El turista

Hoy estoy un poco m¨¢s cansado que estos d¨ªas. Es normal, y no porque la etapa haya sido m¨¢s dura que alguna de las precedentes, que no, sino porque hoy nos ha tocado trabajar un poco m¨¢s que estos d¨ªas. Digamos que no ¨¦ramos los l¨ªderes, pero como si lo seriesemos. El l¨ªder ayer era Devolder, del Discovery, as¨ª que fue su equipo el primero en tratar de controlar la situaci¨®n. Digo bien lo de tratar, porque como es habitual en la Vuelta, la guerra comenz¨® en el kil¨®metro cero y muchos salieron con el cuchillo afilado, as¨ª que la situaci¨®n no era muy agradable para los americanos en el primer puerto del d¨ªa.

Cuando por fin se form¨® la fuga buena del d¨ªa, y despu¨¦s de ver qui¨¦nes la compon¨ªan, vimos que tambi¨¦n pod¨ªa ser peligrosa para nuestros intereses, as¨ª que nos toc¨® colaborar con el equipo del l¨ªder. Ellos tiraban por la obligaci¨®n moral de llevar el liderato, pero tambi¨¦n porque confiaban en el belga. Nosotros lo hac¨ªamos por la misma obligaci¨®n de llevar al segundo en la general, pero m¨¢s que por eso porque confi¨¢bamos en Denis de cara a alcanzar el liderato en lo alto de Cerler. Bueno, y de no soltar el maillot oro hasta Madrid, claro est¨¢, que en eso s¨ª que tenemos todos una fe ciega. Al final, a los americanos les fall¨® el belga, y a nosotros, es decir, a los holandeses, nos respondi¨® el ruso, aunque la etapa fue para un italiano que corre en un equipo hispano-suizo. Esto es globalizaci¨®n y lo dem¨¢s son tonter¨ªas. Ahora que lo pienso, trabajando en la cabeza del grupo estaba yo junto a un australiano, un esloveno, un holand¨¦s y un asturiano. M¨¢s globalizaci¨®n. ?Qui¨¦n hab¨ªa dicho que la Vuelta era una carrera para los espa?oles? Quiz¨¢ lo haya sido en las ediciones precedentes, pero me parece que este a?o se equivoca.

Entonces eso, que ahora estoy cansado, cansado pero contento. Y creo que m¨¢s lo estar¨¦ ma?ana a estas horas, que ahora s¨ª que llevamos el liderato y ma?ana se prev¨¦ tambi¨¦n zafarrancho de combate. Mandar¨¦ la cr¨®nica desde el frente.

Lo curioso de hoy es que el hecho de ir en cabeza de pelot¨®n me ha permitido disfrutar bastante del paisaje. El d¨ªa era esplendido, la atm¨®sfera estaba transparente, as¨ª que las vistas sobre los Pirineos eran sencillamente espectaculares. Por ejemplo, mientras atraves¨¢bamos el avituallamiento, dej¨¢bamos a nuestra izquierda esa maravilla de la naturaleza que es el parque de Ordesa y Monte Perdido. Y muchos ni se enteraron. Nada, si al final de todo van a tener raz¨®n unos que en los comienzos de mi carrera deportiva -ya hace unos cuantos a?os- me dec¨ªan que estaba hecho todo un turista, con lo poco que me gusta a m¨ª esta palabra. Por tanto, ma?ana seguir¨¦ informando desde el frente... mientras hago adem¨¢s un poco de turismo.