¨¦cdota, si los premios fueran m¨¢s cuantiosos en Cuba probablemente se reducir¨ªa el n¨²mero de deserciones, se?ala una fuente oficiosa. La decisi¨®n de los deportistas no es f¨¢cil: independientemente de su grado de lealtad revolucionaria, mucha, poca o ninguna, a la mayor¨ªa les apasiona su patria, les duele dejar a sus familias y temen represalias. El Gobierno procura cuidar a sus atletas, pero poco puede hacer con las millonadas manejadas en las grandes ligas de b¨¦isbol o campeonatos del mundo estadounidenses.
Selectivamente, los mejores reciben cantidades importantes, aunque muy inferiores a las ganadas en las citas internacionales, y otros, como el campe¨®n de salto de altura Javier Sotomayor, premio Pr¨ªncipe de Asturias, viven holgadamente en la isla. Las compensaciones son, sin embargo, insuficientes cuando tiburones como el alem¨¢n de origen turco Ahmet ?ner, de 34 a?os, director de la empresa Arena Box Promotions, maquinan la deserci¨®n de Rigondeaux y Lara con un contrato de medio mill¨®n de euros y cinco a?os a su llegada a Alemania. Les adelant¨® algo para el viaje. El plan se puso en marcha en R¨ªo. Los dos boxeadores no se presentaron al pesaje previo a sus combates y fueron descalificados. A partir de entonces, la secuencia de los hechos es confusa. "Usted ha hablado tambi¨¦n de presiones por el Gobierno cubano a las familias [de los boxeadores], ?a qu¨¦ tipo de presiones se refiere?", le pregunt¨® a ?ner la cadena alemana Deutsche Welle. "Por Dios, estamos hablando de un pa¨ªs comunista. Pierden sus coches, les quitan las casas, se les mete miedo, reciben visitas inesperadas". "?Piensa seguir intentando contratar a boxeadores cubanos?". "Si surge la oportunidad, estoy siempre dispuesto". Su empresa cuenta con los campeones ol¨ªmpicos cubanos Odlanier Sol¨ªs, Yan Barthelemy y Yuriorkis Gamboa, que desertaron en Venezuela en diciembre cuando se entrenaban con vistas a los Juegos Panamericanos, en los que tambi¨¦n desertaron el jugador de balonmano Rafael da Costa Capote y el segundo entrenador de gimnasia, L¨¢zaro Lamelas.
Lo cierto es que los dos p¨²giles repatriados se corrieron una juerga en el balneario de Araruama, a 100 kil¨®metros de R¨ªo, acompa?ados por un abogado cubano y otro alem¨¢n, a sueldo de Arena Box Promotions, antes de manifestarse arrepentidos, seg¨²n las declaraciones iniciales de la polic¨ªa. Pero los planes se complicaron. La versi¨®n m¨¢s cercana a lo sucedido indica que los pasaportes de Rigondeaux y Lara estaban en poder del jefe de la delegaci¨®n cubana en los Juegos Panamericanos y, por tanto, necesitaban otros documentos para viajar. La idea de sus patrocinadores era conseguir dos provisionales de la Embajada alemana para viajar a Alemania, donde se le prometi¨® permiso de residencia y trabajo. Pero para ello deb¨ªan pedir asilo pol¨ªtico.
El tr¨¢mite no era sencillo y deb¨ªa resolverse primero en Brasil, donde ten¨ªan que aguardar el resultado y nuevas gestiones antes de poder salir con un nuevo pasaporte. Las trabas legales se suced¨ªan, y los dos j¨®venes comenzaron a dudar en el hotel de R¨ªo adonde fueron traslados desde el balneario con vigilancia policial; despu¨¦s, a impacientarse y, finalmente, a decir que se hab¨ªan equivocado: quer¨ªan volver a Cuba. "Los brasile?os no quieren problemas con nosotros", se?ala un periodista cubano. Las declaraciones de Fidel Castro contra "la mafia que se dedica a seleccionar, comprar y promover boxeadores cubanos (...) usando m¨¦todos psicol¨®gicos refinados y muchos millones de d¨®lares", denotaban un enfado may¨²sculo, y la inminencia de gestiones pol¨ªticas para desmontar la operaci¨®n de Ahmet ?ner.
Las buenas relaciones entre Cuba y Brasil, desde la investidura de Lula da Silva, fueron determinantes. Prueba de ello son las declaraciones del comisario brasile?o Felicio Laterca, responsable de la investigaci¨®n, al asumir como "factible y probable", la novelesca versi¨®n de los dos boxeadores. "Alegan que esos dos empresarios los sacaron de la Villa Panamericana y les dieron una bebida energ¨¦tica que les hizo pasar mal", declar¨®. "A partir de ah¨ª, aparentemente dopados, los llevaron a un bar y los comenzaron a pasear hasta alojarlos en un hotel en un balneario. Ellos dijeron que no sab¨ªan en d¨®nde estaban y que estaban aislados y sin comunicaciones". Ayer, Guillermo Rigondeaux declar¨® a la agencia Efe que no desert¨®, sino que tuvo "un problema de indisciplina". Y a?adi¨® que "espera orientaciones" de las autoridades cubanas para definir su futuro.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.