"Buscamos hacer lo que no hacen las escuelas americanas"
El directivo analiza las razones del desembarco del instituto en Nueva York y los planes para el futuro
El a?o 2007 ha sido muy agitado para la escuela de negocios IESE, que figura entre las mejores de todo el mundo. No s¨®lo porque cumple sus 50 primeros a?os de vida, sino porque acaba de anunciar su desembarco en Nueva York y una ampliaci¨®n de sus instalaciones que duplica su superficie. Adem¨¢s, IESE ha sido el marco de un acto controvertido donde 1.000 empresarios se reunieron en marzo pasado para reivindicar con su presencia un aeropuerto de primera l¨ªnea para Barcelona. De estas y otras cuestiones habla Jordi Canals, director general de la instituci¨®n.
Pregunta. ?Qu¨¦ objetivo persiguen al instalarse en Nueva York?
Respuesta. Cada vez existen m¨¢s empresas americanas que quieren tener proyecci¨®n internacional. Les preocupa c¨®mo desarrollar a las nuevas generaciones de directivos y c¨®mo hacer su organizaci¨®n realmente global. Existen unas doscientas empresas en esta situaci¨®n. Pero las universidades y escuelas americanas tienen una visi¨®n internacional pobre y limitada, aunque son extraordinarias en investigaci¨®n. Creemos que podemos aportar nuestra experiencia de escuela internacional con perspectiva multicultural, nuestros casos, nuestro material cient¨ªfico. Por otra parte, en la poblaci¨®n universitaria americana existe un deseo creciente de realizar estudios en escuelas fuera de Estados Unidos. Y, tras los espa?oles, la nacionalidad de la que tenemos m¨¢s estudiantes de nuestro MBA es la norteamericana.
"Hemos actuado con sentido de misi¨®n, formando directivos que concibieran que una empresa no es s¨®lo para hacer dinero, sino que tiene un valor social"
"Las universidades y escuelas americanas tienen una visi¨®n internacional muy limitada, aunque son extraordinarias en investigaci¨®n"
P. Entonces, ?realmente es un intento de competir con las escuelas americanas como Harvard o Wharton?
R. Ahora ya competimos en parte con ellas con nuestro programa MBA. Es cierto que competiremos un poco m¨¢s que ahora, s¨ª, pero no se trata tanto de hacerles la competencia directa. Buscamos hacer cosas que las escuelas americanas no hacen. Un mercado que quiz¨¢ es peque?o, donde las escuelas americanas estar¨¢n dentro de un tiempo, pero donde hoy no est¨¢n.
P. Tambi¨¦n han hablado de crear en Nueva York un centro de investigaci¨®n.
R. S¨ª. Crearemos un centro de investigaci¨®n de negocios globales. En tres a?os queremos tener 15 investigadores en Estados Unidos, que trabajen de forma regular con nuestros profesores, y que escriban casos y documentaci¨®n sobre estas empresas americanas con perspectiva internacional y su problem¨¢tica. Tambi¨¦n buscamos que los profesores de IESE puedan tener una plataforma donde divulgar su investigaci¨®n entre empresas americanas. Por otra parte, podemos ofrecer programas para directivos con experiencia que no se ofrecen en Estados Unidos en estos momentos. Y buscamos reforzar, claro, nuestra capacidad para atraer estudiantes americanos a IESE. Y tambi¨¦n captar a m¨¢s profesores americanos.
P. ?Alguna otra escuela europea ha emprendido este camino?
R. No. No hay programas a medida de otras escuelas europeas para esas doscientas empresas americanas en las que pensamos, en su sede corporativa central. Son un mercado no abordado.
P. ?Qu¨¦ impacto estiman que tendr¨¢ esta estrategia en su crecimiento?
R. No nos planteamos el desembarco en Nueva York como una v¨ªa de crecimiento. Al menos a corto y medio plazo. Pensemos que Harvard lleva 20 a?os creciendo en ingresos un 1% al a?o. IESE crece al 6% o 7% al a?o. Ya es mucho. Y no podemos crecer mucho m¨¢s, por una cuesti¨®n de calidad. No podemos ni queremos meter a m¨¢s de 60 alumnos en una clase. Podr¨ªamos tener m¨¢s clases, pero har¨ªan falta muchos m¨¢s profesores, y los buenos no son tan f¨¢ciles de encontrar, y a tiempo completo. Pensamos m¨¢s en el impacto cualitativo sobre los profesores y los alumnos que en el cuantitativo.
