Una remontada con mejor estilo

Una evidencia en el estreno de la Liga: tanto el Real Madrid como el Atl¨¦tico han hecho prop¨®sito de enmienda. Como es l¨®gico, a estas alturas est¨¢n lejos de la excelencia, pero ambos se han maquillado, hoy son m¨¢s pl¨¢sticos.

Los rojiblancos pagaron su falta de aplicaci¨®n defensiva; el Madrid nunca especul¨®

Un gui?o meritorio en el caso del campe¨®n, capaz de despedir a un t¨¦cnico en lo alto del podio por falta de estilo. Una apuesta valiente por parte del Atl¨¦tico, que, lejos de sufrir un ataque de p¨¢nico por la marcha de Fernando Torres, ha cargado las bater¨ªas. Con estos trajes, uno y otro dirimieron un duelo un tanto dislocado, pero en¨¦rgico, sin concesiones, sin especulaciones. Con los dos equipos de cara, el partido result¨® entretenido, de ida y vuelta. Eso s¨ª, algo no ha cambiado en este Madrid, que sigue abonado a las remontadas. La de anoche, con mucho mejor estilo que aquellas que le condujeron al trono hace un par de meses.

A falta de que encajen algunas piezas, son varios los futbolistas fortalecidos por la mutaci¨®n. Mientras se acoplan los fichajes, el nuevo ideario madridista ha revitalizado a jugadores como Ra¨²l y Robinho, protagonistas indiscutibles, junto a Sergio Ramos, del bienintencionado partido de su equipo. El capit¨¢n, brioso como siempre, despega la temporada como segundo delantero, agua bendita para un futbolista para el que el ¨¢rea no tiene trampas. Como demostr¨® con un excelente cabezazo que sell¨® el empate local. Cerca del gol Ra¨²l es feliz; el tajo nunca se le ha discutido. El caso de Robinho es otro. Ha madurado con su selecci¨®n y en este Madrid con mayores ansias ofensivas cuaja mejor. Robinho, como la gran mayor¨ªa de sus compatriotas, laten de otra forma cuando tienen la pelota, su ¨²nico sustento. Necesitan sentirse protagonistas. Entonces mejora su estado de ¨¢nimo y hasta son capaces de multiplicar su actividad. Frente al Atl¨¦tico, Robinho fue un pu?al constante, un tormento para Pern¨ªa, su presunto marcador. Animado por Robinho y Ra¨²l y agitado por Sergio Ramos, el Madrid camufl¨® sus viejos problemas. Se defiende mal en todas las suertes del juego, y en las jugadas con la pelota detenida, a¨²n peor. Para muestra, el tanto de Ag¨¹ero, que a los 58 segundos, tras un c¨®rner lanzado por Pern¨ªa, remat¨® tan s¨®lo en el segundo palo como antes hab¨ªa peinado la pelota Ra¨²l Garc¨ªa en el primer poste. Mientras, Pepe, el nuevo central, y Cannavaro, el mismo del a?o pasado, en actitud contemplativa. Nada nuevo delante de Casillas, por donde Drenthe exhibi¨® sus alergias defensivas.

Tampoco por esa v¨ªa ha mejorado el Atl¨¦tico, que no ha trastocado la defensa y, por tanto, con Pablo a la cabeza, mantiene las mismas deficiencias. Es un equipo tan poco aplicado que sucumbi¨® ante una jugada que el Madrid ha ense?ado durante toda la pretemporada. A Aguirre y sus alumnos les hubiera bastado con rebobinar el v¨ªdeo del Teresa Herrera para adivinar la partitura preferida de Guti en las faltas laterales cercanas al ¨¢rea. En Riazor, frente a Os Belenenses, amag¨® con el centro pero se aline¨® con Saviola en el balc¨®n del ¨¢rea. Anoche lo repiti¨®, esta vez con Sneijder como aliado en los morros de los escobas rojiblancos.

Blando en defensa, el Atl¨¦tico no pudo sacar provecho de su nueva vanguardia. Fuera o no casual, sin el foco de Torres, Ag¨¹ero se dej¨® ver como pocas veces. M¨¢s chisposo que de costumbre, el argentino fue un incordio constante para el Madrid, aunque, como la temporada pasada, fall¨® en el ¨²ltimo minuto. De nuevo solo ante Casillas, el kun tir¨® una vaselina. La del curso pasado vol¨® por encima del larguero; esta vez le frustr¨® el portero madridista. Pero al Atl¨¦tico le faltan luces en el medio campo. Aguirre ha prescindido de Luccin, y Costinha ha sido despedido; con Maniche y Ra¨²l Garc¨ªa, que apenas dieron se?ales de vida, tampoco le alcanza. Y quien m¨¢s lo puede pagar es Forl¨¢n, que necesita suministros. Aguirre le quit¨® a uno de los pocos que tiene, Simao, muy animado en el segundo tramo, y el uruguayo apenas tuvo opciones de remate. Rebajado por su mala defensa, el Atl¨¦tico claudic¨®. El Madrid, con otro gui¨®n, de nuevo dio la vuelta al marcador. Con otra est¨¦tica tambi¨¦n se puede remontar. Y este Madrid tiene mejores intenciones.