Cuando el milagro se esfum¨®

El ¨²ltimo parte m¨¦dico sobre Antonio Puerta, el que comunicaba oficialmente su muerte, fija a las 14.30 la hora del fallecimiento. Pero ni los m¨¦dicos ni el club se decidieron a hacerlo p¨²blico hasta dos horas y media despu¨¦s, cuando la noticia ya se hab¨ªa difundido a trav¨¦s de los medios de comunicaci¨®n y cientos de aficionados y curiosos se agolpaban a las puertas de la entrada de urgencias del hospital Virgen del Roc¨ªo, de Sevilla.

Los seguidores m¨¢s fieles hab¨ªan llegado incluso mucho antes, cuando las ¨²ltimas noticas oficiales de los m¨¦dicos que atend¨ªan al jugador advert¨ªan de que se encontraba en situaci¨®n "muy cr¨ªtica". "Yo sigo aqu¨ª esperando el milagro", dec¨ªa un aficionado sevillista poco despu¨¦s de las cuatro de la tarde. Hab¨ªa llegado hac¨ªa una hora con su hijo, de 12 a?os, que se secaba las l¨¢grimas con una camiseta blanca del Sevilla con el n¨²mero 16 de Puerta a la espalda. Aunque las informaciones m¨¦dicas y las caras de los allegados que entraban y sal¨ªan del hospital s¨®lo invitaban al pesimismo, muchos segu¨ªan aferrados al milagro. Una pancarta que permaneci¨® colgada durante horas a la entrada del hospital llamaba al aliento colectivo: "Tu gol nos cambi¨® la vida. Juntos luchamos por la tuya".

El representante del futbolista, Jes¨²s Rodr¨ªguez de Moya, anunci¨® para las 16.00 una comparecencia ante los medios de comunicaci¨®n. Sali¨® puntual con la intenci¨®n de comunicar la noticia, pero se vio abrumado por la marabunta y no pudo m¨¢s que darse la vuelta y regresar a la zona en la que se encontraba la familia del jugador.

El rumor s¨®lo se convirti¨® en noticia oficial pasadas las 16.30, cuando la p¨¢gina web y la radio oficial del Sevilla informaron del fallecimiento. El hospital no lo confirm¨® hasta que, media hora m¨¢s tarde, difundi¨® el comunicado de la muerte del futbolista. Personas cercanas al jugador se?alaron que el desenlace final se hab¨ªa producido algunas horas antes, pero que la dificultad de la familia para encajarlo y los tr¨¢mites para llevar a cabo la donaci¨®n de ¨®rganos aconsejaron retrasar su difusi¨®n.

Con la esperanza del milagro ya perdida, los seguidores siguieron congreg¨¢ndose a las puertas del hospital. Familias enteras vestidas con las mismas camisetas, bufandas y banderas con las que en el ¨²ltimo a?o y medio han celebrado cinco t¨ªtulos de su equipo; grupos con pancartas improvisadas; algunos, y no pocos, seguidores del Betis ataviados con su equipaci¨®n.

Uno de los primeros en llegar al centro hospitalario, una vez que el fallecimiento era ya oficial, fue Daniel Alves. Gafas de sol, camiseta y pantal¨®n negro y la mirada fija en el suelo. Era su primera aparici¨®n despu¨¦s de que se declarara en rebeld¨ªa el pasado lunes y se negara a viajar con sus compa?eros a Atenas por las reticencias del Sevilla a venderlo. Todos auguraban que le llover¨ªan los reproches de la afici¨®n, pero ayer no era el d¨ªa. Alves entr¨® cabizbajo y s¨®lo se oy¨® alg¨²n t¨ªmido aplauso.

El representante de Puerta compareci¨® por fin a las 18.30 para agradecer en su nombre y en el de la familia del jugador el apoyo de los ¨²ltimos d¨ªas. "Querr¨ªa que ese respeto se mantenga en estas horas que nos quedan para poder despedir el cuerpo de Antonio. S¨®lo el cuerpo, porque su alma siempre se quedar¨¢ con nosotros", dijo emocionado Jes¨²s Rodr¨ªguez de Moya.

Durante la tarde se sucedieron las visitas de autoridades, amigos de la infancia y compa?eros del futbolista en las categor¨ªas inferiores del Sevilla. El entrenador del filial, Manolo Jim¨¦nez, a cuyas ¨®rdenes estuvo Puerta durante varias temporadas, maldec¨ªa la suerte del jugador. "Su carrera fue espectacular, pero ojal¨¢ se fuera toda al garete a cambio de que siguiera vivo. Justo ahora que iba a conocer lo m¨¢s bonito: ser padre", afirm¨®. "Yo, que siempre he sido tan competitivo, que siempre he dicho que hay que darlo todo por ganar, hoy me r¨ªo del f¨²tbol", reconoci¨®.

La capilla ardiente, en el estadio, se abri¨® a las doce y media de la noche ante un aluvi¨®n de personas que quer¨ªan despedirse de Puerta.