Los ex mineros acampan en Boliden

Como ya hicieran en diciembre de 2001, los ex mineros de Boliden que ahora trabajan en la Empresa de Gesti¨®n Medioambiental (Egmasa) han acampado de forma indefinida en la corta de su antigua mina. As¨ª, contin¨²an las protestas por lo que ellos consideran "despido" de 22 compa?eros del plan de restauraci¨®n medioambiental de la zona, afectada en 1998 por un vertido t¨®xico.

Hace seis a?os, el encierro en la mina se prolong¨® durante 93 d¨ªas. Ahora, son 75 los trabajadores que han acampado y se quedar¨¢n "por lo menos dos o tres meses", seg¨²n indic¨® Juan Jos¨¦ Fern¨¢ndez, portavoz de los mineros de Aznalc¨®llar (Sevilla). Los mineros anunciaron que no dormir¨¢n en casa hasta que "se depongan los despidos" y consigan una entrevista con el consejero de Empleo, Antonio Fern¨¢ndez, y el de Innovaci¨®n, Francisco Vallejo, para solucionar su futuro laboral.

Los mineros rechazaron la oferta de la Junta para recolocarles en distintos puestos en el yacimiento de Cobre Las Cruces, que iniciar¨¢ la explotaci¨®n "en el primer cuatrimestre de 2008", seg¨²n fuentes de Innovaci¨®n. Pero los trabajadores piden ser contratados directamente por esta empresa y no por "subcontratas", ya que de otro modo no tienen "garant¨ªas" de un trabajo estable.

El delegado de Innovaci¨®n, Ciencia y Empresa, Francisco ?lvaro -que no quiso hacer declaraciones sobre la movilizaci¨®n y la oficina de prensa de la consejer¨ªa remiti¨® a lo expuesto en d¨ªas anteriores-, ha solicitado a estas empresas que concreten el tipo de empleo, la categor¨ªa y el salario que ofrecer¨¢ a los ex mineros de Boliden. ?lvaro explic¨® que en 2002 la Junta firm¨® un acuerdo de protocolo con los sindicatos y con los mineros para recolocar a los trabajadores afectados por el cierre de Boliden en el plan de abandono y de restauraci¨®n y que, de momento, los acuerdos se est¨¢n cumpliendo.

La Junta asegura que los trabajos se han terminado y que no hay despidos, sino que los contratos "han finalizado". Por su parte, los mineros aseguran que queda trabajo "para otros 15 a?os" en el proyecto de restauraci¨®n y abandono, por lo que exigen continuar con las tareas de limpieza y mantenimiento de la antigua mina de Aznalc¨®llar.

La empresa p¨²blica Egmasa se hizo cargo del plan de limpieza y la Administraci¨®n acord¨® la ejecuci¨®n del proyecto por los trabajadores de Boliden Apirsa, gestora de la mina siniestrada. Entre otras cosas, los mineros se encargan del control del centenar de pozos existentes, impiden que el agua contaminada vierta de nuevo en el r¨ªo Guadiamar, evitan filtraciones y limpian las antiguas escombreras.

Fern¨¢ndez advirti¨® del "problema medioambiental que se cierne sobre la zona" si se abandona el proyecto de limpieza y mostr¨® su convicci¨®n en que los grupos ecologistas "no tardar¨¢n en salir a la palestra". Adem¨¢s, asegur¨® que son un referente para los trabajadores de Delphi: "Cuando vean nuestra situaci¨®n van a preguntarse qu¨¦ compromisos est¨¢ amarrando la Administraci¨®n".

Los mineros aseguraron ayer que continuar¨¢n las movilizaciones. Sin dar fechas concretas, dijeron que ir¨ªan a Sevilla y "a Madrid si hace falta, a ver a Zapatero". En referencia a otros encierros, no quieren "batir r¨¦cords". "Se avecinan unos meses sin nuestras familias, pero tenemos que hacerlo porque es nuestro pan y el de nuestros hijos. A la Administraci¨®n ya no le importa Do?ana ni el Guadiamar ni el problema social; nos dicen que no hay trabajo, pero ah¨ª hay escombreras llenas de productos t¨®xicos".

Los mineros cargaron con maletas, colchones, sillas, tiendas de campa?a y comida para hacer frente a los d¨ªas de calor y noches de fr¨ªo junto a la inmensa balsa rojiza. Y Fern¨¢ndez alert¨® del peligro de desprendimiento de las rocas en la mina abandonada. "Esta monta?a est¨¢ cediendo, se mueve dos cent¨ªmetros cada semana" asegur¨® Francisco se?alando la corta.

?l empez¨® a trabajar en el mantenimiento mec¨¢nico de Boliden en 1984. Su esposa, que es la ¨²nica mujer de las 75 personas que acamparon, ya trabajaba all¨ª tres a?os antes. Ella no hablaba y se emocion¨® durante el camino. En casa han dejado a sus tres hijos, de entre siete y 16 a?os: "A¨²n no les hemos contado bien lo que nos pasa, su abuela pasar¨¢ con ellos las noches".

Hace casi 10 a?os, la rotura de la balsa que verti¨® seis millones de metros c¨²bicos de aguas ¨¢cidas y lodos contaminados en Aznalc¨®llar provoc¨® que muchos trabajadores luchasen por sus puestos de trabajo. Los mineros recordaban ayer que a finales de 2001 pasaron 93 d¨ªas en este mismo lugar; y en marzo de 2002, unos 400 trabajadores se encerraron durante 11 d¨ªas en la catedral de Sevilla.