El dise?o es una ONG

Sebasti¨¢n es miope y de peque?o era especialmente torpe. A menudo, se le ca¨ªan las gafas o romp¨ªa los cristales. Mientras esperaba a que el ¨®ptico se las arreglara, intentaba apa?¨¢rselas experimentando algunas t¨¦cnicas para ver mejor. Hasta que descubri¨® que, mirando a trav¨¦s de un peque?o agujero en una hoja o cart¨®n, consegu¨ªa enfocar los objetos y leer. Un d¨ªa se lo cont¨® a Nacho Mart¨ª, dise?ador barcelon¨¦s, quien empez¨® a darle vueltas al asunto.

"Si expones una tostadora en un museo, el p¨²blico reflexionar¨¢ sobre ella", dice Paola Antonelli, del MoMA

Los proyectos est¨¢n precedidos por un intenso trabajo de campo y convivencia directa con los futuros usuarios

El resultado de sus pensamientos viaj¨® el pasado fin de semana hasta Copenhague para competir con los proyectos finalistas de los premios INDEX:, el concurso de dise?os m¨¢s innovadores del mundo: unas gafas estenopeicas, hechas de pl¨¢stico troquelado, que, en lugar de los cristales, prometen mejorar los problemas de visi¨®n con decenas de min¨²sculos agujeros. "Unas gafas para todo el mundo, ya que su producci¨®n supone s¨®lo unos 20 c¨¦ntimos de gastos. Podr¨ªan ayudar a los ni?os miopes de los pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo, que no pueden acceder a las tradicionales gafas de cristal, a aprender a leer", cuenta Mart¨ª desenfundando su proyecto. "Yo tengo problemas de visi¨®n, pero con ellas puedo al menos ver la televisi¨®n o leer. De alguna manera, me ayudan", explica.

Porque las maravillas del dise?o contempor¨¢neo pueden llegar hasta una aldea africana, en una escuela en Amazonas, en el escenario de un atentado o en un campo de f¨²tbol de Kenia. Y as¨ª lo decidi¨® el jurado de estos premios, una especie de Oscar del sector dotados con 100.000 euros.Las gafas estenopeicas de Mart¨ª no ganaron, aunque tienen la misma filosof¨ªa de los proyectos galardonados. Se acab¨® aquello de las creaciones bonitas, pero in¨²tiles. El colmo de la creatividad puede ser, por ejemplo, un curioso dispositivo de primeros auxilios parecido a una seta. Cuatro j¨®venes dise?adores del Imperial College y del Royal College of Art de Londres idearon una Tongue sucker (ventosa para la lengua) tras los atentados del 7 de julio de 2005. "Si no se abre una v¨ªa respiratoria antes de que lleguen los servicios de emergencia, no tiene ning¨²n sentido que lleguen", explic¨® Graeme Davies, uno de los inventores. Este aparato es una peque?a bola de goma que consigue succionar la lengua y permite ayudar a un herido incluso al que no tenga noci¨®n de primeros auxilios. Y tiene la caracter¨ªstica que el jurado y su presidente, Nille Juul-S?rensen, que han valorado centenares de proyectos, consideran fundamentales para el futuro de este sector: "Ayudan a vivir mejor".

As¨ª, pretende mejorar la vida otro de los dise?os premiados, el proyecto que el argentino Francisco G¨®mez Paz ha creado junto al italiano Alberto Meda. Una "botella solar" que, cuando est¨¢ expuesta a la luz del sol, consigue purificar el agua y eliminar las bacterias gracias a un pl¨¢stico especial y a un sistema open source elaborado por una empresa suiza. "Se nos ocurri¨® el a?o pasado, durante un viaje por Etiop¨ªa", cuenta G¨®mez. Seg¨²n c¨¢lculos de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud, cada d¨ªa mueren en el mundo unos 4.500 ni?os por beber agua no purificada. En cambio, con seis horas de exposici¨®n al sol, la botella promete eliminar las bacterias y los g¨¦rmenes que provocan hepatitis A o fiebre tifoidea. Otros de los dise?os galardonados han sido una pr¨®tesis extremadamente resistente que costar¨¢ s¨®lo seis euros, un coche deportivo completamente el¨¦ctrico con autonom¨ªa de m¨¢s de 300 kil¨®metros y capacidad de alcanzar una velocidad de m¨¢s de 200 kil¨®metros por hora, seg¨²n sus inventores, y el dise?o del ordenador port¨¢til de bajo coste que el estadounidense Nicholas Negroponte, director del Media Lab del Massachusetts Insistute of Technology, pretende producir para las escuelas de los pa¨ªses del Tercer Mundo. Seg¨²n el autor del dise?o, el suizo Yves B¨¦har, el reto consist¨ªa en convertir un ordenador en un objeto amable y divertido. "La mayor¨ªa de los ni?os de ?frica, por ejemplo, no ha visto nunca una pantalla, lo que puede convertirse en una barrera comunicativa. Para que puedan comunicar con el ordenador, he convertido las antenas que reciben las se?ales Wi-Fi en unas especies de orejas de conejo", explicaba antes de recibir el premio.

