Fusi¨®n de recetas populares
PALOCORTADO,cinco a?os rompiendo moldes en M¨¢laga con detalles de refinamiento
Se cumple ahora algo m¨¢s de un lustro desde que el cocinero Miguel Palma montase un modelo de negocio que romper¨ªa moldes en M¨¢laga. Un restaurante situado en un noble caser¨®n de principios del siglo pasado, donde, con un particular sentido est¨¦tico, ha sabido fusionar lo r¨²stico con el dise?o superponiendo recetas populares a conceptos de vanguardia. Desde entonces y por efecto de suaves retoques, su vistoso local ha ido ganando. Entre sus ¨²ltimas incorporaciones figura el nuevo oyster bar (s¨®lo para ostras y champ¨¢n).
En suma, un establecimiento de gesti¨®n din¨¢mica en el que concurren mil detalles de refinamiento. Entre ellos, el talante de su servicio femenino, siempre risue?o, que parece sacado de un casting de altura; o la elegancia de su p¨¢gina web (www.palocortado.com), de una modernidad exultante.
PALOCORTADO
6. - Avenida de Pr¨ªes, 4. M¨¢laga. Tel¨¦fono: 952 60 88 61. Cierra domingos. Entre 45 y 60 euros por persona. Huevos rotos con patatas, 8,70 euros. Lubina con habitas, 21. Secreto de cerdo ib¨¦rico, 15. Pastel chorreante de chocolate, 7,80.
Pan ... 6
Caf¨¦ ... 6,5
Bodega ... 6,5
Aseos ... 6
Ambiente ... 8
Servicio ... 7,5
?Cu¨¢l es el tal¨®n de Aquiles de esta casa? Sus irregularidades cotidianas. La incapacidad del propio patr¨®n para evitar altibajos de un d¨ªa para otro, o conseguir que todos los platos de una misma mesa tengan un nivel equiparable. Algo incomprensible en quien demuestra semejante sensibilidad est¨¦tica y se ha formado junto a maestros de la talla de Manolo de la Osa o Mart¨ªn Berasategui.
Como testimonio de sus desatinos est¨¢ el gazpachuelo de crust¨¢ceos, caldo concentrado y demasiado salado, p¨¦sima versi¨®n de la delicada receta malague?a. O el chupito de caldillo de pintarroja al lim¨®n, escualiforme desaborido que produce un caldo ins¨ªpido, que en este caso se anula con los toques de piment¨®n y lim¨®n con que Palma lo adereza. Menor desatino se aprecia en los bell¨ªsimos lomos de sardinas bajo velo de gelatina, que ali?a con un queso rallado que neutraliza, en parte, el sabor del pescado.
?Falta de punto?, ?exceso de sal y de aderezos? Defectos que no le impiden salir airoso en otras recetas. Son correctas las croquetas de chorizo; aceptables los huevos rotos con patatas al aceite de pimientos; impecable el taco de lubina asada a baja temperatura, y s¨®lo discretos los ravioles de manitas de cerdo, bastante resecos.
HAMBURGUESA
LA CARTA se estructura en apartados (caldos para beber, platos de temporada, guisos, a la parrilla) que se alejan de convencionalismos. Entre sus mayores aciertos figura el empleo de una parrilla de carb¨®n para asar chuletones, solomillos y entrec¨®s de vacuno, costillas y secretos de cerdo ib¨¦rico, y hasta pechugas de pato. Fuera de carta se ofrece una gran hamburguesa con carne de los bueyes del Esla, suculenta, aunque las guarniciones desmerezcan. Por 37 euros, se eligen dos platos y postre, una copia de la f¨®rmula que puso en pr¨¢ctica hace meses el hotel Urban madrile?o.
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