Espa?a alega que el auge econ¨®mico le impide controlar la contaminaci¨®n

Espa?a es la China europea. Seg¨²n el Gobierno, el aumento de poblaci¨®n y el boom econ¨®mico de los ¨²ltimos diez a?os dificulta sobremanera el cumplimiento de las obligaciones ambientales -como los topes de emisi¨®n de contaminantes al aire para proteger la salud- fijados por la UE. As¨ª lo establece el segundo Plan Nacional para cumplir la directiva sobre contaminaci¨®n que el Ministerio de Medio Ambiente ha enviado a las autonom¨ªas. Aunque el ministerio se?ala que tendr¨¢ que cumplir los l¨ªmites para 2010, pedir¨¢ repartos menos estrictos en futuras negociaciones.

En octubre de 2001, la UE aprob¨® la Directiva sobre Techos Nacionales de Emisi¨®n de Contaminantes Atmosf¨¦ricos. El texto, arduo y farragoso, pas¨® desapercibido entonces, pero su importancia es enorme, al fijar para cada pa¨ªs l¨ªmites de contaminantes nocivos para la salud como el amon¨ªaco, los ¨®xidos de nitr¨®geno, el di¨®xido de azufre o los compuestos org¨¢nicos vol¨¢tiles. Muchos de estos compuestos se producen en el transporte y en la generaci¨®n el¨¦ctrica (por la quema de carb¨®n, gas o petr¨®leo) y otros en la industria qu¨ªmica.

Los l¨ªmites eran obligatorios en 2010 y, cuando quedan poco m¨¢s de dos a?os para ver el cumplimiento, el Gobierno ha enviado a las comunidades su segundo plan para cumplirlo. La situaci¨®n es que "con las medidas en curso Espa?a cumplir¨ªa holgadamente el techo de di¨®xido de azufre y muy probablemente el de amon¨ªaco. En cuanto a ¨®xidos de nitr¨®geno y compuestos vol¨¢tiles el nivel de emisiones superar¨ªa el techo" pese a haber mejorado la tendencia.

El Gobierno justifica los malos datos (en ¨®xidos de nitr¨®geno la contaminaci¨®n aumenta en vez de disminuir) en que "el periodo de cumplimiento de reducci¨®n de emisiones est¨¢ coincidiendo con un ciclo de un continuado e intenso crecimiento econ¨®mico y social [...] acompa?ado de un incremento muy significativo de la poblaci¨®n". Para reducir los ¨®xidos de nitr¨®geno es fundamental controlar el consumo de gasolina y la producci¨®n de electricidad con carb¨®n o gas.

El secretario general para la Prevenci¨®n de la Contaminaci¨®n y del Cambio Clim¨¢tico, Arturo Gonzalo Aizpiri, afirma que los argumentos no implican que Espa?a vaya a incumplir los l¨ªmites, que son una obligaci¨®n legal, sino que pone sobre la mesa la dificultad de cumplirlo. "El crecimiento demogr¨¢fico estos a?os en Espa?a no tiene comparaci¨®n y cuando se negociaron los techos para cada pa¨ªs no se pod¨ªa predecir", afirma.

El l¨ªmite se pact¨® calculando que el Producto Interior Bruto crecer¨ªa un 67% entre 1990 y 2010 y de seguir el ritmo actual llegar¨¢ al 58%. La poblaci¨®n prevista en 2010 era de 40,57 millones de habitantes y ya va por 44,11. Adem¨¢s, algunas tecnolog¨ªas previstas para reducir las emisiones no han funcionado tanto como se preve¨ªa, seg¨²n Medio Ambiente. Aizpiri afirma que "Espa?a cumplir¨¢ sus compromisos" con "medidas adicionales" como la Ley de Calidad del Aire ahora en tr¨¢mite pero que en futuras negociaciones en la UE exigir¨¢ techos de contaminaci¨®n m¨¢s altos. Y esto vale para el di¨®xido de carbono causante del cambio clim¨¢tico.

Los argumentos de Espa?a son similares a los que utiliza China en los foros internacionales para negociar sobre la reducci¨®n de emisiones de gases de efecto invernadero. "China tiene otras circunstancias, pero al igual que Espa?a exige equidad y que se tengan en cuenta las emisiones per c¨¢pita. Somos la octava econom¨ªa del mundo y el 23 emisor de gases de efecto invernadero per c¨¢pita, pero somos el que m¨¢s nos alejamos de Kioto". La respuesta que suele recibir China es que tiene que crecer sin repetir los errores de los pa¨ªses desarrollados.