Se trata de proyectos precedidos por un intenso trabajo de campo, que pasa por la convivencia con los futuros usuarios y la experiencia directa sobre el terreno. Porque el oficio de un dise?ador puede ser, a veces, muy parecido al de un etn¨®logo. Paola Antonelli, responsable del departamento de dise?o del MoMA y miembro del jurado de INDEX:, recuerda por ejemplo c¨®mo el dise?o puede afectar a la sociedad: "Imag¨ªnese el formato y la estructura de las papeletas electorales... En 2004, en Estados Unidos, muchas de ellas confundieron a los electores. El dise?o es muy importante para el destino del mundo. No s¨®lo la decoraci¨®n, como la llaman los estadounidenses, sino la creaci¨®n de proyectos y objetos que ayuden a mejorar la vida", apunta desde Nueva York en una conversaci¨®n telef¨®nica. ?Las piezas de museo tambi¨¦n pueden cambiar el mundo? "Colocar un prototipo en un museo suele estimular a los ciudadanos y abrir nuevas perspectivas. Si expones una tostadora, el p¨²blico intentar¨¢ reflexionar sobre ella", explica.

Y a partir de la semana que viene, por ejemplo, el p¨²blico tendr¨¢ la oportunidad de reflexionar sobre el dise?o espa?ol en la exposici¨®n Living Spain, organizada por el Ministerio de Asuntos Exteriores precisamente en Copenhague. Las l¨¢mparas surrealistas del joven valenciano H¨¦ctor Serrano, los coloridos puf de Ana Mir, los botijos contempor¨¢neos de la empresa madrile?a Diez+Diez encontrar¨¢n a los espectadores en la Biblioteca Central. Y es que la capital danesa es considerada tambi¨¦n una de las capitales mundiales del dise?o. All¨ª, desde los a?os cincuenta, trabajaron y crearon sus c¨¦lebres sillas y piezas de mobiliario Arne Jacobsen, B?rge Mogensen, Hans J. Wegner y Verner Panton. Y all¨ª han acudido tambi¨¦n este verano algunos j¨®venes espa?oles para una inmersi¨®n total en el universo del design. David Salazar, Isabel In¨¦s y Alejandro Rey-Stolle, de entre 25 y 34 a?os, trabajan en algunos proyectos en grupos integrados por dise?adores de medio mundo. Como Salazar, dise?ador de interiores, quien lleg¨® a Copenhague con las ideas claras. "Hab¨ªa tenido ocasi¨®n de ver, en Madrid, alguna residencia de ancianos de aspecto realmente terror¨ªfico, y me pareci¨® importante intentar mejorar las condiciones de vida de los internos", explica, sentado en una terraza del centro de Copenhague. ?C¨®mo hacerlo? "Llevando, por ejemplo, los muebles de cada uno a la residencia, o dise?ando una pantalla t¨¢ctil que les permita interactuar con los familiares y ver una galer¨ªa de fotos de los nietos, o asistiendo a los que deciden dejar de vivir", cuenta. Porque el estilo de vida, o el civismo, tambi¨¦n puede formar parte de una idea global de dise?o.

Como la creaci¨®n de una especie de Energy Bank, o banco ecol¨®gico. ?sa es una de las ideas de la madrile?a Isabel In¨¦s, que estudia proyectar un modelo viable para el consumo responsable a escala dom¨¦stica, basado en un sistema de peque?as recompensas. El canario Rey-Stolle, en cambio, prob¨® la experiencia de la ceguera, pasando un tiempo a oscuras junto a unos invidentes, para dise?ar un aparato que proporcione una sensaci¨®n parecida a la memoria visual. "Como una especie de postal para invidentes", cuenta. Una imagen preciosa que permanezca en el recuerdo y remita a otras sensaciones. "Porque el dise?o por supuesto es belleza y estilo, aunque para nosotros es mucho m¨¢s importante transmitir belleza proporcionando ayuda".