P. Pero s¨ª est¨¢n en fase de crecimiento. La ampliaci¨®n de Barcelona casi ha duplicado la superficie de su campus.
R. Est¨¢bamos al l¨ªmite de nuestro espacio desde hac¨ªa tiempo. Al plantear una ampliaci¨®n, pod¨ªa hacerse en t¨¦rminos reducidos o pensando en el largo plazo. La limitaci¨®n f¨ªsica no es la m¨¢s importante, pero no pod¨ªa ignorarse mucho tiempo m¨¢s. Es un proyecto para los pr¨®ximos 25 a?os. El proyecto ha costado 37 millones de euros. De los que 24,5 millones han sido aportados por 150 empresas y casi 2.000 antiguos alumnos. El resto, IESE.
P. ?Por qu¨¦ se decidieron por Barcelona, pese al crecimiento de Madrid?
R. Las restricciones de espacio eran mayores en Barcelona. Eso no excluye que, si hay que hacer una ampliaci¨®n en Madrid m¨¢s adelante, por supuesto se haga. Adem¨¢s, IESE naci¨® hace 50 a?os aqu¨ª y tambi¨¦n hay algo de mensaje de nuestro compromiso con Barcelona.
P. ?Qu¨¦ asignaturas pendientes tiene IESE?
R. Nuestra historia demuestra que hemos hecho las cosas de un modo algo diferente. Optamos por una formaci¨®n con profesores a tiempo completo cuando en Europa eso no exist¨ªa. Adem¨¢s, la escuela ha actuado con un sentido de misi¨®n, pensando en formar a directivos que concibieran que una empresa no es s¨®lo para hacer dinero, sino que tiene un valor social. IESE ha tirado de las empresas. Llev¨® por primera vez a las aulas a altos directivos de empresas espa?olas, introdujo el primer programa MBA de Europa, el primer MBA biling¨¹e del mundo, el primer doctorado... Pues bien. En los pr¨®ximos 50 a?os, nos gustar¨ªa continuar tirando de la transformaci¨®n de las empresas, ayudarlas a tener planteamientos nuevos y a asumir retos nuevos. Nuestro reto es seguir teniendo un claustro de profesores de primera y seguir siendo innovadores y pioneros.
P. IESE, junto a ESADE y al Instituto de Empresa, est¨¢n entre las primeras escuelas del mundo. ?Tienen mucho impacto estos ranking?
R. Es cierto que las escuelas espa?olas ocupan lugares muy destacados en estos ranking. Cada una de ellas, con su propio posicionamiento de mercado, con su apuesta. La verdad es que en el caso de los programas para directivos, los ranking no tienen mucho impacto. Pero por lo que respecta a los programas MBA es cierto que los estudiantes tienden a escoger entre varias escuelas, de entre las que aparecen en los primeros lugares. Es importante figurar entre las primeras 20 escuelas del mundo.
P. ?El MBA sigue siendo el programa estrella de IESE?
R. S¨ª, pero ya s¨®lo supone un 40% de nuestra actividad, con 900 alumnos.
P. ESADE reclama ayudas p¨²blicas para las escuelas de negocio. ?Y ustedes?
R. Nosotros no. Pero s¨ª pedimos a la Administraci¨®n mayor capacidad de acceso en concursos de investigaci¨®n, que a menudo est¨¢n reservados a universidades p¨²blicas. Por ejemplo, el Proyecto Ram¨®n y Cajal nos permiti¨® recuperar a dos grandes profesores espa?oles que estaban en Estados Unidos.
Una reflexi¨®n sobre el modelo de gesti¨®n para El Prat
Pregunta. IESE ha sido escenario de un acto con 1.000 empresarios partidarios de una descentralizaci¨®n de AENA y a favor de potenciar el aeropuerto de El Prat. ?No teme asociar la escuela a una reivindicaci¨®n de este calado pol¨ªtico?
Respuesta. Creo que cualquiera que estuviera en ese acto acad¨¦mico dif¨ªcilmente podr¨ªa hacer una interpretaci¨®n partidista. Se limit¨® a que tres profesores dieran su punto de vista sobre la cuesti¨®n. Invitamos a representantes del aeropuerto, a las aerol¨ªneas... Fue una reflexi¨®n sobre c¨®mo una ciudad donde IESE tiene su campus debe afrontar el desarrollo de sus infraestructuras. Pero hemos corrido el riesgo de que alguien pueda intentar instrumentalizarlo.
P. Los organizadores han hecho una propuesta cuatro meses despu¨¦s del acto. ?Cree que sirvi¨® para algo?
R. No fue un acto contra nadie. Y s¨ª creo que ha tenido mucho eco en distintas comunidades aut¨®nomas. Nosotros declinamos participar en la definici¨®n de un posible modelo de gesti¨®n para el aeropuerto. No queremos entrar en el debate pol¨ªtico. Pero creemos que una escuela que quiera servir a las empresas no puede rechazar discutir, reflexionar sobre infraestructuras como las de El Prat.
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